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  Nº 643 miércoles 27 de mayo de 2009

 

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•EDITORIAL

Concluye mayo y con él las celebraciones del mes de aniversario de la Universidad. Si bien este año ha habido actos ligados a los 90 años que comenzaron en enero con el descubrimiento del friso en el edificio de Humanidades y Arte y se prolongarán hasta fin de año, con la realización de congresos y seminarios de carácter nacional e internacional, no es menos cierto que las fechas más significativas se congregan en los meses de marzo y mayo.

Fue un 17 de marzo que se realizaron las primeras clases en las cuatro carreras que dieron origen a esta casa de estudios: dentística, (Odontología) química y farmacia, (Farmacia) química industrial (Ingeniería) y pedagogía en inglés, (Educación) y esa fecha fue recordada con actos simultáneos en las cuatro facultades actuales, como se informó oportunamente.

El 14 de mayo de 1920, el gobierno del Presidente Juan Luis Sanfuentes, dictó el decreto supremo por el cual se otorgó la personería jurídica a la Universidad de Concepción y se oficializaba el acto audaz que había sido llevado a efecto por los fundadores entre los que destacan su Primer Rector y Rector Vitalicio, Enrique Molina Garmendia, el doctor Virginio Gómez, David Cruz Ocampo, Edmundo Larenas, Esteban Iturra y muchos otros hombres y mujeres que se distinguieron por su permanente entrega al desafío que se habían propuesto y que lo habían concretado un año antes.

Todos los fundadores tenían como meta formar jóvenes que se caracterizaran por un compromiso social y por una dimensión ética y valórica para formar hombres y mujeres libres que aportaran al desarrollo de las personas y del país, impronta que ha marcado desde entonces a la comunidad universitaria. En su discurso de aniversario de este año, el Rector Lavanchy recordó lo que Enrique Molina había señalado al referirse al hecho de hablar a la juventud, diciendo que es practicar un acto que reviste algo de sagrado porque es preciso saber transmitirle en él los rasgos que enseñan a los jóvenes, “depositarios de las fuerzas más ricas”, las lecciones del pasado y las visiones del futuro, que son la causa y el objeto de las transformaciones individuales y sociales de los días venideros.

Mencionó que al conmemorar con los exalumnos Premio Universidad, los 90 años de existencia de la institución tenía la misma certeza sobre la importancia de la juventud en el esfuerzo universitario de dar personalidad espiritual, es decir, artística y científica a un país que la requiere con urgencia.

Los académicos y académicas de esta Universidad que día a día realizan la docencia destinada a los estudiantes de pre y posgrado son depositarios de estas palabras del rector Molina y por lo tanto en cada clase, encuentro con un estudiante, atención, llevan a cabo este acto sagrado para transmitir a los alumnos los valores que inspiran hoy a la Universidad.

En términos de la misión, con motivo de este aniversario, se ha reafirmado que es continuar construyendo una Universidad de excelencia, pluralista, con identidad regional pero con proyección nacional e internacional, moderna, con vocación y profunda responsabilidad pública, y preparada para enfrentar con éxito los múltiples desafíos que le presenta el siglo XXI.

Estas tareas se deben cumplir con el respaldo que le otorga la calidad de sus integrantes, estudiantes, académicos, directivos, profesionales y personal administrativo, una institucionalidad sólida garantizada por la solvencia del trabajo que se realiza y la eficiencia y sustentabilidad de su gestión.

 

 

 

 

 

 

 

 

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