El Mes de Medioambiente
Nuestra generación es testigo de notables avances científico-tecnológicos, pero también del acelerado deterioro de la calidad del medioambiente, y los continuos esfuerzos para mejorar nuestros niveles de sustentabilidad.
En junio se celebra el mes del Medioambiente. El significado es, básicamente, reflexionar sobre los múltiples desafíos que tenemos para los próximos años. 1992 fue clave en lo que se denominó el concepto de desarrollo sustentable, ampliamente utilizado hoy para reflejar un compromiso con el ambiente. La Agenda 21, que emerge de la cumbre de la Tierra en 1992, ha sido clave para articular una agenda internacional en diferentes áreas, traducida en numerosos convenios, cuyo objetivo es mejorar nuestra relación con el ambiente. Diez años después se produjo una reunión en Johannesburgo, Sudáfrica, para evaluar los progresos y desafíos de la comunidad global a partir de 1992. Allí se constató con preocupación que los avances no fueron suficientes y que la amenaza de problemas globales como el cambio climático, la desertificación, la contaminación global etc. necesitaban una acción más urgente y preparada. Nuestra generación es testigo de notables avances científico-tecnológicos, pero también del acelerado deterioro de la calidad del medioambiente, y los continuos esfuerzos que se realizan (al menos a nivel de discurso) para mejorar nuestros niveles de sustentabilidad.
En junio de 2012 se realizará la conferencia global Río+ 20, con los temas Economía verde en el contexto del desarrollo sustentable y erradicación de la pobreza, y Red institucional para el desarrollo sustentable.
Tenemos, como país, la obligación de reflexionar en cómo producimos a partir de los recursos naturales, y cómo hacemos compatible el anhelado desarrollo económico con el ambiente. Pese a los avances, queda aún mucho por hacer, en particular en un país que invierte muy poco en ciencia y tecnología y con serios problemas en la educación universitaria. La reflexión y acción en temáticas como el cambio climático, la desertificación, el crecimiento urbano, la obtención de energía y la reducción de la pobreza, serán el eje de las discusiones en la reunión de Rio+ 20. Es lamentable constatar que en Chile aún no se discute sobre estos temas.
La incorporación de Chile a la Organización para la cooperación y el desarrollo (OCDE), ha puesto una enorme tensión en el país, ya que el patrón de comparación del desempeño son las economías más desarrolladas del planeta, todas con un fuerte compromiso ambiental. ¿Cómo nos adaptamos a estos desafíos? ¿Qué herramientas tenemos como sociedad para aportar al mejor desempeño ambiental del país?
El Centro de Ciencias Ambientales Eula, de fuerte compromiso con el desarrollo sustentable, siente una enorme responsabilidad ante la sociedad en la formación de recursos humanos altamente calificados, así como en el desarrollo de proyectos de investigación relevantes para el desarrollo del país.
Durante el último año hemos sido invitados a participar de la elaboración del texto Perspectivas del Medio Ambiente Global (Global Environmental Outlook), esfuerzo para entregar a la comunidad mundial, en la reunión de junio de 2012, un reporte de las tendencias e indicadores sobre problemas asociados al ambiente global. En este proceso participan científicos del mundo en un equilibrio entre países en vías de desarrollo y los más desarrollados para tener una visión balanceada de las oportunidades que presentan los problemas ambientales y los costos económicos de no hacer nada para mejorar la condición ambiental presente. Es una excelente oportunidad para repensar la agenda ambiental para los próximos 20 años.
Ricardo Barra
Director del Centro Eula