El viento viene del Este
en un palanquín de seda.
Riza el vino de mi copa
el viento de primavera.
Bajo la lluvia de pétalos
de las ramas desprendidos,
como las rosas abiertas
está tu rostro en el vino.
¿Has pensado cuantos
años
las glicinas, los almendros,
florecerán tras tus rejas
iluminando tus sueños?
Es hora, niña,
que dances
el sol camina al ocaso;
la tarde se va, en la noche,
la juventud, en los años.
La vida, niña algún
día
blanqueará nuestros cabellos.
Amor y vino en las copas
antes que se marche el tiempo.