El nuevo trabajo de Coco Piérart
El
giro forma parte de las 37 obras que Cocó Piérart muestra
en la Pinacoteca hasta fin de mes.
En
su exposición, Pinturas recientes, Coco Piérart sorprende
al espectador con la aparición, cada tanto, de títulos
compuestos a partir de la palabra ciclo, que se mezclan
con la variedad de temas que abarca el trabajo realizado
–en óleo y acrílico- durante este año.
De
los bi-ciclos (vistos en distintas perspectivas) Coco
Piérart pasa al extraño ciclatón –una elegante túnica
medieval- y luego al colorido ciclamor, un árbol de flores
carmesí, que acompaña a una joven en lo que podría ser
un momento de descanso.
Esta misma joven inaugura la serie de 14 cuadros de pequeño
formato, en el fondo de la sala, la mayoría de los cuales
están dedicados a la contemplación deprejuiciada del cuerpo
–una adolescente constata los cambios en su anatomía,
una segunda mujer se luce en la playa, mientras otra realiza
la rutina del lavado- y donde el espejo aparece como un
elemento reiterativo.
También
en esta serie aparecen objetos como flores, jarrones,
donde destaca una expresiva te-tera que parece interpelar
al observador. La solidez en la técnica y la simpleza
y sobriedad de forma y color, caracterizan la muestra
que se expone desde la semana pasada en la sala 4 de la
Pinacoteca.
Cancionero
jesuita mapuche
Coro de niños huilliches
Creado
en 1993 por Gabriel Coddou, al alero de un proyecto Fondart
del ministerio de Educación, el Coro de niños huilliches
de Chiloé, que a las 19 horas de mañana se presenta en
la Casa del Arte, está integrado por alumnos de la Escuela
Rural Artística “Molulco”, en la comuna de Quellón, la
más austral de la Isla Grande de Chiloé a la que asisten
alumnos de varias localidades rurales.
Unico
en su especie, este coro tiene como especial característica
la de cantar canciones del repertorio coral universal
traducidas al huilliche, con el objetivo de dar a conocer
esta hermosa lengua originaria, dialecto del mapudungun,
casi olvidada de Chiloé por haber sido prohibida hace
ya más de 200 años, al igual que casi toda esa cultura
ancestral.
|