El proceso de modificación del Reglamento de Docencia de pregrado se encuentra en curso, y se ha instado a la comunidad académica a participar en la discusión del documento que da cuenta de las nuevas propuestas. Es importante conocer el espíritu que anima a las disposiciones y que pretende adaptar la docencia de pregrado a las nuevas tendencias nacionales e internacionales.

El proyecto tiene presente que los actuales alumnos se insertarán al mundo del trabajo en un escenario globalizado, donde deberán enfrentar no sólo a los egresados de su propio país sino del resto del mundo.

También considera que el proceso de formación es continuo y que la meta es “aprender a aprender”, dado el ritmo de avance del conocimiento. Da cuenta de la incorporación de las nuevas tecnologías de información y comunicación en el aula, el llamado info-aprendizaje y de la necesidad de adaptación a ellas.

Estas consideraciones y otras se reflejan en el nuevo Proyecto que, entre otras de sus modificaciones, plantea el cambio de la escala de notas actual de 1-100, a la escala de 1 a 7, para favorecer los estudios de posgrado de los egresados, entre otras razones.

Se incorpora la modalidad semipresencial en las clases, que otorga al profesor el papel de guía del proceso enseñanza – aprendizaje, facilitando la autonomía del estudiante, a través de la comunicación multimedial, adaptada a las características de los estudiantes.

La responsabilidad en el aprendizaje es compartida entre profesores y alumnos, a diferencia de la modalidad presencial, en cuyo caso el peso cae en el profesor en tanto transmisor de conocimientos. Estas materias incumben a toda la Universidad, y los diferentes estamentos no pueden ni deben ausentarse de este debate.