Conclusión Unos de los grandes problemas que atraviesan los niños de nuestro país, es la falta de interés hacia la lectura, teniendo esto como consecuencia, un bajo rendimiento, además de un limitado vocabulario, competencias lingüísticas, fallas ortográficas y una mala comprensión, lo que se traduce en que el estudiante no sabe lo que lee. Para ello proponemos un modo divertido, llamativo para incentivar a la lectura, de tal manera que se vuelva un hábito agradable y cotidiano. Así podrán abrir un libro como también su mente. Resumiendo el estudiante deberá ejercitar y trabajar para poder desarrollar estrategias y técnicas para una mayor comprensión de textos, lo cual le permitirá un mayor éxito en el resto de los subsectores.

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