TIME DAILY - 24 de mayo de 1999
Cuando la enfermedad vuelve
débiles a los "hombres fuertes"
El final del siglo XX encuentra a
varios países del mundo en manos
de autócratas enfermizos.

 

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El Paciente: Muammar Ghaddafi

Ocupación: auto-nombrado "un pastor que se dedica a la política"

Las enfermedades: nadie está seguro, y rumores desagradables abundan. Ghaddafi ha sido visto en público pálido, decaido y usando una silla de ruedas, aunque esto último podría ser resultado de un accidente automovilístico. Su conducta durante varias apariciones públicas ha impulsado a los observadores a especular que se encuentra fuertemente medicado.

El pronóstico: Desconocido. Ghaddafi tiene casi sesenta, pero su salud parece estarse deteriorando.

La sucesión: la Libia de Ghaddafi ha sido el show de un solo hombre desde que el ex coronel se tomó el poder en 1969. A saber, no existe una posición formal de autoridad. Cuando un "pastor" expira, no significa que laoveja vaya a elegir al reemplazante.

El impacto: Pese a la ausencia de cualquier línea de sucesión, Libia permanece cómodamente estable internamente - excepto por los periodicos reportes de intentos de asesinato contra el "pastor". Un deseo conducido económicamente de reintegrarse a la comunidad internacional, tal vez haga al sucesor de Ghaddafi mucho menos propenso a las aventuras de terrorismo global.

 

Time Daily - May 24th, 1999
When Illness Makes Strongmen Weak
The end of the 20th century finds several countries around the world in the hands of ailing autocrats.

The Patient: Muammar Ghaddafi
Occupation: Self-styled "shepherd who practices politics"
The Disease(s): Nobody knows for sure, and ugly rumors abound. Ghaddafi has been seen in public looking pale and wasted and using a wheelchair, although the latter may have been the result of a car accident. His demeanor during various public appearances has prompted observers to speculate that he's heavily medicated.
The Prognosis: Unknown. Ghaddafi is in his late fifties, but his health appears to be deteriorating.
The Succession: Ghaddafi's Libya has been a one-man show since the former colonel seized power in 1969. To wit, the eccentric fashion plate holds no formal position of authority. When a "shepherd" expires, it's not as if the sheep get to choose a replacement.
The Impact: Despite the absence of any line of succession, Libya remains fairly stable internally -- except for periodic reports of assassination attempts against the "shepherd." An economically driven desire to reintegrate into the international community is likely to make Ghaddafi's successor a lot less prone to global terrorist adventures.