Un
día, los padres llevaron a Hugo al campo, a pasar una tarde
divertida, pero él no tenía ganas de jugar
con
nada, sólo quería estar solo y pensar en su
problema, que era tener un perrito.
Caminando
se alejó lentamente de la compañía de sus
padres, iba tan distraído que no se dio cuenta de una zanja
que había en el camino, resbaló y cayó al río
cercano en aquel paraje. Hugo empezó a gritar:
-Socorro,
socorooo!
Un
perro
vagabundo
que se encontraba por los alrededores, le vio que se estaba
ahogando y se tiró al agua para salvarle.
A
los gritos de Hugo pidiendo auxilio, los padres corrieron al lugar
en cuestión, y cuál sería su sorpresa, ver
como el perro con sus dientes sacaba al niño del río.
Hugo
ya fuera del agua, miró a sus papás
y
al perro y con gran alegría se abrazó al animal
agradeciéndole que le había salvado.
Desde
ese momento los padres del niño
le
concedieron su mayor ilusión, que se quedara con el perro
para siempre, por el buen gesto de haberle salvado de la corriente
del río.
Desde
entonces Hugo fue un niño alegre,divertido
y
cariñoso,
en especial con sus padres y su perrito, que le llamó
“Salvador“.
Esta
familia a partir de este caso, siempre protegió
a
los animales y
los cuidó, observando el valor que puedan tener ciertos
animales con las personas y serviciales para la humanidad.
Fin
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