PARQUE CIENTÍFICO TECNOLÓGICO DEL BIOBÍO
UN PUNTO DE INFLEXIÓN PARA EL
DESARROLLO DE LA REGIÓN
Como infraestructuras especializadas,
los parques científicos y tecnológicos
constituyen una de las claves de los
sistemas nacionales de innovación. La propuesta de la Universidad, inédita
en Chile, busca hacer coincidir el
sector público, privado y la misma
casa de estudios para cambiar el
rostro de la Región.
El fomento de la Investigación, el
desarrollo y la innovación, I+D+i,
no es sólo una problemática a nivel
nacional, sino que se enfoca, cada
vez más, en la importancia de las
medidas a nivel regional y local. Así
lo creen las autoridades de nuestra
Universidad, promoviendo para
ello la interrelación entre el sector
industrial, el gobierno y la academia,
tres actores que, como agentes
de generación de conocimiento,
configuran un entorno que favorece
el desarrollo de procesos que
estructuran los denominados
sistemas (nacionales o regionales)
de innovación.
Es en este punto donde los parques
científicos y tecnológicos juegan
su papel en el fomento de la I+D+i
como pieza clave en el diseño y
estructuración de un sistema de
innovación.
Según el rector Sergio Lavanchy “la experiencia internacional ha
demostrado que estos parques son
una herramienta muy potente para
el desarrollo económico, productivo
y social de las regiones donde
están instalados”. En ese sentido,
el impulso que nuestra casa de
estudios ha dado a la creación del
Parque científico y tecnológico del
Biobío coincide con el mandato de la
Universidad de impulsar el desarrollo
de la Región del Biobío.
CAMBIAR EL ROSTRO DE LA REGIÓN
Como infraestructuras interconectadas,
nacional e internacionalmente, capaces
de aglutinar servicios de apoyo a
la innovación de todo tipo, en la
mayoría de los casos los parques
científicos constituyen también un
espacio de convergencia de grupos
de investigación universitarios,
centros tecnológicos, nuevas
empresas de base tecnológica y
empresas consolidadas.
El presidente de la comisión de
Fomento y desarrollo productivo
del Consejo de Gobierno Regional,
Marcelo Chávez, se manifiesta muy
esperanzado con la iniciativa de la
UdeC de impulsar la creación de
una estructura de este tipo la que,
dice, agrega valor a la Región. “La
opinión que existe en el Gobierno
Regional en torno al proyecto es
que es importante y, de alguna
manera, puede cambiar el rostro
de la zona del punto de vista de su
eje productivo. Con mucha felicidad
acogemos esta propuesta, la vemos
como esperanzadora”.
Pese a que la Universidad se ha
destacado, históricamente, por
estar a la vanguardia en lo que a
producción científica se refiere,
transfiriendo paquetes tecnológicos
al medio productivo que la rodea,
en el escenario mundial surge con
fuerza la necesidad de complementar
esas acciones con nuevas estrategias
de desarrollo, para mejorar su
vinculación con el medio productivo
y fomentar su relación con éste, a través de soluciones innovadoras y
propiciando su uso y resguardando
su implementación industrial.
Para ello, junto con la creación de
un programa Parque Científico y
Tecnológico que tiene como director
a Jaime Baeza y a Marcelo Molina
como subdirector, se ha propiciado
una serie de encuentros tanto con
el sector productivo (ver recuadro)
como con el sector público.
Considerando que se trata de un
proyecto de “larga maduración”
que, por su impacto social, involucra
recursos públicos, el rector Lavanchy
manifestó el interés por conversar
con todos los posibles futuros actores
involucrados en este iniciativa inédita
en Chile. En ese escenario se situó la
reunión con la comisión de Fomento
y Desarrollo Productivo del Gobierno
Regional, en la que los consejeros
pudieron conocer la propuesta de la
Universidad.
Al respecto Chávez señaló que se
constituirá un grupo de trabajo entre
ambas instituciones con el fin de
dar respuesta a las inquietudes que
surjan, principalmente en el ámbito
del modelo de gestión.
ECOSISTEMA ADECUADO
Como una iniciativa de la UdeC para
la Región calificó Jaime Baeza este
proyecto. “Un parque científico
tecnológico es un instrumento
importante para el desarrollo
económico, lo que se ha comprobado
tanto en los países emergentes como
en los desarrollados; esto ha sido
demostrado, además, en regiones con
problemas económicos y de empleo.
En el Parque científico y tecnológico
del Biobío lo que convocamos son
empresas de base tecnológica de
gran y mediano tamaño que ahí
catalizarán el desarrollo”, aseveró.
A su juicio, este parque “será la
gran oportunidad para cambiar
el eje económico de la Región.
Ello podremos hacerlo trayendo
iniciativas, creando un entorno, un
ecosistema que permita atraer a
esas empresas de base tecnológica
nacional e internacional”.
La Universidad ha sido, desde hace
años, promotora de esta iniciativa
asesorándose, para la formulación
del proyecto, por distintos parques,
destacando entre ellos Smart Park
de la Universidad de Manitoba,
Canadá (Estudio de Prefactibilidad)
y el Parque Tecnológico de Bizkaia,
País Vasco, España (Estudio de
Factibilidad). Asimismo, el diseño
del Parque ha contado con la
colaboración de los responsables
de los parques Innovation Place, de
la Universidad de Saskatchewan,
Canadá; de Tecnopuc, de la
Universidad Católica de Río Grande
del Sur, Brasil; del Parque Tecnológico
de Alava y del Parque Tecnológico de
San Sebastián, estos dos últimos del
País Vasco, España.
ESTRCTURA
Como objetivo estratégico este
parque promoverá, mediante la
integración de políticas públicas
coherentes y la iniciativa privada,
el crecimiento económico de la
Región basado en la incorporación
de conocimiento en su interior e
induciendo, actividad fuera de él.
Ello tendrá como objetivo primordial
constituirse en un polo innovativo
relevante para el desarrollo del
país, contribuir efectivamente al
desarrollo de empresas de base
tecnológica, crear riqueza a través
de la atracción de talentos e
inversiones, expresar el potencial
creativo de la región, conectarse
al mundo en los ámbitos en que se
tiene ventajas competitivas, ya sea
actuales como potenciales, crear
empleos y conocimiento que mejoren
la calidad de vida y desarrollar
innovación de alto impacto.
El proyecto contempla la urbanización
de aproximadamente 91.30
hás, que incluye
-Lotes para instalación de centros
y empresas de investigación y desarrollo,
con un factor de edificación
de entre 60 y 80% según proyecto, y
dejando para áreas verdes y estacionamientos.
-Edificio para la Aceleradora.
Contempla espacio físico para 50
empresas tecnológicas -60m2 por
empresa- y espacios comunes de
secretaría, salas de reuniones,
cafetería y administración. En total
5 mil m2.
-Edificio Central y de Servicios.
Se consulta la construcción de un
edificio que albergará instalaciones
para servicios demandados por las
empresas, como bancos, correo,
auditorio, plaza central, etc.
-Completa urbanización con
canalización subterránea de
agua, electricidad, alcantarillado,
comunicaciones, etc. Además de vía
de acceso pavimentada.
-Parque de Bosque Nativo. Se
consulta la creación de un parque
de bosque nativo, a partir de un
bosque existente en el lugar, de
aproximadamente 11 hás, el cual
será integrado como parte del Parque C&T, para los efectos de expansión
y recreación del personal, abierto
además a la comunidad.
GIRA A CHINA Y COREA
Convencido de que es necesario “actuar decididamente” y ser
actores de un cambio, así como
producir un punto de inflexión en el
desarrollo de la Región, el presidente
de la Cámara de la Producción y el
Comercio, CPCC, Alberto Miranda,
manifestó el apoyo de su entidad
gremial al proyecto Parque Científico
y Tecnológico impulsado por nuestra
Universidad.
Con esa convicción, la CPCC
apoyó y gestionó una gira que,
recientemente, realizaron a Beijing,
Shangai y Seúl el director y el
subdirector del programa Parque
Científico y Tecnológico.
En reunión realizada entre
representantes de la CPCC
y autoridades universitarias,
encabezadas por el Vicerrector de
Investigación y Desarrollo, Bernabé
Rivas, se presentaron los resultados de la visita a cinco parques
tecnológicos, cuatro de China y uno
de Corea.
En la ocasión, Rivas confirmó el
compromiso de la UdeC con esta
iniciativa, al tiempo que manifestó
la imperiosa necesidad de conseguir el apoyo de muchos más actores, así
como un decidido compromiso del
Estado.
Por su parte, Miranda destacó que,
al apoyar esta iniciativa, “lo que
estamos haciendo es fortalecer el
trabajo en conjunto entre la UdeC y
la CPCC”.
Agregó que “concretar este ansiado
proyecto es, sin duda, una prioridad
para la región del Biobío. No sólo
porque nos marcará con un nuevo y
renovador sello, que es ser una ciudad
líder en tecnología, de la mano de la
ya tradicional ciudad universitaria,
sino que también porque su
implementación, tanto de capital
humano, como de proyectos, ideas
y equipos, impulsará la creación de
nuevos negocios y mejorará nuestra
economía local”.
Ambas autoridades coincidieron
en invitar a otros estamentos de
la sociedad. “Este proyecto no es
excluyente, dijo Rivas, pero en él la
CPCC es estratégica”.
De acuerdo a lo visto durante la
visita a los parques ZhongGuanCun,
TusPark, Caohejing y Fu Dan, de
China, y Gyeonggi, de Corea, Baeza
señaló que estos exhiben objetivos
comunes similares a los de Europa,
Canadá y Estados Unidos. Su
mayor diferencia, dijo, es “atraer
empresas de base tecnológica de
nivel mundial”.
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