El viejo continente y el derecho internacional

Con la presentación de la charla La Corte Penal Internacional y el rol jugado por los países de la Unión Europea, por Hugo Llanos Mansilla, máster en Derecho de la Universidad de Harvard, se llevó a cabo la ceremonia de clausura de la III versión del diploma La Europa Actual y la inauguración de la II versión del diploma Experiencias Europeas: ¿un modelo a seguir?, dictados por el Programa de Estudios Europeos, PEE.

En la oportunidad, Paulina Astroza, directora del PEE, señaló que el finalizar con éxito una nueva versión de este diploma les da la tranquilidad de haber logrado el objetivo de difundir entre los estudiantes, conocimientos acerca del viejo continente. Fueron 62 los participantes, quienes concluyeron con éxito el programa cumpliendo con todos los requisitos exigidos.

En su exposición, Llanos señaló que la Corte Penal Internacional no habría llegado a ser posible sin los países europeos y los juicios de Nuremberg, ya que los principios emanados de ahí sentaron las bases de lo que hoy es la Corte. De esta forma, “en dicho tribunal se tipificaron crímenes que ninguna legislación interna había reconocido; los crímenes contra la paz, crímenes de guerra y contra la humanidad, los que nacen de los seis millones de víctimas que sufrieron los horrores de la segunda guerra mundial”, indicó Llanos.

Los crímenes cometidos por el hombre han hecho necesaria la creación de justicia internacional y el principio de jurisdicción universal, creado en los Convenios de Ginebra, señaló Llanos.

Estos convenios, que se aplican actualmente en los tribunales chilenos, no emplean ni amnistía ni prescripción a los crímenes de guerra; exige un trato prudente a los prisioneros y la protección a los funcionarios civiles.

Debido a la importancia de garantizar la justicia alrededor del mundo, el Consejo de Seguridad de la ONU ha creado cortes como los tribunales de la ex – Yugoslavia, Internacional de Ruanda, de Kampuchea (ex Camboya) y la Corte Penal Internacional. En ella se observa el principio de complementariedad del sistema de justicia de un país y entra en funcionamiento cuando existe un colapso del poder judicial en una nación o cuando no se administra la justicia esperada. La pena máxima que puede otorgar es el presidio perpetuo.

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