a
s
s
d
d
TADEO LUNA

Nueva Imperial, autor prólífico de Temuco, protagonista por esencia de la historia de la "Ciudad maldita" junto a los miembros de la cofradía secreta, manosalva, ibáñez, riffo, Magma, manríquez y carrilloo

Sinfonía inconclusa de un bastardo

(Argentina, 1987)

Hijo
Hace frío en la Tierra de la Condición del Fugitivo
Hace frío en Auschwitz
Hace frío en Quiriquina y en Piragua
En Chile Chico en Puerto Aysén y en Sierra Gorda
Hace frío    hijo.

Más
yo estoy aquí   reseco
doblado
ante una plato de culpas que no termina nunca
entre las conjuras y las sillas repartidas
como hueso y pan de hambrientos.
Cada día tiene la forma de una copa
exigiendo llenarse de sangre nueva y fresca
cada estatuto es una imagen
de la orden sojuzgando el peso del humo
y de la noche.
En cambio tú   hijo de bastardo
agitas el amor en todos los idiomas olvidados
y los trigos pisoteados se levantan a escuchar.
Todas las treguas sin rendidos son victoria
y entre esta guerra tuya
y esta gloria que me cubrió las manos
te veo a ti arrastrando una hendidura
como una sonrisa en el abdomen
y veo al miedo doblando su esqueleto
y al pavor peinándose de espanto.

No se parecen tus días a estos días
de tanto combate trasnochado al pié
del código y el rito.
No se parece este campo de batalla en que resbalo
y caigo sobre las tripas de los que ya cayeron.
No se parecen tus días a estos días.

Y yo que decía   no sabe el niño
cuán frágil y apretada es esta lucha de cristal
no sabe de tanta mano extendida en las mañanas
ni de tanto hombre creciendo más allá de su estatura.
Ya sabrá  cuando sea hombre   cantar el venceremos
ya sabrá de la miel por el hambre
mordiendo la sal dura de los días.

 

d

Pero mi niño supo de otra forma dilatada de bondad
salió en persecución de los horrores
desató el nudo del metal
y no cantó desde su luz himnos de lucha para
nuestro reposado invierno.
Esa larga noche de los aparecidos arrancó en su
cabalgadura de disparos nocturnos y corrió a besar
la rosa roja de la boca de la muerte cuando
las ametralladoras hacían música de fiesta en el teclado
blanco y negro de la pared de adobe
en la casa del caído.

Corre  corre   compañero le decía
y cuando salte de entre las cenizas como
una pedrada el nuevo siglo
no quedará más miedo   hijo
y ya no habrá banderas ni tambores ni consignas.
Si a mi paso crecían los fusiles
y detrás de mi paso estabas tú
ya no intento roturar mi cielo de victoria
ni medir la anchura de la patria con la vara
del partido ni escuchar la canción
de los lamentos tristes.

Corre compañero corre a ser humano
en este nuevo ejército de maderas claras
porque tu llama no fenece como el pez o el agua.
Enarbola al viento frío del destierro a los patriarcas
altaneros   al autócrata de turno   a las doctrinas
sordas y a la ley o fuego que dio vida
por tanta vida
a nuestro dios infértil.

Corre  compañero   porque ya sabrás que quiero
volver desde la hoguera de los renacimientos
a mirar tu siglo nuevo.
Para que sepas que no me quiero ir
para que sepas que quiero volver
desde la hoguera
de los renacimientos
a mirar tu siglo nuevo.
Para que sepas
que quiero volver
desde la hoguera
de los renacimientos
a mirar
tu siglo
nuevo…

obras en que participa este autor:

01. Malditos y benditos
02. Las iras de Dios

02. Desde el silencio




Nosotros

Nosotros ¡ Ediciones: 01 / 02 / 03 / 04 / 05 / 06 / 07 /08 / 09 /10