| WILD WILD WEST (1999)
Con: Will Smith, Kevin Kline, Salma
Hayek, Kenneth Branagh. En el lejano Oeste (me refiero al norteamericano, por supuesto), un oficial de nombre Jim West (Will Smith, ¿necesita acaso alguna identificación?), debe enfrentar a un desequilibrado terrateniente, Arliss Loveless (Kenneth Branagh, "Enrique V", "Hamlet") que pretende apoderarse del gobierno norteamericano, mediante unas enormes y tecnológicas máquinas. Para detenerlo, West recibirá ayuda de otro agente, experto en novedosas invenciones (Kevin Kline, "¿Es o no es?, Oscar por "Los enredos de Wanda") y de Rita Escobar una sexy bailarina de cabaret (Salma Hayek, "La balada del pistolero).Cuando vamos a ver una cinta de Will Smith, no lo hacemos esperando una profunda discusión moral, sino entretención pura. Así lo ha demostrado en "Hombres de negro" o "Enemigo público". Obviaremos ese bodrio de "El día de la dependencia", que no merece ni siquiera estas líneas de desprecio. |
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Lamentablemente, "Wild wild West" se encuentra más cercana a la innombrable que a los otras mencionadas antes. Lo que más esperamos, la entretención, no está presente. La historia no tiene el ritmo deseado, ni el atractivo requerido. Las nefastas y modernas construcciones asesinas que los clips promocionales han mostrado hasta la saciedad, no las vemos hasta la media hora final, momento tardío en que agarra ritmo y atrae la atención del espectador. Mas lo aburrido no se compara a lo tonta de la historia. |
| Lo increíble es que lo absurdo no es la incorporación de tanques y modernos robots destructores a una historia del Oeste, sino que es la mediocridad de un guión que deja muchos cabos sueltos y lleno de las típicas sorpresas inesperadas que ya no impresionan a nadie. Ante esto, el personaje de Will Smith (el mismo siempre), moderno, deslenguado, de acción no divierte ni representa el menor atractivo. Kevin Kline es un comediante talentoso, pero que se nota desganado. Al parecer se dio cuenta antes de terminada, lo ridículo del filme. |
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Otro personaje explotado ampliamente por la publicidad es el de Salma Hayek (estrella con un cuerpo formidable, pero que aun no ha demostrado talento), una verdadera estafa. El cuerpo lo muestra, claro está, pero sus apariciones son breves y sin importancia. El único que sale bien parado (aunque no salva a la cinta de la muerte) es Branagh, actor y director que muestra con éxito una desconocida veta de comediante.Así, un retroceso en la carrera de un actor experto en la adrenalina, pero que ahora provoca bostezos. TONTA Y FOME. EN UNA PALABRA: MALA. |
