Haciéndose cargo de las distintas formas de aprender
El Congreso, inserto en las Jornadas de Intercambios de Experiencias Pedagógicas en el uso de las tecnologías Desarrollando las competencias del siglo XXI en la educación, convocó a unos 200 académicos de España, Colombia, México y Chile.
Todos tenemos distintas maneras de aprender. Están los que subrayan los libros, los memoriones, los que necesitan experimentar y otros que tienen mejores resultados de estudio a una determinada hora del día. Y todos empiezan a tener espacio en el aula.
Si antes el profesor hacía su clase sobre la base del “alumno medio”, hoy debe hacerse cargo de la diversidad de formas en que sus estudiantes adquieren el conocimiento.
De eso trató el Primer Congreso Iberoamericano de Estilos de Aprendizaje, que tuvo lugar el jueves y viernes, organizado por el Centro de Tecnología y Docencia de la Universidad, CTED, en conjunto con la Universidad de Educación a Distancia de España, Uned.
La actividad -inserta en las Jornadas de Intercambios de Experiencias Pedagógicas en el uso de las tecnologías Desarrollando las competencias del siglo XXI en la educación, de CTED- convocó a unos 200 académicos universitarios y docentes del sistema escolar de España, Colombia, México y Chile.
Experto en el tema, el profesor de Didáctica y Organización de la Formación Ocupacional y de Empresa de la UNED, Domingo Gallego, explica que los estilos de aprendizaje se refieren a “una metodología que permite entender la manera diferente de ser de profesores y alumnos. Cualquiera sabe que tenemos maneras distintas de aprender, pero es necesario diagnosticarlo, que no sea sólo cuestión de intuición, y para eso hay herramientas. Y con ese diagnóstico buscamos qué tratamientos podemos hacer para que la persona aprenda mejor y el docente enseñe mejor”.
El investigador señala que existe un esquema básico con 4 estilos: el activo, el reflexivo, el teórico y el pragmático. “Todos tenemos parte de cada estilos, pero algunos tiene uno o dos más predominantes, lo importante es que todos tenemos capacidad de aprender”.
Y en todo esto la formación inicial de profesores juega un papel fundamental. “Tenemos que darles las competencias más importantes para el siglo 21 y no repetir simplemente cosas que hacemos por la fuerza de la costumbre”. También resaltó los aportes de la tecnología en los procesos formativos, siempre que su uso sea el adecuado. A su juicio son imprescindibles en este siglo, pero advierte –con el que dice es su eslogan- “por cada dólar que se gasta en un equipo, hay que otro en la formación de profesores”.
El Congreso responde al interés del CTED “de promover el conocimiento del fenómeno de aprender, del fenómeno educativo”, explica el director del Centro, Nibaldo Gatica, quien señala que en los tiempos actuales “son cada vez más fuertes las presiones, nacionales e internacionales, de ir mirando el fenómeno con una mirada distinta”.
Una forma de observar el aprendizaje con otro prisma “es mirar los estilos de aprendizaje…y es importante que esa mirada llegue a la comunidad educativa, que la tenga, que la conozca la tenga clara, porque nuestra forma de aprender va evolucionando”.
Considerando que el aprendizaje ocurre con los otros, Gatica resalta la importancia de compartir visiones y conocimientos con profesores de todos los niveles, “porque esta evolución continúa y sabemos que va a impactar desde la educación parvularia a la universitaria”.
