Demonios para todos...

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Mención aparte merecen dos sitios muy pintorescos, los “Braseros de Lucifer” donde sus parrilladas son una contradictoria invitación al paraíso, y “Lucifer nigth club”, un sitio que seguramente tiene las chicas mas lindas del cielo, queda claro que hasta Belcebú tiene derecho a echar una canita al aire, no por eso va a dejar de ser la autoridad que es.

Al continuar navegando, se admira tanta diversidad de sentimientos que la palabra demonio genera, desde aquel rechazo típico del clero hasta la adicción casi mortal como la de Charles Manson quien, en un arrebato de locura, ordenó matar a Sharon Tate, una famosa actriz de los años 60, porque su perdida mente le dijo algo así como que el demonio le felicitaría por sus crímenes... La felicitación resultó ser una cadena perpetua.

Saliendo del reino de Chile y siguiendo la amplia gama de sitios en español encontramos a Lucifer en distintas partes; existen muchas investigaciones teóricas de universidades respecto al caballero colorado, españolas, colombianas, otras como la Complutense, la Bolivariana, todas fundamentan sus retóricas acerca de la existencia del ángel del mal. Luego podemos encontrar al nunca ausente fútbol en este tema, “Los diablos rojos de avellaneda”, nos dan cuenta del ego gigante del pueblo argentino que osó ponerle domicilio conocido a nuestro maligno invitado.

Una carcajada surge espontáneamente al seguir revisando el listado de temas cuando se encuentran dos o tres sitios destinados al mítico personaje infantil proveniente de Australia, el demonio de Tasmania, especie de pequeño animal devoralotodo, también aparece una lista de expresiones populares referidas al tema, desde el famoso “donde demonios deje el martillo” hasta la archi conocida frase “donde el diablo perdió el poncho”.

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