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El perfil de un maestro
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 Como
un verdadero maestro, clínico integral por excelencia,
docente tutorial, estudioso incansable, comunicador
social y servidor público definió el decano Octavio
Enríquez a Alberto Moreno, en su discurso en representación
de la facultad de Medicina.
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El
decano realizó un recorrido de la extensa carrera profesional
de Alberto Moreno, caracterizada por su devoción al cuidado
de la salud de los niños y su rigurosa y permanente preparación
para tan delicada como noble tarea.
Tales
cualidades jamás se han debilitado, agregó, y más aún,
han sido transmitidas por él a las generaciones que le
han sucedido.
Respecto
a su labor docente “Alberto Moreno ha representado durante
su vida profesional, a través de su quehacer clínico y
académico, la integración docente-asistencial de tanta
importancia para el desarrollo de la salud y de la educación
médica en el país durante los últimos cincuenta años”,
puntualizó Enríquez.
Al
finalizar sus palabras, el decano destacó los dos niveles
de la naturaleza del acto médico, el físico y el moral,
como aspectos inseparables e indisolubles. “El ideal del
médico no puede ser otro que el del vir bonus medendi
peritus, el hombre moralmente bueno y a la vez técnicamente
diestro en el arte de curar y cuidar a sus pacientes (...)
ése es precisamente el perfil del profesor Alberto Moreno
(...)”.
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