Almacenamiento Óptico


Lectura/grabado de discos ópticos

Bueno, antes de mencionar los distintos dispositivos de almacenamiento óptico es importante explicar la tecnología que permitió que esta nueva gama de productos fuera creada, ya que los CD’s y sus predecesores no servirían para nada de ser por esta. El almacenamiento óptico surge a finales del siglo XX y consta de dos partes fundamentales para su uso; la grabación y la lectura, las cuales serán explicadas más a fondo a continuación.


A. Grabación

Para grabar una superficie plástica como la de un CD es necesaria la acción de un haz láser, este es el encargado de crear pits y lands los cuales cambian la reflectividad de nuestro disco. Los pits son zonas que el láser quema con mayor potencia por lo cual genera una zona de baja reflectividad. Los lands son todo lo contrario, zonas que mantienen su alta reflectividad inicial ya que el láser las quema con menor potencia. Según las secuencias que se generen de pits o lands tendremos unos datos u otros.
Cabe destacar que el funcionamiento de esta tecnología ha permanecido igual desde su lanzamiento, sin embargo ha sido posible aumentar la cantidad de información que puede ser almacenada gracias a cambios en los discos y/o en el láser con el que se trabaja, estos cambios serán explicados más adelante.


B. Lectura

La lectura es un proceso un tanto más complicado, por lo que decidimos dividirlo en distintos pasos para facilitar su explicación.
1. El diodo láser emite un haz de luz dirigida hacia el espejo reflectante.
2. El servo motor posiciona el haz de luz en la pista correcta del CD-ROM a base de mover dicho espejo.
3. Cuando el haz de luz incide sobre un punto de la superficie del CD, la luz refractada se recoge y se enfoca en la primera lente debajo del plato. A continuación, rebota en el espejo y finalmente se envía hacia el separador de haces de luz.
4. Dicho separador dirige el haz devuelto hacia otra lente.
5. La última lente dirige el haz de luz al foto receptor, que la convierte en impulsos eléctricos.
6. Dichos impulsos son codificados por el microprocesador y los envía por el controlador del sistema como datos.