Un
intenso programa de trabajo con académicos y estudiantes del departamento de Educación
Física cumplieron los especialistas del Instituto Nacional de Educación Física, Infec,
de la Universidad de Lérida, Oleguer Camerino y Marta Castañer, quienes a través del
programa Intercampus llegaron a Concepción para dar a conocer su experiencia a partir de
un nuevo modelo para la educación física. Sus actividades en la Universidad terminaron
con el seminario Renovación Pedagógica en Educación Física, dirigido a
profesores del sistema educacional de ésta y otras regiones.
Hace 10 años, los docentes comenzaron la elaboración de un nuevo modelo para la
educación de la motricidad -concepto que usan para dar un sentido más amplio a la
educación física, que se remite sólo a los aspectos corporales- una de las áreas que,
según los expertos, ha tardado más en emprender la renovación pedagógica.
Esta renovación pedagógica en el contexto de la reforma educativa española, advierte
Camerino, ha seguido la línea del constructivismo, el aprendizaje significativo, la
evaluación continua y la inclusión de valores transversales. En este esquema -indica
Marta Castañer- se elaboró una planteamiento dentro del paradigma sistémico. "La
idea es identificar cada uno de los elementos que componen la motricidad y relacionar los
frentes en que se puede dar la actividad física y el deporte de manera óptima, útil y
polivalente". Y sobre esta base, agrega, ocurren una serie de combinaciones que se
remiten a los ámbitos curricular, didáctico y/o valórico.
El modelo alude a una comprensión integral de la corporalidad. "Las personas
tenemos una corporalidad y nos servimos de ella para vivir en lo cotidiano y para
cualquier tipo de aprendizaje...en los pasados políticos chileno y español, por
cuestiones culturales, interesaba que el cuerpo fuese una cosa tabú y emergía sólo
desde un punto de vista muy elitista en relación al deporte, muy de rendimiento, muy
paramilitar". Es el enfoque con que se ha estado educando hasta hace poco, dice
Castañer.
Pero para ambos profesionales, la actividad física trasciende el mero movimiento de
músculos, pues involucra tres aspectos: el perceptivo-motriz (equilibrio, coordinación,
manejo del espacio), el físico-motriz condicionado (la velocidad, resistencia,
flexibilidad) y el socio-motriz (comunicación, interacción, imaginación).
"Si todo esto se dinamiza cuando uno se mueve, entonces hay que trabajar cada uno
de estos aspectos y eso es lo que persigue este modelo", afirma Oleguer Camerino.