Hasta el 2 de julio se desarrollará una intervención de tamizaje oftalmológico en la población penal juvenil de Concepción, estrategia que sirve para detectar algún tipo de patología ocular. El operativo está a cargo de docentes y alumnos de la carrera de Tecnología Médica, mención Oftalmología, en el marco del proyecto de extensión Desde el Servicio a la Responsabilidad Social Profesional.

Mónica Troncoso y Marta Marín, docentes responsables de la activad, explicaron que los objetivos del proyecto son entregar herramientas a la población penal juvenil para mejorar su calidad de vida, socializar a los alumnos de pregrado en su responsabilidad frente a una población joven vulnerable y empoderar a los estudiantes en su misión de servicio a la comunidad.
Para realizar las intervenciones, la Facultad de Medicina se coordinó con la Defensoría Penal Pública, para lo que se estableció un calendario de visitas. Cuatro fueron los centros seleccionados para realizar el operativo: Centro de Internación Provisoria, Centro de Régimen Cerrado de Coronel, Sección Juvenil de Concepción y Sección Juvenil de Chillán. Las evaluaciones, que comenzaron el 11 de junio concluyen el próximo martes 2 de julio, en la institución chillaneja.
En la iniciativa se efectúa una evaluación masiva a toda la población juvenil de los cuatro centros del Sename y, además, a los pacientes que requieran lentes se les realizará una evaluación refractiva, examen que aborda una medición de la vista. Asimismo, y de acuerdo a una campaña de recolección previa, los estudiantes están entregando un aporte en libros a los internos, de manera de estimular la lectura como herramienta de crecimiento personal.
Intervenciones de Fonoaudiología
Por otra parte, un intenso trabajo comunitario con cuatro instituciones vulnerables de la zona realiza la Sociedad Científica de Estudiantes de Fonoaudiología, SOCEF. La iniciativa aborda las principales áreas de la disciplina fonoaudiológica, que involucra a población infantil, población adulta, además del área voz y audiología.
La coordinación de la iniciativa está a cargo de los estudiantes de cuarto año de la carrera de Fonoaudiología Valentina Mardones, Gabriela Henríquez, Daniela Solorza, y Pamela Matus.
En el área de población infantil, los alumnos trabajan en el Hogar de Madres Adolescentes María Ayuda, donde realizan el proyecto Estimulación Temprana y Malos Hábitos Orales, a través del cual efectúan una evaluación fonoaudiológica, talleres para las madres y una intervención temprana de lenguaje a niños.
En el área audiología los futuros profesionales asisten a la Escuela Especial EGO SUM, donde llevan adelante el proyecto Evaluación Audiológica en Niños con Síndrome de Down. Allí se presentó la iniciativa a los padres y se evaluó a los pequeños con exámenes de otoscopía y emisiones otoacústicas. En caso de que los menores presenten algún tipo de alteración son derivados al Centro de Docencia Clínica de la Facultad de Medicina para su tratamiento.
En el área voz, los alumnos están interviniendo a 30 profesores de educación física del Club Deportivo Huachipato, a quienes les han realizado una evaluación vocal individual, que incluye su historia clínica, una evaluación postural, perfil vocal y análisis acústico de la voz. Una segunda etapa de este proyecto en particular, se desarrolla en sesiones grupales teórico-prácticas, en las que se les capacita en higiene y técnica vocal. Igualmente, aquellos que requieren tratamiento fonoaudiológico son derivados al CDC.
Finalmente, en el área del adulto mayor, los universitario trabajan en el Programa de Atención Domiciliaria del Hogar de Cristo de Talcahuano, donde atendienden a 100 adultos mayores y a sus cuidadores, dictando charlas sobre cómo cuidar la salud mental y la estimulación cognitiva.