Convocatoria a formar la Agrupación de Matrimonios sin Hijos

                                                                                                                                                       
                                                                                                                                                                 
Dr. Raúl Edo. Martínez
                                                                                                                                                                          Doctor en Psicología
                                                                                                                                                 Psicólogo Clínico Especialista en Psicoterapia
                                                                                                                                                                   Departamento de Psicología
                                                                                                                                                                  Facultad de Ciencias Sociales
                                                                                                                                                                   Universidad de Concepción
  
                                                                                                                                                        Anexo 3959 E-mail: ramartin@udec.cl


Estimado/a lector/a:

          Si ha llegado a este artículo, probablemente le interesa conocer el origen y objetivos de la Convocatoria. Deseo y necesito que Ud. me haga llegar su opinión y/o me comunique su interés por esta iniciativa, luego de leer este breve artículo introductorio y quizás otros que apunto en el texto, que se encuentran en mi sitio Web ( http://www.udec.cl/~ramartin )

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En su libro clásico El shock del futuro, Tofler (1979) destacó las 3 características de la cultura occidental en las últimas décadas de la época contemporánea hasta ese momento: la transitoriedad (producción acelerada y cambiante de bienes y servicios; desarrollo explosivo de conocimientos científicos y aplicaciones tecnológicas de breve duración, etc.), la novedad (aparición constante de nuevas ideas y filosofías de vida) y la diversidad (surgimiento de un gran número de diferentes valores personales y sociales que relativizan los criterios acerca de lo correcto-incorrecto, adecuado-inadecuado, normal-anormal, etc.). En la misma línea, Kahn acuñó el concepto de "mosaico cultural" para referirse al florecimiento al interior de los grupos humanos contemporáneos, de un mayor número de subculturas valóricas altamente cohesionadas y excluyentes, pero a la vez tolerantes de otras visiones de vida.

Una rápida mirada a nuestro entorno avala las percepciones y expectativas de ambos analistas futurólogos. De manera creciente, las personas tienen la posibilidad de escoger reflexivamente y cultivar los valores que regirán sus vidas en las pequeñas y grandes cosas y la forma en que asumirán los compromisos derivados de sus decisiones, sin tener que aceptar pasivamente las normas, reglas y deberes de una "mayoría" indeterminada, la que además va dejando de existir en un gran número de asuntos humanos.

Un ámbito en que la diversidad comienza a ser particularmente notable es el de la constitución familiar. La concepción tradicional de familia alude a un patrón de «relación legalizada de un hombre y una mujer, con un compromiso de por vida, con exclusividad sexual, con la autoridad y el rol de proveedor preeminente del hombre y con hijos». Actualmente, como efecto de muchos factores económicos, educacionales, culturales y políticos, existe un número de formas no tradicionales de pareja/familia, entre ellas la cohabitación, la familia uniparental, el matrimonio sin hijos, etc.

Por ser de nuestro especial interés en relación a la Convocatoria, en lo que sigue nos referiremos exclusivamente al matrimonio sin hijos.

Una pareja puede no tener hijos por distintos motivos:

1) Infertilidad reproductiva; 2) Postergación del embarazo para después de unos años de casados, en el caso de matrimonios jóvenes; 3) Abstención reproductiva permanente (decisión voluntaria de no tener hijos por toda la vida); y 4) Salida de los hijos del hogar, en el caso de matrimonios de mayor edad.

  1. Infertilidad reproductiva: se estima que entre un 10% y 15% de parejas no puede tener hijos por razones biológicas, y que de ellas entre el 40% y 50% experimenta problemas de adaptación matrimonial y social y estrés con posibles efectos a largo plazo. La ayuda para tal dificultad ha provenido tanto del ámbito médico (uso de técnicas de reproducción asistida) como del psicológico, con intervenciones encaminadas a apoyar a las parejas durante el período de intentos fallidos de embarazo con o sin tratamiento médico, o una vez que comienzan a sufrir el proceso de duelo (ver en mi sitio Web que indico al inicio: Pareja sola, opción y oportunidad, Esterilidad: un proyecto inconcluso, Procreación y creencias erróneas)
  2. Postergación del embarazo: es cada vez más frecuente que los matrimonios jóvenes decidan permanecer solos unos años a objeto de conocerse más y asentar la relación y como forma de disfrutar de la vida en común sin la gran responsabilidad que suponen los hijos, y/o a la espera de afianzar logros profesionales y económicos, que hagan más probable una buena crianza de aquéllos.
  3. Abstención reproductiva permanente: la decisión voluntaria de no tener hijos por toda la vida, es casi inexistente en nuestro medio nacional, a diferencia de lo que ocurre cada vez con mayor frecuencia en Estados Unidos y Europa. En Estados Unidos, en 1982, el 2.4% de las mujeres en edad reproductiva había decidido no tener hijos, cifra que ascendió al 4.3% en 1990 y al 6.6% en 1995. Las razones de hombres y mujeres para no tener hijos (descartada la infertilidad) son muy variadas, y la mayoría de ellas derivan de una reflexión muy profunda y una decisión de alta responsabilidad social (ver artículos en mi sitio Web que indico al inicio: Abstención reproductiva permanente, Razones para tener y no tener hijos)
  4. Salida de los hijos del hogar: las condiciones de vida de las parejas con un mayor número de años de convivencia que vuelven a estar solos una vez que los hijos dejan el hogar, se han resumido habitualmente bajo la denominación del "sindrome del nido vacío", respecto al cual se han investigado sus determinantes, su prevención y su tratamiento por medio de algunas intervenciones psicológicas.

Sin duda, la maternidad/paternidad debe ser asumida en plenitud y muy responsablemente por respeto y amor a los hijos y por un deber ciudadano de aportar a la sociedad miembros física y psicológicamente saludables. Los hijos no deseados o meramente "tolerados" (por no decidir reflexivamente tenerlos), serán con seguridad los niños no queridos y física o psicológicamente maltratados, los mismos que luego, por el daño sufrido, se relacionarán de manera impropia con otras personas. Y los padres que enfrentan a disgusto su rol, sufrirán una intensa frustración, a veces insuperable. Disponer realmente de las opciones de tener o no tener hijos y decidir honestamente en función de las necesidades y los valores individuales, hará más probable que la vida de cada uno sea personal y socialmente más fructífera y comprometida.

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Estimado/a lector/a :

  El que los cuatro tipos de pareja descritos sean en mayor o menor medida minoritarios respecto a lo que es habitual, con el relativo separatismo social que implica muchas veces, justifica crear una Agrupación de Matrimonios sin Hijos. Puesto que cada una de las parejas sin hijos señaladas afrontan una dinámica diferente en su relación, con expectativas, necesidades, motivaciones, interacciones y problemas particulares, los objetivos globales de dicha entidad podrían ser, entre otros:

1.- Facilitar la integración social de las parejas que se encuentran en tal condición (voluntaria o involuntariamente), como resultado de: ampliar sus redes de apoyo constituidas por otras parejas similares, compartir entre sí las experiencias de vida que les son propias y diferentes a las de los matrimonios con hijos y desarrollar actividades y relaciones interpersonales en tiempos libres y de ocio.

2.- Propiciar el mantenimiento y el desarrollo de una satisfactoria relación de pareja y la prevención de los desajustes que pudiesen derivar del no tener hijos y/o de las presiones culturales al respecto, por medio de actividades sistemáticas de información, entrenamiento en habilidades de comunicación, solución de problemas, desarrollo de empatía y apoyo dentro de la relación de pareja, etc.

        Una vez constituida la Agrupación, se esperaría que sus integrantes acordaran los objetivos específicos que respondieran a los intereses particulares de cada tipo de matrimonio incorporado.

        Le reitero mi  deseo   de  recibir (a la brevedad)  su opinión favorable respecto a la Convocatoria,   que  puede  hacerme   llegar  a   mi    dirección  de  correo  electrónico  (ramartin@udec.cl )  o  hacérmela  saber   telefónicamente (203959, Departamento de Psicología, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Concepción). Si  me  señala cómo  tomar   contacto  con  Ud.  (indicando  su  dirección  de   correo electrónico   y/o teléfono), le mantendré al tanto del desarrollo de la iniciativa. Demás está decir que su comunicación conmigo no le compromete a ninguna acción posterior.

        Finalmente, le pido dé a conocer esta Convocatoria a otras personas que no tengan acceso a este material informativo. Gracias.


REMM/remm
marzo, 2002