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Pesticida biodegradable
Varios
años ha dedicado Galo Cárdenas a la obtención de
polímeros degradables. En el desarrollo de esta
línea de investigación, conoció el quitosano, un
producto natural que se encuentra en las caparazones
de crustáceos, y que constituye la base del proyecto
que busca desarrollar pesticidas biodegradables.
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Se
trata de un compuesto biocida, degradable y que no produce
daños a los organismos vegetales ni animales. Por sus
propiedades será usado para encapsular químicos para el
control de plagas. La ventaja que ofrece este proceso
de encapsulación es que permite liberar en forma controlada
los plaguicidas en el ambiente.
A juicio de Cárdenas este proyecto ayudará a solucionar,
en parte, los daños asociados el uso indiscriminado de
pesticidas como son la contaminación de napas subterráneas
y la que produce su aplicación aérea; así como los problemas
de salud que sufren quienes trabajan con ellos, ya que
el producto será aplicado en tierra, evitando la fumigación.
Otro aspecto de interés de esta iniciativa tiene que ver
con las tendencias mundiales en la producción agrícola,
que avanza paulatinamente hacia los cultivos orgánicos.
El nuevo pesticida garantiza una producción “limpia”,
que se ajusta a las nuevas exigencias de los mercados
internacionales y a las normas que seguramente Chile deberá
cumplir en el marco de su asociación con la Unión Europea.
De ahí que el proyecto considere pruebas en plantaciones
frutales de exportación de la V y VI regiones, además
de experimentos en predios de la Socabío y ensayos en
la provincia de Ñuble.
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