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 Especialistas
de diversas área analizaron las implicancias del
acuerdo en la agricultura regional.
Más
de 300 personas asistieron al seminario Acuerdo
Chile-Unión Europea: Desafíos para el Sector Agropecuario
de la VIII Región que realizó el campus, a través
del Centro de Estudios y Gestión para el Desarrollo
Regional. La presentación estuvo a cargo de Alejandro
Santa María, director general de la sede, quien
reflexionó sobre la globalización y la dimensión
social de un fenómeno esencialmente económico.
También
comentó algunas implicancias del acuerdo con la
UE, que ha sido evaluado positivamente, pero, que
es necesario referirlo, dijo, al plano regional.
En ese sentido, la actividad frutícola será la más
beneficiada, explicó Jean Paul Joublan, ingeniero
agrónomo y académico de la facultad de Agronomía.
“El acuerdo ofrece un gran abanico de posibilidades
para los cultivos más importantes de la zona (manzanas,
frambuesas y arándanos). Hay que aprovechar la investigación
que se ha hecho en Europa, sobre todo considerando
que el clima que poseemos se adecua a regiones de
Francia, Italia o del sur de Alemania”.
En el área de la ganadería bovina, el médico veterinario
y docente, Jorge Avila, resaltó el poder contar
con la primera planta certificada para exportación
a la UE, lo que permitirá incluso triplicar la producción
en el área. También dijo que habrá que mejorar en
distintos aspectos como el genético, el manejo de
praderas, la cadena de producción de toda la industria
de la carne y la asociatividad de la producción.
En
el seminario también quedó claro que la estructura
productiva agropecuaria de la Región no se ajusta
a los principales productos comercializados por
la UE, ni a los productos negociados en el acuerdo,
de modo que no se puede esperar un impacto importante
en el corto plazo.
Según
el profesor Raúl Cerda, prácticamente no hay ninguna
posibilidad de intercambio comercial en los rubros
que actualmente dominan nuestra estructura productiva
y que encuentran en la UE altos niveles de producción
e incluso excedentes, que llevan a pensar en una
fuerte competencia en productos como arroz, cebada
y papas.
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M+s información
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Apoyo a
modernización en universidad boliviana
A
Bolivia viajó el académico de Ingeniería
Agrícola y doctor en recursos hídricos,
Eduardo Holzapfel, integrando un equipo
de profesionales latinoamericanos, convocados
por la Universidad Mayor de San Simón,
una de las tres más importantes de ese
país, en el marco de un proyecto de redefinición
de sus líneas de docencia e investigación.
Holzapfel,
tuvo a su cargo el área de recursos hídricos,
deficitaria en investigación, lo que despertó
el interés de los académicos y autoridades
universitarias por el posgrado (magister
y doctorado) de la facultad de Ingeniería
Agrícola.
La Universidad Mayor convocó a 14 investigadores
de diferentes líneas e instituciones.
De Chile fueron invitadas la Universidad
Católica, en arquitectura; la Universidad
de Chile, en medicina y agroindustria
y esta casa de estudios, en recursos hídricos.
Holzapfel destacó la importancia de esta
convocatoria, en el sentido de reconocer
la experticia de la Universidad y concretamente
de la facultad de Ingeniería Agrícola.
El
académico se reunió con docentes del plantel
boliviano y realizó una breve gira por
la zona de Santa Cruz y Cochabamba, donde
se concentra la mayor superficie de cultivo.
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