|
|
Presencia
de América Latina
El viaje de los chilenos
Para
elaborar un mural se requiere algo más que
un lindo modelo en lienzo. Se necesita una concepción
distinta, cada trazo está pensado para una
arquitectura determinada (la que idealmente se creó
para recibir la obra). Por este motivo Albino Echeverría
y Eugenio Brito viajaron a Ciudad de México
en 1964, para adentrarse en las técnicas
necesarias, requeridas para pintar nuestro mural
ya que, como señaló Echeverría,
era una técnica acrílica desconocida
acá.
|
|
|
|
|
El
trabajo lo realizaron en el Museo de Antropología
de México DF, junto a González Camarena
y otros grandes artistas mexicanos como Diego Rivera,
Rufino Tamayo y David Alfaro Siqueiros.
Trabajamos
por casi ocho meses -cuenta Echeverría- quien ríe
un poco al contar que como él no tenía mucha
plata para salir, le tocó trabajar mucho junto
a González Camarena. En este aspecto lo recuerda
como una persona que no gustaba de las multitudes a la
hora de trabajar. Incluso cuando lo ayudaba, sosteniendo
la paleta de colores, él se mostraba incómodo,
hasta un poco intimidado con una presencia extraña.
Cuando
llegaron a Concepción, para pintar el mural, los
chilenos ya conocían el modo de operar del artista
y no fue tan complicado unir trabajos con él. Además,
continúa el asesor de la Pinacoteca, González
Camarena ya conocía el lugar, porque había
venido el año anterior para interiorizarse con
el modelo que seguiría para pintarlo.
|
|
|