Medicina Veterinaria vuelve a Campus Concepción

En la ceremonia se distinguió al estudiante que obtuvo el mejor puntaje de ingreso y se hizo entrega a todos los estudiantes de una piocha que los identifica con su carrera. Tras compartir en un cóctel con las autoridades del Campus, directivos de la Facultad y académicos de la carrera, los nuevos estudiantes posaron para la fotografía que testimoniará la nueva etapa de desarrollo de la especialidad.

El Campus Concepción revivió, el lunes, una historia que partió hace más de 30 años. Con el impulso del entonces director del Instituto Central de Biología, Mario Ricardi, en 1972, esta sede vio nacer la especialidad de medicina veterinaria. Dos años más tarde, se trasladaría a Chillán, donde, al alero de la facultad de Medicina Veterinaria, se dictó de forma exclusiva hasta este año, con la apertura de su carrera hermana en Concepción.

El lunes, autoridades universitarias y directivos de la sede Chillán celebraron el regreso de la carrera al Campus, con un acto, en el que sus 76 alumnos (que se suman a los 92 nuevos estudiantes de Chillán) recibieron la bienvenida del decano de Medicina Veterinaria, Rubén Pérez, y del rector Sergio Lavanchy.

En su saludo, el decano explicó que la apertura de la carrera en Concepción marca una nueva etapa de crecimiento en las actividades académicas del área. Recordó los precarios inicios de esta especialidad que, tras un largo camino, se ha constituido en una facultad que se distingue entre sus pares nacionales y extranjeras por su nivel académico y científico, aspectos que le permitieron lograr la acreditación de la carrera. Por ello –afirmó- que “no cabe duda que la decisión de estudiar medicina veterinaria en la Universidad de Concepción constituye la elección más adecuada, por la garantía que representa el hecho de que sus procesos educativos se encuentra debidamente respaldados por el sello de calidad que otorga la acreditación ante la CNAP”.

En su intervención, el Rector acercó a los estudiantes a lo que la Universidad representa en el contexto nacional y regional, y los introdujo en la historia de la casa de estudios, aportando antecedentes sobre sus orígenes y sus fundadores. Al reseñar la figura del rector fundador, Enrique Molina, y su legado, Lavanchy destacó el lema de la Universidad que –explicó- representa la esencia pluralista de una casa de estudios que da cabida a la expresión libre de todas las ideas y creencias filosóficas o religiosas. “Este ha sido un patrimonio muy importante y quiero que ustedes lo practiquen como estudiantes y que como profesionales, el día de mañana, sean representativos de ese lema”, dijo.