La renovación del «stock» de medicamentos de un laboratorio, en función de su fecha de caducidad, podría no llevarse a cabo correctamente puesto que los fabricados el día 1 de enero de 1999, con una duración prevista de dos años, no llegarían nunca a considerarse caducados al estar ausentes de la lógica del sistema el año 2000 y los sucesivos.

Pero las consecuencias de este hecho no serán todas de la misma importancia. Entre la posibilidad de retrasos en algunos pagos y una crisis económica global, hay mucha distancia.

La Federación Americana de Científicos de proyectiles nucleares ha advertido que «probablemente no pase nada, pero hay un riesgo real de que, por el mal funcionamiento de los ordenadores, se puedan dirigir los proyectiles hacia objetivos equivocados»

A principios del mes de febrero, el presidente de Microsoft declaraba que, aparte de algunos retrasos en entregas de productos y suministro de servicios, el Efecto 2000 sólo causará problemas de orden menor.

Alrededor de la misma fecha, Edward Yardeni, asesor económico en Deutsche Bank Securities, afirmaba que, a la vista de los últimos datos, las probabilidades de recesión económica mundial en el año 2000 o en el 2001 a causa del fallo de los ordenadores, eran del 70 por ciento.

Órdenes equivocadas

Aunque las posibilidades de fallos de este calibre son mínimas, lo que más preocupa a los especialistas es que los ordenadores den órdenes equivocadas al mismo tiempo y se producta un efecto multiplicador. «No cabe duda que lo mejor sería evitarlos corrigiendo anticipadamente los programas o modificando las ambiguas referencias a la fecha 00 en los microprocesadores», asegura el informe de Fundesco.

Consejos al consumidor

Uno de los consejos prodigados a los consumidores es que se aseguren que su equipo o programa informático está adaptado al 2000 preguntando al fabricante o al proveedor.Este consejo puede extenderse a todos los demás servicios (electrodomésticos, cajas fuertes, sistemas de refrigeración o telemandos).

Algunos grandes fabricantes y suministradores informan al respecto en páginas web en Internet.

Inventario de equipos

Según explica Pedro Schwartz en el informe de Fundesco, «los equipos deberían llevar una etiqueta que indicara que son «conformes 2000», pero las agencias de calidad han estado remisas en sus obligaciones.

Por ello, continúa, los hogares deberían compilar un inventario de los equipos con chips en uso, ver cuáles tienen más de dos años de antigüedad, suponer qué pasaría si fallan y tomar medidas de crisis en lo que se refiere a ordenadores personales, congeladores y frigoríficos, calefacciones o alarmas».

En algunos casos, puede que, cuando llegue el momento del cambio de milenio, no haya otro remedio que sustituir el equipo por ?otro nuevo.