Un
tema que ha estado presente esta semana al interior
de la Universidad ha sido la equidad.
En una reunión con los medios de prensa el lunes
de la semana pasada, el rector Sergio Lavanchy reiteró,
-ante la opinión pública- que ningún
estudiante que tenga los méritos académicos
se verá impedido de continuar sus estudios por
razones socioeconómicas.
También, subrayó que las medidas de fuerza
no son el camino para el entendimiento y que sobre la
base del diálogo se solucionan los problemas.
La autoridad hizo hincapié en el hecho que el
otorgamiento del crédito y la revisión
de los casos solicitados por los estudiantes se debe
hacer sobre la base de aplicar los mismos requisitos
que se han considerado para el resto del alumnado.
En una serie de reuniones, que se extendieron toda
la semana pasada en el campus Concepción, ayer en
Chillán y mañana en Los Angeles, la rectoría
ha conversado con los académicos de todas las
facultades para explicar detalladamente tres aspectos
fundamentales: la evolución indicadores financieros
de la Universidad y de la corporación en el período
1998 – 2004; el crecimiento real de la renta permanente
entre los años 1998 y 2003 y los incentivos para
estimular y compensar la productividad académica..
En todas las oportunidades, se ha reiterado la
preocupación
de la Universidad por otorgar un mejor nivel de remuneraciones
a sus trabajadores y la posibilidad –dados los
actuales resultados financieros- de dar satisfacción
parcial a estas inquietudes.
Esfuerzo que también será objeto de otra
serie de medidas para los administrativos y personal
auxiliar.
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