Anteproyecto arquitectónico
Jurado dio a conocer ganador en concurso
de reconstrucción de Ciencias Químicas
El 8 de julio se dio a conocer el proyecto arquitectónico ganador del concurso para la reconstrucción del edificio de laboratorios facultad de Ciencias Químicas. La propuesta elegida fue presentada por Francisco Javier Leiva, como arquitecto jefe; Luis Felipe Venegas como colaborador, y el ingeniero civil, Lucas Garberi.
La propuesta se presenta como un bloque poderoso y monolítico, de líneas puras y atemporales que se integra armoniosamente con el entorno del Foro y el Campanil, al tiempo que propone una interesante espacialidad. Se trata de un proyecto integral y equilibrado, que da respuesta a la imagen exterior, la espacialidad interior y los requerimientos funcionales de un edificio de esta naturaleza.
Para el rector Sergio Lavanchy se trata de uno de los hitos más importantes del proceso de reconstrucción del edificio de la facultad de Ciencias Químicas, siniestrado por el terremoto de 2010.
El 8 de julio se dio a conocer la propuesta ganadora en el concurso Anteproyecto de arquitectura: Reconstrucción del edificio de laboratorios facultad de Ciencias Químicas Universidad de Concepción. El propósito del concurso fue escoger la mejor propuesta arquitectónica de un edificio que deberá levantarse en el mismo lugar en el que originalmente se ubicaba la construcción siniestrada.
Lavanchy fue uno de lo integrantes del jurado, que fue presidido por la directora del departamento de arquitectura, Claudia Castro, y que estuvo integrado por el decano de Ciencias Químicas, Adelio Matamala; la arquitecto de la dirección de servicios, Lía Fuentealba; el exasesor urbanista de la Municipalidad de Concepción, Sergio Baeriswyl, y el presidente del Colegio de Arquitectos delegación Concepción, Claudio Arce. El director del concurso, en tanto, fue el decano de la facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía, Ricardo Utz.
Fueron 22 las propuestas válidamente presentadas de entre las cuales se seleccionaron los 3 primeros lugares y dos menciones honrosas.
El Rector destacó la alta convocatoria del concurso y señaló que para el jurado no fue fácil determinar los ganadores. “Ahora debemos comenzar la siguiente etapa: definición de proyectos de especialidades, ingeniería, llamado a licitación y la construcción. Esperamos tener este edificio en pie el primer semestre de 2013”.
Recordando que, para la construcción de este edificio, se recibió un aporte del ministerio de Educación por un monto de $2 mil 500 millones, la autoridad destacó el cumplimiento de las etapas establecidas para la construcción del edificio y dijo que “nuestros profesores e investigadores de la Facultad están contentos de cumplir con los plazos para recuperar los espacios de laboratorios y oficinas perdidos”.
Integración armoniosa
Considerando la necesidad de que el nuevo edificio se integre armónicamente con las construcciones del entorno y, muy especialmente, con el Foro, el jurado manifestó su convicción de que la propuesta elegida pasará a formar parte de un todo mayor, correspondiente al conjunto del Foro, con el Campanil como su principal ícono.
Asimismo, declararon como factor importante de su decisión, la consideración de que la obra elegida estará interviniendo un eje patrimonial que recibiera una especial distinción del Gobierno de Chile, por sus aportes a la ciudad, durante el Segundo Centenario Nacional.
El proyecto elegido fue la propuesta presentada por Francisco Javier Leiva, como arquitecto jefe; Luis Felipe Venegas como colaborador, y el ingeniero civil, Lucas Garberi.
“Esta propuesta, señalan en su fallo, se presenta como un bloque poderoso y monolítico, de líneas puras y atemporales que se integra armoniosamente con el entorno del Foro y el Campanil. Al mismo tiempo, propone una interesante espacialidad, volcada hacia el patio interior. Se trata de un proyecto integral y equilibrado, que no agrede al conjunto y que da respuesta a la imagen exterior, la espacialidad interior y los requerimientos funcionales propios de un edificio de esta naturaleza”.
El segundo lugar recayó en el equipo liderado por el arquitecto Gerardo Valle; el tercer premio lo recibió un grupo de arquitecto de nuestra facultad conducidos por Felipe Cabezas, y las menciones honrosas las recibieron los equipos encabezados por los arquitectos Fabiola Faúndez y Cristián Berríos.
Respetar una obra patrimonial
Buscar un equilibrio entre dos extremos, rehacer el edificio de acuerdo a lo existente o proponer una obra rupturista fue la opción tomada por el jurado.
El director del concurso, Ricardo Utz, señala que lo que se buscó fue no privilegiar la obra por sí sola, sino como parte de un total. “Se trata de una obra que pasa a integrar parte de un conjunto mayor, como el Foro, con un ícono que es el Campanil y, por lo tanto, la intervención debía ser muy delicada, con mucho cuidado, mucho respeto. Por eso se escogió una propuesta que se equilibra entre el respetar la imagen que de alguna manera evoca, lo que había, pero que, al mismo tiempo, da un paso al futuro en un equilibrio armónico”.
A su juicio, la gran convocatoria del concurso se debió a dos razones principales: la Universidad de Concepción como entorno de la intervención, con un campus que ha sido reconocido por su aporte urbanístico y arquitectónico, y el hecho de que la nueva obra sea realizada sobre un punto patrimonial cuyo arquitecto original fue Emilio Duhart. “Poder construir una obra junto a uno de los principales maestros de la arquitectura chilena es un gran orgullo”, dijo.
El decano de Ciencias Químicas, Adelio Matamala, manifestó su alegría y satisfacción con el fallo, señalando que con este concurso se dan pasos concretos hacia la reconstrucción de su facultad. “Ahora debemos poner estas propuestas en obra. Ello nos alienta a seguir trabajando”.
El bloque a reconstruir, consumido por un incendio provocado por el terremoto de 2010, se encuentra contiguo al Foro, tiene un total de 3 mil metros cuadrados y se incorpora al resto de las construcciones aledañas mediante un paso cubierto que es respetado en la propuesta.
Como miembro del jurado, Matamala destaca que el edificio propuesto se presenta como un acompañante del Foro, sin restarle protagonismo al ícono del campus y, al mismo tiempo, es funcional a los requerimientos en el aspecto de la investigación científica que debe albergar.