POESÍA Y FILOSOFÍA PARA EXPLORAR LA RELACIÓN DIOS-PERSONA
La iniciativa, desarrollada
por Rodrigo Pulgar, es
uno de los dos proyectos
Fondecyt desarrollados en el
departamento de Filosofía.
La investigación se centra
en la obra de la intelectual
María Zambrano.
Intentando dar respuesta a
preguntas sobre la característica
ontológica y su expresión tanto
poética como filosófica de la
cuestión religiosa, el académico del
departamento de Filosofía, Rodrigo
Pulgar, desarrolla el proyecto
Fondecyt María Zambrano y el
lugar de la poesía y la filosofía en
el continente de la relación Diospersona
y los efectos de la relación
en la cultura, en el que espera
aportar al desarrollo de la discusión
sobre filosofía de la religión y sus
efectos en la comprensión de los
distintos actos humanos que, sin
duda, en muchos casos traducen la
forma como el sujeto se relaciona
con Dios, o simplemente con la
experiencia de trascendencia.
La elección de este tema de
estudio, señala Pulgar, corresponde
a un interés personal que le atrae
desde hace bastante tiempo. “Considero que hoy se pueden
encontrar algunas respuestas en
la filosofía de María Zambrano, así
como en la de Miguel de Unamuno
o Martin Heidegger, filosofía
contemporánea, que compromete
al sujeto que realiza las preguntas”,
dice.
Por otra parte, el mayor aporte de
América Latina a la intelectualidad
es en el área de la literatura y, ahí,
sostiene Pulgar, existen muchas
intuiciones filosóficas.
Para Pulgar, filósofo, la misión
es “leer” la poesía desde su
especialidad. Tomar la poesía como
fuente de inspiración para resolver
el tema de la relación entre el
hombre y lo divino.
Mientras la filosofía provee de
preguntas, la literatura intenta dar con respuestas esenciales, una
suerte de apertura a la comprensión
de lo sacro.
“La literatura capta su relación
con lo divino y da sentido a esa
relación. Existen áreas donde la
razón no penetra pero sí la poesía;
entonces, la idea es aprovechar
esa penetración poética para
sacar información. Hay muchas
formas expresivas culturales que
se sostienen en la experiencia
religiosa del sujeto”, sostiene
Pulgar.
FILOSOFÍA DE LA RELIGIÓN
En términos generales, esta
investigación Fondecyt considera
como sus objetivos la identificación
del componente metafísico de la
palabra y la descripción de dos de
sus formas: la poética y la filosófica,
su expresión y comprensión
traducidos en formas culturales
determinadas. Esto significa
que la investigación aborda las
consideraciones filosóficas de María
Zambrano sobre esta materia, y
el lugar que ambas ocupan en la
relación entre Dios y la persona y,
por efecto, en la constitución de la
figura humana y la cultura.
La iniciativa, dice el filósofo, se
preocupa por investigar lo que
identifica cada forma (la filosófica
y la poética) y sus diferencias en
relación a la aprehensión de la
verdad, y cómo esta disposición a
la verdad trasluce una apertura a
la trascendencia, aspecto que en
el caso de Zambrano se traduciría
en el desarrollo de una filosofía de
la religión, cuyo efecto se hace
explícito en la cultura.
“La elección de la obra de María
Zambrano se debe a que, además
de abordar estos temas, se la
considera una discípula de Ortega
aunque más cercana a Unamuno.
Ese interesante aspecto me
permitió un continente desde el
cual reflexionar”, dice.
DOS TEXTOS
En ese escenario, para desarrollar
su proyecto Pulgar definió como
el continente teórico de la
investigación la obra de la filósofa
española, pero con especial
atención a dos obras suyas:
El hombre y lo divino, texto
que entrega lo medular de sus
reflexiones sobre la relación entre
Dios (divinidad)-persona al alero de
la discusión ocurrida entre poesía
y filosofía y Filosofía y poesía,
texto que sirve de apoyo en el
proceso de dilucidar el significado
de la poética, pero también, como
texto de contraste, ya que permite
poner en discusión el primer texto
en la perspectiva de comprobar la
idea de lo religioso en la cultura. “No en vano creemos que en
esta obra se perfila asumido el
carácter filosófico del debate
poesía-filosofía en el entorno
de la relación Dios (divinidad)-
persona. Sin embargo,
estimamos que la investigación
resultaría difícil de llevar sin
una lectura y estudio de la
obra general de Zambrano”,
explica.
Metodológicamente se trata
de una investigación descriptiva
y hermenéutica
a la vez. “Con esta perspectiva
epistemológica
pretendemos comprender
el significado de una
propuesta filosófica que
pone el acento en investigar la
experiencia humana sobre Dios y
cómo esta experiencia está presente
en el desarrollo tanto de la cultura
como del ser humano. Es así
como discutimos el impacto de la
experiencia de Dios en la temporalidad
(sentido humano del tiempo)
como en el espacio (en el sentido
de habitar humano)”.
Otro aspecto que persigue, señala,
es asimilar un itinerario filosófico
que, en el caso de Zambrano, se
preocupó de vincular religión y
cultura desde lo que entiende son
los roles que cada forma de la
palabra cumple en esa relación;“relación que a nuestro entender
es clave en la constitución de la
comunidad humana tal como la
entendemos”.
El proyecto toma como referente 2 obras de
María Zambrano
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