Metas cumplidas al finalizar fondef sobre
tratamiento del alcoholismo
La nueva formulación de Disulfiram, fármaco utilizado para el tratamiento del alcoholismo, demostró una alta adherencia de los pacientes a la terapia.
Trabajar en la fórmula que transformara el Disulfiram, habitualmente en formato de comprimidos, en una parental –o inyectable- fue el reto que el equipo liderado por la académica Jacqueline Sepúlveda, de la facultad de Ciencias Biológicas, se planteó como primer punto en el proyecto Fondef Nueva formulación farmacéutica de Disulfiram como apoyo al tratamiento biopsicosocial de la dependencia de alcohol, proyecto que cumplió con éxito todas sus etapas, concluyendo a fines de enero con una ceremonia en la que participaron los pacientes y sus familias, que realizaron el tratamiento en el Servicio de siquiatría de Concepción.
En la ceremonia el coinvestigador Pedro Cament recordó que hace años cuatro profesionales comenzaron a buscar una solución para la dependencia del alcohol, “conscientes no sólo de hacer academia, sino de hacer algo concreto para ayudar a la comunidad”.
Mientras, la directora del proyecto señaló a los cincuenta y un pacientes la importancia de “no bajar nunca la guardia” y los felicitó por haber comenzado este camino que en primer lugar obligaba a cada uno de ellos a “convencerse a ser una nueva persona”.
María Angélica Guíñez, madre de uno de los pacientes, recordó lo que es cargar con el inmenso dolor que este padecimiento arrastra a toda la familia y la negación que en un primer lugar se enfrenta “Yo pensaba: mi querido hijo no podía ser alcohólico, no podía estar destruyéndose y destruyendo a nuestra familia”. Agradeció la luz que este proyecto trajo a su familia y sobre todo a su hijo “ahora tiene nuevas herramientas para emprender un nuevo viaje”.
El Disulfiram ha sido utilizado como tratamiento para el alcoholismo desde hace muchos años, fundamentalmente en forma oral. El problema de esta forma de tratamiento es que el paciente alcohólico deja de tomar el fármaco en cualquier momento, un efecto que se denomina baja adherencia.
La doctora Sepúlveda indicó que el objetivo de la tecnología desarrollada era que pudiese permanecer en niveles terapéuticos durante un mes, “de manera de garantizar la adherencia del paciente al tratamiento por ese tiempo”, señaló.
[Portada] [Editorial] [Titulares][Agenda] [Panorama Web] [Buscar] [Anteriores] [Equipo] [Contacto] |