El 40% de la población femenina de nuestro país es maltratada, ya sea verbal, psicológica, económica, social o sexualmente. Es por esto que en nuestro país se creó el Sernam (Servicio nacional para la mujer) el cual va en ayuda de todas ellas. Sin embargo, muchas de estas no alcanzan siquiera a realizar una denuncia pertinente a tiempo en contra de su maltratador, puesto que este la asesina. Chile es uno de los países que cada año lidera la lista de mujeres asesinadas a manos de sus parejas, esposos o convivientes, siendo en Latino américa uno de los que encabeza la lista.
Por otro lado, muchas mujeres si alcanzan a realizar una demanda, a dejar constancia o en algunos casos incluso ya tienen órdenes de alejamientos en su poder, pero de igual forma sus ex parejas violan toda orden dada por cualquier autoridad, sufriendo estas mujeres las consecuencias de vivir en un país donde no hay mano dura en contra de quienes han abusado de ellas y vulnerado sus derechos.
A pesar de que en los últimos 4 años el número de víctimas ha bajado notoriamente, el nombre de nuestro país sigue encabezando la lista (listado anual 2007-2012) y las penas para estos hombres siguen siendo en el peor caso nulas. Roxane Morales, monitora de uno de los 96 centros de la mujer relata que la mayoría de los hombres golpeadores sabe que las penas en este país son muy bajas o nulas en más del 80% de los casos.
Roxane: “De 10 mujeres en general, unas 7 no quieren denunciar, y si estas son casadas el índice es mayor”
Mucho se habla sobre los problemas que puede traer consigo la instalación indiscriminada de antenas de telefonía, sobre todo, si estas son puestas cerca de hospitales, colegios o simplemente de conjuntos habitacionales. Sin embargo, todo lo que se dice respecto a estas ¿es cierto? que producen cáncer, leucemia, Alzheimer, entre una serie de enfermedades. Razones para creer esto existen muchas, pero para creer lo contrario, también.
La radiación electromagnética no necesita de un medio para transmitirse, y se asocia a las enormes antenas telefónicas, pero sobre todo, a teléfonos celulares y aparatos domésticos como el horno eléctrico. Como la silueta que deja una gota al caer, la distancia o longitud que hay entre cada onda es ínfimamente corta, por lo tanto, obtienen el nombre de microondas, consideradas peligrosas por algunos, pero que en situaciones cotidianas, son de la confianza del ciudadano para cocinar la comida “de adentro hacia afuera”. Como herramienta, “apenas se está a 20 años desde que se comenzó a utilizar como medio de comunicación”, afirmó la radióloga, Marta Ruiz.
El tema central, es que las empresas han determinado por instalar antenas, a modo de mejorar el servicio, en varias zonas dentro de la ciudad y de la región, pero a diferencia de la planificación habitual, ahora se contemplan espacios privados, y no terrenos en alturas como de costumbre, donde todavía pueden verse la mayoría de los ejemplares.
La Ley 20.599, fue promulgada el 11 de junio del 2012 para regular la instalación de las antenas y establecer límites para las empresas de telecomunicaciones. Entre todas sus especificaciones, aparece en el artículo 116, agregado E, que no “podrán emplazarse las torres soporte de antenas y sistemas radiantes de transmisión de telecomunicaciones dentro de establecimientos educacionales públicos o privados, salas cuna”, y la lista sigue. Resulta extraño que la claridad de este artículo no haya impedido que una antena esté en proceso de instalación en el territorio vecino al Mozart Schule.
Katharina Tietze(foto), fundadora del colegio Mozart en Concepción, afirmó que “la ley nace a partir de la iniciativa de la Organización Mundial de la Salud a modo de precaución, pues todavía no hay estudios que determinen a largo plazo en qué puede verse afectada la salud de las personas”. Así, declara que los parlamentarios tomaron esta recomendación y establecieron la ley referida a las antenas. Pero como siempre, esta normativa presenta vacíos, y se permite que si la antena tiene cierta altura, o si ésta se encuentra camuflada, no hay problema con las restricciones.
Es en la Calle Hierbas Buenas, número 11 en donde se instalará una antena para celulares, esta de la compañía Entel. Al hablar con el propietario del terreno en el cual se instalará la antena, Eduardo Medina, y preguntarle de forma específica su opinión respecto a los efectos negativos que supuestamente traen como consecuencia estos aparatos, respondió: ”Nosotros confiamos en Dios, puede ser que, como dice el dicho -todos tenemos cáncer y no se nos ha desarrollado-, él sabe a quién le da más carga, y también dice que no nos puede dar más carga de la que uno puede llevar, imagínense, yo tengo 5 hijos… y no hay estudios que diga lo contrario así que…”
La antena será instalada en el frontis de la vivienda, con 21 metros cuadrados del perímetro con una altura de doce metros, según lo señaló el mismo Medina.
“Hasta el momento, a pesar de nuestras intervenciones, no se ha planteado una solución y la empresa cree ahora que está cumpliendo con la ley”, destacó el jefe técnico del Mozart Schule, Joél Diaz, quien además es profesor de historia en el colegio. Joel, declaró sobre su participación junto a Katharina, la fundadora, en movimientos sociales, en juntas de vecinos, e incluso en debates cerrados con gente del Seremi y la Subsecretaria de Transporte y Telecomunicaciones. “Estamos en contra de la instalación indiscriminada de antenas y, por supuesto, que ubiquen una al lado de nuestro colegio”, explicó el docente, que entiende el asunto como una falta de respeto a la comunidad.
Vídeo grabado en medio de una manifestación efectuada por vecinos afectados y molestos ante la instalación de la antena:
En un contacto telefónico con la coordinadora de la Subsecretaría de Telecomunicaciones y Transporte, Paulina Cid, no se pudo recaudar mayor información respecto a la Ley 20.599, ni tampoco en relación a detalles de la instalación de antenas en los sectores Agüita de la Perdiz, Collao y Lomas san Andrés. Cid señaló que “existen preguntas que tenemos derecho a no responder”. Sugirió aún así, revisar la página web de la subsecretaría a modo de informarse sobre las zonas sensibles y otros detalles. En efecto, el sitio proveía de información útil, aunque muy categórica.
Inocencio Carrasco, Empresario (Ingeniería y construcción Inocencio Gaspar carrasco cisternas e.i.r.l) ha trabajado en la instalación de antenas de telefonía en diferentes lugares del país, entre ellos, en Concepción. Según lo que este informa, para quienes trabajan en su construcción el tema es complejo y más peligroso de lo que se podría pensar:
“Yo soy sub contratista, por ende no tenemos en ningún momento contacto con la compañía telefónica. La empresa para la cual trabajamos sí. La empresa operadora es la que hace el contrato directo con la compañía, pero nosotros que somos los que realizamos la obra somos los que más nos exponemos al momento en que esta la obra en pie. Si los vecinos se enojan tiran piedras, palos, cualquier cosa. Si hasta con carabineros hemos tenido que trabajar, para que nos cuiden más que nada”
Además, recalca la ignorancia con la cual actúan los vecinos, y lo inconsecuentes que son, pues todos quieren mejor señal con sus dos o hasta tres teléfonos, pero ninguno quiere una antena cerca de su casa.
Marta Ruiz, profesora asociada de la facultad de Odontología, establece que las antenas son inofensivas en comparación con los teléfonos celulares y su uso constante. “Estos aparatos, tienen un generador de microondas similar al de los hornos eléctricos, sólo que trabaja en una frecuencia mucho menor”, señaló la odontóloga encargada en el área de radiología maxilofacial. La radióloga, afirmó que el tema de las antenas, es más bien invasivo, además comenta que “podrían haber peligros, pero nada está probado aún. Todo es más por un tema de precaución que debería respetarse”. Igualmente, la doctora Ruiz pone hincapié en que las compañías no deberían ser tan desafiantes, en el fondo, no lograba entender “por qué si hay lugares altos para poner estas torres, deciden instalarlas en medio de la ciudad”.
Hoy miércoles 25 de junio, se realizó una mesa redonda en el Auditorio Emprendo de la Universidad de Concepción. En ella los estudiantes de Periodismo Etnográfico expusieron sus experiencias a partir de todo un trabajo realizado empleando los Google Glass. Dicha actividad dio inicio cerca de las 10:20 de la mañana para culminar alrededor de las 13:00 horas con la muestra tecnológica de los Google Glass y el Oculus Rift.
A la actividad estaban invitados todos los estudiantes de Periodismo de la Universidad de Concepción, los cuales, repletaron el auditorio junto con los profesores de la carrera e invitados al evento. A este dio inicio la profesora Tabita Moreno, saludando y dando a conocer tres conceptos que ayudarían a contextualizar la mesa redonda. Estos eran: Realidad virtual, Realidad aumentada y Tecnologías de vestir (Wearable Technologies). Ella, además de ser la encargada de esta presentación y organizadora, es docente de Periodismo en la misma Universidad.
Dentro del programa, estaban agendadas 5 presentaciones, las cuales, se presentaron de la siguiente manera:
Nuevos campos tecnológicos para el desarrollo de vídeo juegos.
Google Glass: Al rescate de la narración en primera persona y un aporte en casos de dificultad de desplazamiento.
Mediación tecnológica y Google Glass, el desafío de comunicar avances.
Google Glass: Diferenciación tecnológica y percepción social.
Google Glass: Cuestionamientos éticos y tecnológicos
La primera muestra fue presentada por Sebastián Saldías, Socio fundador de ZetApp Studios, la cual es una empresa tecnológica de la Región del Biobío. Sebastián hablo sobre las distintas aplicaciones que ZetApp (El cual cuenta con auspiciadores tales como Innova Bío bío y Bint) ha desarrollado. Esta empresa pretende potenciar a la región en el área del entretenimiento, generando aplicaciones para dispositivos móviles.
Culminada la presentación del fundador de ZetApp, los alumnos de quinto año de Periodismo de la UdeC, María Jesús Aguilera y Javier Cisterna, plantearon el tema “Google Glass: Al rescate de la narración en primera persona y un aporte en casos de dificultad de desplazamiento” el cual en un principio fue un desafío, ya que debieron buscar algún estudiante que tuviera una dificultad de desplazamiento dentro de la universidad de Concepción. De esta forma se encontraron con Sebastián Cid, quien cursa tercer año de Ingeniería Comercial en la UdeC proveniente de Yumbel. Él padece una enfermedad congénita que limita todas sus extremidades al punto de no poder caminar y por ello, debe trasladarse sobre una silla de ruedas.
María José y Javier le plantearon el proyecto a Sebastián, el cual quiso ser partícipe de este. Los estudiantes de Periodismo quisieron saber lo que era un día en la vida de él utilizando los Google Glass, y condensaron su experiencia en un vídeo de 4 minutos 40 que expusieron.
Luego del vídeo, la alumna agregó: “Los lentes ayudan a ver su realidad, desde su propio prisma, desde su propio punto de vista. A eso es a lo que vamos con la tecnología al rescate de la primera persona. Es una historia sin un narrador intermediario. Nos ayuda a entender, a comprender y a empatizar su propia historia desde esta tecnología de vestir”.
Minutos más tarde, Maximiliano Ortíz expuso el tercer tema dado a conocer dentro del programa. El alumno hizo este en base a una visita al terrario donde se realiza la reproducción de las ranas de Darwin, todo esto queriendo mostrar a los asistentes del evento, las falencias y fallas que poseen los Google Glass al momento de realizar una nota periodística. Entre ellas destaco el no zoom que poseen, lo poco que logran captar el audio del entrevistado frente a lo alto que se escucha la voz de quien entrevista, la poca capacidad de establecer una empatía con el entrevistado y los movimientos de los ojos, que Maximiliano calificó como movimientos similares a un “temblor”.
La conclusión del estudiante fue: “Se pueden utilizar los Google Glass para periodismo sí, pero en complemento a otras herramientas” Y Los errores de la nota que él realizo, fueron apropósito, esto con el fin de mostrar las falencias del aparato.
Cynthia Yobánolo y Natalia Contreras, también alumnas de periodismo, posterior a la muestra de Maximiliano se presentaron para hablar sobre las diferencias tanto sociales como tecnológicas que poseen los Google Glass en comparación a otra cámara, como por ejemplo, una Go Pro. Ellas mediante dos vídeos grabados de forma simultánea con los aparatos anteriormente mencionados mostraron las disimilitudes de estos. Hablaron sobre los públicos objetivos de los dispositivos y dejaron abierta la pregunta ¿Para qué público objetivo fue creado el Google Glass?
La última presentación estipulada dentro de esta actividad, se llevó a cabo por los alumnos Consuelo Arévalo y Daniel Erbo, encargados de hablar sobre la ética. Ellos utilizaron los Google Glass en medio de una manifestación estudiantil y grabaron lo ocurrido en esta con el pequeño instrumento audiovisual. Con esto, buscaban mostrar como un contenido parte de la individualidad, pero tiende a colectivizarse para poder constituirse como un contenido audiovisual que informa. Dentro de este punto, Consuelo señala que los contenidos de Google Glass son tanto independientes como dependientes a la vez, son independientes de los cortes ideológicos de un medio oficial, pero son dependientes tanto del criterio del periodista al momento de registrar como de las personas que están dispuestas a compartir, a complementar y a colaborar con ese contenido que fue compartido en las redes sociales que dispone Google.
Si queremos utilizar este aparato para hacer periodismo, debemos saber que un buen periodismo parte de buenas historias, pero también necesitamos que gente quiera ser parte de esas historias, pero no siempre las personas quieren ser parte de estas cuando uno utiliza un Google Glass. Es un tipo de tecnología invasiva.
Daniel concluyó su tema hablando de otras desventajas que ellos dentro de su trabajo, encontraron que tenían los Google Glass: Necesidad de wi-fi en todos lados o de forma contínua para que estos operen de manera óptima, la mala calidad visual (en cuanto a vídeo) y la poca duración de la batería.
Entre los periodistas que asistieron al evento, ya sea por iniciativa, interés personal o por razones varias, se encontraban periodistas que ahora son docentes de la carrera, otros que trabajan como reporteros y varios dedicados al área tecnológica, como la periodista Carola Calderón, la cual ante la pregunta ¿Qué le pareció esta instancia y el tema central tratado en esta? Respondió:
“Interesante, poder tener al alcance de la mano, o del ojo, tecnología que es nueva, y que como decían bien los chiquillos en la exponencia, no es masiva, y no está al alcance de cualquier bolsillo en este momento. Lo que sí, lo mismo que comentaba adentro en la sala, lástima que todavía para nosotros signifique un dispositivo más para captar vídeos y no más que eso. Pero espero que de verdad podamos ir desarrollando aplicaciones y tecnologías asociadas que permitan un mejor uso al lente. Y ahora, para el periodismo, así directamente como está planteado en estos momentos no le veo mayor utilidad.
De esta forma, se puede resumir que la actividad fue didáctica, atrayente tanto para periodistas egresados como también en formación y que las discusiones sobre los desafíos éticos y potencialidades de este tipo de tecnología dentro del periodismo tienen varias aristas, las cuales muchos tienen ganas de explorar y entender mejor.
Así como en el post anterior se habló sobre el problema de las antenas en la población “Agüita de la Perdiz” en Concepción, ahora trataré sobre el mismo tema, pero ubicado en el Barrio Universitario de la misma comuna.
Si, barrio universitario por el hecho de que la Universidad de Concepción es la que destaca dentro del lugar, sin embargo, hay sala cunas y colegios que cuentan con niños pequeños aledaños al lugar, los cuales están en contra totalmente de que antenas de telefonía celular se instalen cerca de sus establecimientos educacionales.
Uno de los iconos del movimiento en contra de las antenas cercano al barrio universitario es el Colegio Mozart Schule. Este es considerado una de las caras visibles del movimiento “No antenas en mi barrio” y como tal, ha sido parte importante en la organización de marchas contra las antenas y también en juntas, foros y organizaciones que se han dado en torno a la problemática (El pasado viernes 6 organizó un foro dentro del establecimiento, y también junto a coordinadoras de las juntas vecinales del programa “no antenas en mi barrio” contribuyó a que él Dr. Andrei Tchernitchin pudiese dar la charla “Telefonía celular: efectos de la radiación electromagnética sobre la salud” en el auditorio de medicina el pasado 16 de mayo).
En este momento, vecinos de varias villas, poblaciones e incluso apoderados y funcionarios de colegios se han reunido para tratar el tema de las antenas de telefonía en la comuna.
La región ya cuenta con casi el 15% de las antenas a nivel país, lo cual sin duda, es una cifra preocupante.
Gracias a esta alarmante cifra, sumadas las antenas que están prontas a instalarse, es que muchos vecinos han decidido movilizarse, con el fin de pedir ayuda, de hacer notar sus inquietudes y dar a conocer sus preocupaciones.
Vecinos de la población “Agüita de la Perdiz” se han mostrado realmente afectados con la situación, puesto que algunos de ellos están a tan solo 6 metros de una torre que emite radiación a todas horas.
La señora Luisa Contreras, de 66 años de edad, vive a 11 metros de una de estas torres, ella comenta que ha buscado ayuda incluso en estudiantes de Ingeniería en telecomunicaciones, que ha tratado de contactarse con autoridades y que ha hecho todo lo que está a su alcance con el fin de buscar ayuda.
“Hace un tiempo me quise ir de aquí, pero mi casa ahora vale tan poquito, que con lo que me paguen por ella, no se adonde me podría ir” comentó al momento de preguntarle sobre su situación.
Al igual que ella, hay muchos vecinos con el mismo problema, los cuales más molestos están ahora, tras enterarse que las antenas serán camufladas. Esto no disminuye en nada los niveles de radiación emitidas por ellas, sin embargo, pretenden que este sea una especie de “tapa boca” para quienes viven cerca de ellas.
El pasado viernes 16 del presente mes, visitó la Universidad de Concepción uno de los actuales candidatos a la presidencia del Colegio Médico de Chile el Doctor Andrei Tchernitchin, quien es reconocido por sus trabajos de investigación sobre los efectos que traen consigo las antenas de celulares y por su participación en la redacción de la ley que regula a las antenas de telefonía móvil.
El Médico, egresado de la Universidad de Chile, dio una charla respecto a los efectos negativos para la salud que traen consigo las radiaciones electromagnéticas emitidas por las antenas. Actualmente, en la comuna de Concepción este es un tema de controversia, debido a la instalación desmedida de antenas en la comuna, las cuales más que ser un generador de cobertura para celulares, es una fuente constante de radiación, la cual a futuro puede ser la causante de variados tipos de canceres.
Los empresarios de las líneas telefónicas y pertenecientes al área de construcción en más de una ocasión han asegurado que las antenas no causan daño alguno para la salud. Sin embargo, el Doctor Tchernitchin junto a un amplio equipo médico, han trabajado en conjunto para hacer una serie de investigaciones empíricas, las cuales han arrojado alarmantes resultados para quienes viven cerca de estas instalaciones. Entre estos destacó el aumento de cáncer cerebral en adultos, mayores posibilidades para las embarazadas de ser víctimas de abortos espontáneos y un 15% más de probabilidades de padecer leucemia.
Gran parte de los asistentes a la charla eran vecinos de la conocida población “Agüita de la Perdiz”, quienes últimamente se han visto muy afectados por la instalación de antenas incluso al lado de sus casas, y apoderados del Colegio Mozart Schule, ya que, tras este se está construyendo una antena de telefonía. Los apoderados de dicho colegio se han movilizado a tal punto de realizar foros y marchas con el fin de detener la construcción de la antena aledaña al establecimiento educacional de sus hijos.
Además, entre los asistentes a la charla se encontraban médicos, estudiantes de medicina, periodismo, trabajo social e incluso estudiantes de Ingeniería civil en telecomunicaciones, quienes se mostraron preocupados ante la situación de los vecinos. Por ello, ofrecieron ir a medir los índices radioactivos existentes en sus viviendas, esto con el fin de buscar soluciones prontas y no seguir exponiendo más la vida de personas que no se benefician en nada con una antena de más de 30 metros de alto a solo seis metros de su residencia.