Facultad de Educación inicia formación de mentores

La inserción de los profesores principiantes a un establecimiento educacional es crítica y según los especialistas es una experiencia tan determinante que puede marcar su desempeño a lo largo de toda su vida laboral.

Por eso se ha considerado que en este período es necesario que los nuevos profesionales sean acompañados durante el proceso de ingreso al sistema de enseñanza. Así lo ha entendido el Ministerio de Educación que, a través Centro de Prácticas e Investigaciones Pedagógicas (CPEIP), ha implementado una serie de estrategias en la vía de fortalecer la calidad de la primera experiencia laboral de los docentes.

Dentro de esta estrategia se ha establecido el diseño e implementación de diplomados de formación de mentores para apoyar a estos profesores principiantes en distintas regiones del país. En este contexto, se entregó a la facultad de Educación la ejecución del diplomado para docentes de educación parvularia y enseñanza básica para la región del Bío Bío.

En el lanzamiento del programa –que administra la dirección de Educación Continua- el decano Abelardo Castro señaló que hoy existe una dificultad en la inserción de los futuros profesores, porque no todas las universidades que los forman cuentan con una unidad de prácticas profesionales para provocar la aproximación temprana al modelo escolar. Desde este punto de vista, afirmó, este sistema de acompañamiento representa una oportunidad, para complementar la formación inicial docente y que, a su juicio, necesariamente tiene que desembocar en el mejoramiento de la calidad de la educación en las aulas.

En tanto, la coordinadora de la Red Maestros de Maestros del CPEIP, Ana María Cerda, explicó que la preocupación por el tema es absolutamente válida, porque en los hechos se ve que los profesores poseen los conocimientos propios de la profesión, pero no cuentan “con el saber hacer práctico” que da la experiencia. Y cuando se enfrentan a la docencia no cuentan con el apoyo o se sienten tan asustados, que incluso olvidan los conocimientos que han adquirido en la Universidad. “No es que la formación inicial esté fallando, el problema está en cómo en esa formación se aprende el saber hacer”. Por eso, lo que busca a través de este sistema es “integrar activamente a los profesores en la comunidad de aprendizaje, aprovechando los conocimientos de un par experimentado que está ahí para escucharlo, acompañarlo y reflexionar, con él, sobre la práctica educativa.

El objetivo del diploma –que la facultad de Educación impartirá a partir de este mes- es formar a los profesionales seleccionados para apoyar la inserción pedagógica de los profesores principiantes, en una “integración constructiva y autónoma, con énfasis en el logro de aprendizaje de calidad en los estudiantes”, como explicó la académica de Educación, Lucía Domínguez.

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