Niños, jóvenes y
adultos de Talcahuano
tuvieron la oportunidad
de sentir, percibir,
emocionarse y
aprender con la
experiencia que
el Cicat y Explora
llevaron a Talcahuano.
Su propio aporte a los damnificados por el terremoto
del 27 de febrero realizaron el programa Explora Biobío
y el Centro Interactivo de Ciencias, Artes y Tecnologías,
Cicat.
Monitores, alumnos universitarios
de distintas disciplinas
preparados para
contestar preguntas de
comprensión científica de
la naturaleza, de la ciencia
y de la tecnología, se trasladaron
el jueves pasado
hacia el albergue implementado
en el Liceo A-23
de Talcahuano, para llevar
sus talleres y así colaborar
con la educación y entretención
de los niños, niñas,
jóvenes y adultos que producto del reciente terremoto
residen temporalmente ahí.
La bombilla musical, Por qué el cielo es azul y El sabor
de la vida, se desarrollaron en forma simultánea,
dando la posibilidad a los asistentes de sentir, percibir,
emocionarse y aprender con la experiencia.
Por otra parte por primera vez se llevó a cabo El
agua es pura ciencia, taller implementado para que
la gente conozca cómo se puede limpiar el agua y
medir su turbiedad, esperando entregar un respiro a
la adversidad que hoy enfrentan cientos de personas
que perdieron sus casas.