Tal como las réplicas, a nivel físico, nos recuerdan el
terremoto de febrero, en los hechos las actividades de
la Universidad continúan centradas en ese tema que
nos ha afectado como sociedad.
La campaña Mar de Esperanza, impulsada por nuestra
casa de estudios junto a Radio Bío Bío, la empresa
Celulosa Arauco y Constitución, y la federación regional
de Pescadores Artesanales de Biobío, Ferepa, ya
ha entregado 13 embarcaciones a pescadores de la
zona afectados, permitiendo que un número mayor de
familias pueda recuperar su capacidad productiva. En
una línea similar, UdeC Capacita está desarrollando
un programa de formación de oficios en la comuna de
Talcahuano que permite a los asociados a la Federación
de Sindicatos Pesqueros, adquirir herramientas
que les procuren mejorar el bienestar de sus familias.
Se trata de una manera concreta de hacer efectiva la
responsabilidad social de nuestra casa de estudios.
En una línea más macro, y redefiniendo el contrato social
establecido para la ciencia, en Santiago se presentó
el primer Boletín del Capítulo Ciencias del Mar
de la Red Universitaria Cruz del Sur, RUCS, en el que
40 investigadores dan a conocer los conocimientos recogidos
luego de la tragedia de febrero para acercarlos
a quienes toman las decisiones en las políticas públicas
y privadas.
Tal como las réplicas, a nivel
físico, nos recuerdan el terremoto
de febrero, en los hechos las
actividades de la Universidad
continúan centradas en ese tema que nos ha afectado como
sociedad.
Los daños causados por el terremoto y el tsunami no
han pasado inadvertidos para centros especializados
de otros países, vinculados a nuestra casa de estudios.
Es así como científicos de la Universidad Nacional
del Océano de Taiwán, junto a investigadores de
nuestra casa de estudios, instalan sismógrafos marinos
para conocer el comportamiento de las placas tectónicas
luego del terremoto y posterior tsunami. Estas
mediciones permitirán conocer el estado en que
se encuentran las placas en la actualidad y proyectar
su comportamiento en el futuro próximo y a mediano
plazo.
En el ámbito de la restauración, y evocando lo ocurrido
luego del terremoto de 1960, especialistas mexicanos
estuvieron la semana pasada en la Universidad realizando
un diagnóstico de la Casa del Arte y del estado
del mural Presencia de América Latina, del maestro
Jorge González Camarena, de modo de elaborar un
proyecto para su restauración, como parte de un programa
del gobierno azteca para restaurar el patrimonio
cultural mexicano en Chile.
Por otra parte, el Programa Multidisciplinario de Estudios
de Género, Promeg-UdeC, fue una de las instituciones
gestoras de un seminario-taller que tuvo entre
sus objetivos realizar un primer diagnóstico de la
situación postcatástrofe de las mujeres en las zonas
más afectadas. Una de las conclusiones fue que ellas, organizadas o no, se hicieron cargo de muchas carencias
y dificultades producidas por el terremoto y el
maremoto. Esto se explica, porque las mujeres se perciben
a sí mismas con el deber de proteger y cuidar
tanto a niños como enfermos y mayores.
En igual forma, el calendario académico sigue su
curso y ya se acerca el fin del primer semestre, que
ha significado en todos los ámbitos poner los mejores
esfuerzos al servicio de la comunidad universitaria.
Académicos, funcionarios y alumnos se han esforzado
en llevar adelante este proyecto educativo, comprometiendo,
en la mayor parte de los casos, sus mejores
esfuerzos.