Demonios para todos...
<anterior> A esta altura
de la búsqueda, es necesario detenerse
para analizar las páginas pueriles de pornografía
ligada a Satanás,”las chicas diabólicas”, “las
diablitas del placer”, nombres de fantasía que
invitan a jóvenes (y otros no tanto) a entregarse
por completo a la lujuria y al placer que viene del mismo
azufrado subterráneo tipeando sólo una triple
w, mismo carácter que los hebreos catalogaron de demoníaco
al compararlo con la siniestra trilogía de seis que
anuncia la llegada del anticristo.
El mundo
tiene miles de sitios dedicados al señor
de las tinieblas. Al general de los ejércitos del
mal como le señalan, porque nomenclaturas hay mucho
más que sitios en la red y eso está muy claro
al buscar en alguna página diccionario.
Para el
siempre inquieto lector que quiera tener alguna orientación a fin de buscar específicamente
algo respecto al tema, debe tener en cuenta que existe una
mala noticia: la red está llena de demonios, blancos,
rojos, negros, grandes pequeños, protestantes, misioneros,
sibaritas, proxenetas, demonios del alma, del espíritu;
no hay demonios específicos, quizá porque el
ser humano es un cúmulo de demonios, valga esta recomendación, “ buscad
primero vuestros demonios y luego los de la humanidad” y
ahora llega la hora de concluir esta crónica pues
en la radio Quique Villanueva canta “Estoy hecho un
demonio” y hay que bailar como un diablo.
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