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Números 481 y 482 de Revista Atenea
La memoria universitaria
Organizada por el signo de lo finisecular, la revista Atenea, que
reúne los números 481 y 482, fue presentada por su actual director, Mario Rodríguez.
Algunos de los mejores artículos publicados entre los años 1924 y 2000
recoge la publicación especial de la Revista Atenea correspondiente a los números 481 y
482, que fue presentada la semana pasada en la Casa del Arte.
Con un nuevo formato, más cercano al original, correspondiente a abril de 1924, y con
una muy buena calidad de impresión, en este número antológico también se introdujo
abundante material ilustrativo que le otorga a la revista una nueva imagen tipográfica.
La portada corresponde a una obra de Hernán Valdovinos utilizada para ilustrar el libro
Altazor.
Durante la presentación de Atenea, la directora de Extensión, María Nieves Alonso,
destacó que los artículos seleccionados para este número mantienen su vigencia en los
ámbitos de la ciencia, el arte y la literatura. "Si ésta es una de las caras de la
Universidad, a la Universidad se la ve sana y muy potente", dijo la directora al
referirse a lo valioso de los contenidos antologados.
Por su parte, el actual director de Atenea, Mario Rodríguez, señaló que al antologar
artículos publicados desde sus orígenes, este número de la revista universitaria habla
de la memoria. Y para ilustrar ese concepto, citó dos relatos hispanoamericanos referidos
a él: Funes el Memorioso, de Jorge Luis Borges, y la historia de la peste del insomnio
que producía olvido paulatino en Cien Años de Soledad, de Gabriel García Márquez.
Un relato todo lo recuerda, el otro todo lo olvida; en ese contexto, dijo, Atenea trata
de utilizar el recuerdo organizado en torno a una idea, convirtiéndose en una revista de
la cultura latinoamericana, cuyo ámbito es la lengua española. "Este número está
organizado sobre un modo de recoger la cultura latinoamericana".
Diálogos y huellas Apoyándose en diversas técnicas pintura, esculturas, fotografías- los
artistas Markus Kiel (Alemania) y Zinnia Rodríguez (Chile) construyen una serie de
instalaciones que tienen por propósito construir un diálogo sobre una memoria, de ambos
países, ligada a la tierra, a las explotaciones carboníferas, rescatando también el
rastro de sus protagonistas.
La idea de la exposición Diálogos-Huellas abierta desde la semana pasada
en la Pinacoteca- surgió en Alemania, con las investigaciones iniciadas por Kiel en torno
a la cuenca carbonífera de Ruhr. Este trabajo se extiende a nuestro país, donde, Zinnia
Rodríguez se aventura en la recreación del pasado minero de Lota, observando lo que
ocurre hoy con la cultura y las gentes de la zona del carbón.
Salón de la acuarela
Paisaje chilote, de Mario Mazzarelli.
Hasta fines de abril se exhibirá en la Pinacoteca la selección de las mejores obras
presentadas al Cuarto Salón Nacional del Arte de la Acuarela Ricardo Anwandter von
Salis-Soglio que, en esta versión, otorgó el gran premio de honor a la docente del
departamento de Artes Plásticas, Luz María Sánchez, por su obra Fondo de Mar.
Creado en 1994 por El Centro Cultural El Austral y la Corporación de Desarrollo de la
provincia de Valdivia, este certamen artístico es un homenaje al hijo ilustre de
Valdivia, Ricardo Anwandter (1919-1993), considerado el mejor paisajista nacional en el
arte de la acuarela durante la década de los ochenta. En sus cuatro versiones, el Salón
de la Acuarela, ha despertado el interés de más de 600 artistas nacionales, cultores de
esta técnica. |
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