Unidad
de Ergonomía contribuye a
mejorar la calidad de la educación
Un
importante aporte a la calidad de la educación chilena
realizó la unidad de Ergonomía de la Universidad, que
–gracias a sus estudios y avances en el área- colaboró
en la elaboración del texto titulado Guía de recomendaciones
para el diseño de mobiliario escolar, lanzado recientemente
en Santiago por la ministra de Educación, Mariana Aylwin.
La edición de este libro se enmarca en el convenio conjunto
entre el ministerio de Educación y la Oficina Regional
de Educación de la Unesco para América Latina y el Caribe,
denominado Reforma educacional chilena: optimización de
la inversión en infraestructura educativa.
Esta guía surge de la necesidad de actualizar la normativa
vigente y replantear el mobiliario en función de los actuales
requerimientos que incorpora la reforma, considerando
criterios ergonómicos y productivos, dirigidos a mejorar
la calidad del proceso educativo, con un mobiliario que
favorezca una participación activa y diversa de los educadores
y de los estudiantes.
Según
explicó Manuel Gutiérrez, investigador de la Unidad, el
centro había desarrollado estudios de este tipo desde
hace varios años, en población escolar de la octava región.
“El Ministerio supo de nuestras investigaciones, le interesó
el tema y nos pidió que estudiáramos los aspectos antropométricos
de los profesores y estudiantes de distintas edades en
todo el país”.
Esta base teórica fue desarrollada y concretada por la
escuela de Diseño Industrial de la Universidad del Bío
Bío, que diseñó y construyó los prototipos. Posteriormente,
la Unesco editó la guía, que está diseñada para ser utilizada
por las distintas personas o instituciones vinculadas
a la adquisición, reposición, diseño y gestión del mobiliario:
arquitectos, directores de establecimientos educacionales,
compradores, diseñadores, fabricantes y entidades certificadoras.
Satisfecho
con el resultado, Gutiérrez destaca que “gracias a esta
iniciativa, se sientan las bases de una normativa chilena
en el tema, que permitirá mejorar la calidad de la infraestructura
escolar, la calidad de la educación, y por ende, la calidad
de vida de los estudiantes”.
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