Don
Sergio Carrasco Delgado es oriundo de nuestra tierra. Nació en
Concepción un 09 de julio de 1943. Sus estudios los realizó
en el Colegio Salesiano "Domingo Savio" y en el Liceo de Hombres
"Enrique Molina Garmendia". El 14 de septiembre de 1966 recibe
su Licenciatura en Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad
de Concepción y el 03 de octubre del mismo año, su título
de abogado. Sus estudios de Postgrado los realizó en la Facultad
Internacional para la Enseñanza del Derecho Comparado de Estrasburgo,
Francia (1969-1971).
Son varias las actividades que don Sergio Carrasco ha realizado en su
vida profesional. Podemos decir por ejemplo, que es fundador del Centro
de Ciencia Política de Concepción (1965) y de la Asociación
Chilena de Ciencia Política (1966), miembro de la Fundación
de la Cultura de Concepción (1969), Miembro fundador de la Sociedad
de Historia de Concepción (1974) y su presidente (1986-1996), miembro
de la Academia Chilena de la Historia (desde 1981), entre otras. En otros
aspectos, también es socio del Club de Rodeo Chileno.
Actualmente es Decano de nuestra Facultad, cargo que ejerce desde 1996
siendo reelegido en dos oportunidades, 1999 y 2002; también imparte
las cátedras de Historia Constitucional de Chile y de Derecho Constitucional
en el Departamento de Historia y Filosofía del Derecho y de Derecho
Público, en el mismo edificio que lo vió llegar siendo un
joven estudiante.
Todo lo anterior demuestra la fructífera trayectoria del Señor
Carrasco. Pero nosotros quisimos saber, más allá de los
hechos, quién es don Sergio Carrasco Delgado... ¿qué
guarda en su espíritu? ¿qué piensa? ¿qué
siente al "mirar su camino recorrido?". Y así fue como
recibió nuestra visita...
|
Bastaron
sólo unos minutos para darnos cuenta que don Sergio Carrasco
Delgado es una persona amable, distendida y de sonrisa fácil.
Nos recibió en su oficina donde, despejando sus grandes
ventanales, procuró que entrara el sol de esa mañana
y la vista hermosa de primavera con... nuestro Campanil imponente
a la distancia.
(Foto:
Gentileza PANORAMA) |
No
es fácil iniciar palabra con quien es por estos días
el más idóneo representante de las Ciencias Sociales
2004 en Concepción, pero... cuando, al hablar de la ciudad,
recordó a doña Ester Roa pudimos comprobar poco a
poco que la historia es la pasión de su vida: "Doña
Ester (hoy con 87 años de edad) fue ¡la primera mujer
alcaldesa que tuvo Concepción! Alcaldesa en los años
en que era difícil... ¡Época en que el alcalde
no tenía recursos! Ella fue un fenómeno político
y que con gran visión construyó el Estadio Regional,
entre otras obras. Pero lo más complicado que encuentro es
que cada vez hay menos gente que sabe quién es ella y qué
hizo. Es que somos un país de duelos, de buenos sentimientos,
pero de falta de memoria histórica" |
Familia
Usted manifestó, ante una posible ley de divorcio con disolución
de vínculo, su inconstitucionalidad y, por tanto, afirmó
que los poderes públicos y sus integrantes deberían ejercer
todas las iniciativas y todos los derechos que resguarden, respeten y
protejan la familia y el matrimonio, ¿hoy qué reflexión
le merece la aprobación de la Ley de Matrimonio Civil con posibilidad
de divorcio vincular, considerando que cambia una normativa de 120 años
de antigüedad?
- Bueno, desde el minuto que existe una ley sobre la materia es una norma
clave de la convivencia ciudadana el acatamiento a la ley. Pasó
por las instancias legislativas, de gobierno y está aprobada y
empieza a aplicarse prontamente, de manera que no corresponde hacerle
objeciones de procedimiento a la ley, porque ya está vigente. Ahora,
también uno tiene que desear que sea buena la ley y buena su aplicación.
Hay ahí algunos resguardos que están tomados. Pero, lo básico,
lo que uno debe defender constitucionalmente es la familia.
Porque hay un inocente en la separación: el hijo ¡la víctima!
Nadie ha discutido que el hijo de una familia así fracturada, tiene
una carga de sufrimiento bastante importante. Entonces, esto no pasa por
una cuestión legal, pasa por una cuestión de principios
¿no es cierto? Una cuestión de defensa de un vínculo
al cual, voluntariamente, las personas han accedido; nadie -que yo sepa-
fue obligado.
¿Si
me preguntas si me parece bueno la ley de divorcio? Yo habría preferido
un sistema distinto, de mayor protección a la familia. Pero tampoco
hay que ser agorero en cuanto a los resultados porque, ¡capaz que
esta sea una ley que no cause los estragos que parece que se han causado
en muchos países! Porque, ¿sabe? Lo que uno debe pensar
es que se debe tender a la felicidad de las personas. Las normas son un
instrumento, propias de su tiempo. Así, por ejemplo, hoy son muy
importantes las normas de manejo ambiental, pero cuando llegó don
Pedro de Valdivia no tenían ninguna importancia. No eran los problemas
de la época.
Yo
soy partidario, por ejemplo, de la igualdad jurídica del hombre
y la mujer. La igualdad, el desarrollo, es interesante. Pero nunca me
ha parecido eso de celebrar el hecho de que se afecte aquello que es esencial,
la familia, porque éste es el refugio que tiene la persona, es
donde se gesta todo, eso es lo importante y no el aspecto formal de las
normas. Lo importante está en la cuestión más sustancial.
Y esto es cíclico; así en Europa, Estados Unidos los índices
de disolución de familia son muy grandes, muy explicables pueden
ser, pero uno tiene que saber si son o no más felices, si la sociedad
es más sana o no.
Está
pronto a cumplir 24 años de matrimonio junto a su esposa María
Olga Novoa H. ¿Pensó tener una familia tan numerosa (6 hijos)?
- ¡¡Ahhh claro!! ¿Cómo sabes eso? (risas) a
los 25 son las bodas de plata... ¡a ver! Bien interesante la pregunta...
la verdad es que no es que esto sea una competencia, pero cuando yo era
alumno, la mayoría de los profesores tenían aquí
cuatro o cinco hijos y había uno que tenía doce hijos. Hoy
la mayoría, los más nuevos, tienen dos o tres y a mí
me toca ser el que tiene más, seis... ¡y seis no más!
Pero en lo que tú me preguntas... nosotros jamás pensamos
en el número de hijos que íbamos a tener porque los hijos
no son una cuestión de número ¡quiero tener dos, tres,
veinte! No. Es un don, un don de Dios que tienes que recibir gratamente,
¡es muy bonito! La familia numerosa, además, atrae más
personas.
¿Cómo
ha sido la tarea para guiar a sus hijos en los temas de valor, cultura
y educación en este mundo globalizado?
-Bueno, los méritos reales de la educación de los hijos
los tiene la madre... ¡no es que yo sea dejado! Personalmente detesto
eso de querer "que el modelo del hijo sea el padre, que sea como
él"; eso no es así, los hijos deben ser mejores que
el padre. Además soy bastante permisivo, porque vengo de una familia
que era exigente. En cambio mi señora si bien es muy acogedora
es bastante firme.
Mira, yo creo que a los hijos debe dársele, primero que nada, cariño
y, por supuesto, respeto a sus decisiones. Yo nunca he intervenido en
lo que van a estudiar. Uno no puede imponer, tiene sí que ofrecerle
un modelo, una forma de ser que es la propia de cada familia. Así,
ellos han visto espíritu religioso, una vida sencilla y mucho libro
en la casa (a todos nos gusta la historia). Lo bueno es que hoy hay una
relación con los padres muy cercana; así debe ser.
Considerando
su gran riqueza en experiencias, ¿qué desea que sus hijos
recuerden de Ud.?
- A mí más me interesaría es que se mantengan como
personas buenas. Y que sintieran mucho cariño por su padre, su
madre, sus hermanos, las personas en general.
¿Sabe? Un tema de experiencia... el ser humano tiene virtudes,
y tiene defectos por supuesto, pero si yo dijera que características
son importantes... mencionaría que la bondad, la integridad moral
de la persona: el buen trato. Uno no tiene que saberlo todo o tener estudios
tan grandes, pero debe procurar desarrollar algunas buenas condiciones.
Estudios
Cuéntenos,
ese gusto por la historia y las letras que lo hace a Ud. tan particular
al momento de escribir, ¿de dónde nace?
-¡De la vocación! Que ayuda a no irse por las ramas, porque
la forma mata todo... Eso es innato, ¡no digo que sea una gran virtud
ni nada, pero es innato! Yo fui un lector compulsivo desde niño,
tengo recuerdos de amanecer con el libro en la cara... la lectura es el
gran alimento, el tema de las letras... de todo... de la cultura... ¡a
veces me leo un libro en el día!, ¡es como casi un vicio!...
Ahora bien, mi vocación es la histórica... entonces ¿sabe
lo que pasa? a veces se dice de la historia que "la historia se repite"...
¡eso es lo más falso que hay!... nunca se va a repetir. Lo
que se repiten son las actitudes del ser humano. Ahora, tener este tipo
de vocación te da cierta seguridad. Uno no es "pitoniso"
de nada, pero uno se ubica mejor en el mundo presente porque tiene la
visión histórica de mirar para atrás y adelante,
porque la HISTORIA no es el puro pasado, sino que el análisis de
los hechos; los datos que uno verifica; El contexto, eso es algo importante...
y mi vocación en verdad es mi felicidad de contribuir al desarrollo
en estos temas, no como yo quisiera, porque también hay tiempos
para la familia y para nuestro trabajo diario.
¿Cuál es el secreto de escribir con arte poético?
- ¡Es que la historia es viva... y cada uno de nosotros parte de
los instantes históricos en los que está incluido. Por lo
demás, la vida de una persona es lo mismo que la vida de un país,
hay momentos estelares, momentos desiertos, pero lo que mueve es la naturaleza
humana y sus talentos, y por eso el concepto de humanidad es tan clave...
nadie puede forzar esa naturaleza.
¿Qué
significa para Ud. recibir el Premio Municipal de Ciencias Sociales 2004
(por Decreto Nº 919/ 2004, Ilustre Municipalidad de Concepción)?
- Encuentro muy bueno que exista el Premio en nuestra sociedad, porque
las ciencias sociales incluyen el conocimiento verdadero del ser humano
y su integridad. Lo agradezco y lo recibo con humildad... ¡es sí
un estímulo muy bonito! Pero, cuando uno trabaja con mentalidad
histórica hay que tener un elemento de cierto escepticismo y reirse
algo de las vanidades, también propias. Uno debe saber si está
o no con el gran tema que es "el tema de la verdad" y, muchas
veces, los estudios históricos facilitan saber dónde está
la verdad de las cosas, de la vida, de la sociedad. Pero para eso no basta
que yo diga "esta es la verdad", tienes que fundarlo. Incluso
uno piensa con intuición, pero la intuición es más
bien lo que uno tiene de experiencia, no tanto por iluminación.
Es la experiencia... la percepción, pero fundada de las cosas.
Don
Sergio Carrasco recibe su Premio Ciencias Sociales 2004, junto a
él la Sra. María Nieves Alonso, Premio de Artes y
ell Sr. Luis Aguayo, Premio de Ciencias; acompañados por
el Rector de nuestra Casa de Estudios, don Sergio Lavanchy M. Ceremonia
efectuada el 06 de octubre en el Salón de Honor de la Ilustre
Municipalidad de Concepción. (Foto:Gentileza PANORAMA) |
Sabemos
que su Memoria de prueba para optar al Grado de Licenciado en la Facultad
de Ciencias Jurídicas y Sociales de nuestra Universidad en 1965
se tituló "HISTORIA DE LAS RELACIONES CHILENO-BOLIVIANAS".
Hace poco ha presentado al Concurso Nacional de Proyectos Fondecyt el
proyecto "Estudio Histórico-Jurídico de las Relaciones
CHILENO-BOLIVIANAS Contemporáneas 1975-2005", ¿hay
algún interés personal en este tema?
-¡Sí!... es un tema que al parecer, no sin limitaciones,
conozco bastante bien y... ¿sabes lo que pasa? Chile no tiene una
capa cultural tan intensa, son en general pocos en todas las materias;
por eso siempre hay que profundizar. Yo lo he seguido por años
y años. Tengo un archivo de prensa completísimo de 40 años.
He estado en Bolivia, en Santa Cruz de la Sierra. Recientemente he sido
invitado a un seminario en Arica con bolivianos... ¿Te
digo una cosa? ¡es bueno saberlo! "nosotros en Chile somos
muy despreciativos a veces para mirar a los bolivianos", pero, en
verdad, ¡son de primer nivel! Conozco muchas personas que no calzan
con esa idea despreciativa, claro que Bolivia está dividida en
dos grandes partes El oriente y el occidente; el oriente que es el europeo,
Santa Cruz y, La Paz la otra parte con muchos más problemas sociales,
con menos riqueza y con una aversión hacia Chile bien fuerte. Yo
espero contar con ese proyecto Fondecyt, si lo ganamos, la idea de estudiar
los últimos veinte años ¡muy rigurosamente!
¿Históricamente, cómo Chile ha enfrentado el conflicto
de salida al mar con Bolivia?
- Bueno... no es tan parejo todo ha habido momentos, sobretodo a fines
del siglo XIX y hasta el primer tercio del siglo XX, en que Chile estuvo
relativamente dispuesto a entregar un corredor a Bolivia, por los territorios
que habían sido peruanos. Pero detrás de eso había
un motivo geopolítico, dejar de ser frontera con el Perú,
que era el Estado poderoso porque la guerra... se llama del Pacífico,
pero fue entre Chile y Perú. Después hubo otro acercamiento
en el año 1950 y, en 1975, "La entrevista de Charaña",
en el gobierno del General Pinochet hubo esta posibilidad de diálogo,
¡pero siempre se ha frustrado porque el Perú no ha querido
que se entregue territorio!
Ahora,
en Chile, hay una opinión pública bien contraria a lo que
es cesión territorial. También acá no hay comprensión
del motivo psicológico-afectivo del tema en Bolivia, porque allí
es una CAUSA NACIONAL. Uno dice ¡esto de que no tenga mar cómo
va a ser razón suficiente! Pero, hay que entender que en Bolivia
el tema, incluso en sectores bien ilustrados y lo conciben como una RAZÓN
DE ESTADO fundamental. Por otra parte Bolivia está usando mucho
en estos momentos los puertos peruanos (como Ilo, por ejemplo), en desmedro
de Arica, lo que no es bueno para Chile.
Entonces,
nunca van a dejar de pensar en Chile como un país usurpador, aun
cuando los títulos coloniales y aun cuando la guerra haya dado
un resultado definido. Es complicado porque ellos no han tenido un criterio
muy atinado en la revisión del tratado: "ningún Estado
puede aceptar que le revisen los tratados" Lo que hay son nuevas
realidades, Chile como estrategia ha planteado los vínculos comerciales...
¡no le bastan a Bolivia! Es, entonces, un tema de ¡MUY DIFICIL
ACERCAMIENTO!
¿Qué tipo de evolución tendrá el tema a futuro,
alguna predicción?
- Lo único que puedo decir en este minuto es, que el tema va y
viene. Este año tenía mucho que venir porque se cumplen
el 20 de octubre los 100 años del Tratado de 1904. Y además
que en la política interna boliviana, como es un sentimiento real,
se maneja mucho la popularidad del gobierno en función de esto.
Es como ocurre con los sentimientos, positivos y negativos; en una sociedad
se utilizan recurriendo al subconsciente colectivo... ¿y en qué
está Chile? En la actitud de desconocer el problema... ¡lo
que tampoco es bueno! Hay que preocuparse del tema buscando otro tipo
de acercamiento.
Chile
también tiene un problema histórico, el que habiendo perdido
tanto territorio con Argentina, no hay ningún deseo de perder ni
una pizca con Bolivia. Y lo otro, cuando ha habido canje de territorio
los bolivianos no han sido dúctiles... ¡¡Nunca estuvieron
más cerca de tener mar que con lo de Charaña en el último
siglo, pero el Perú se opuso!! Antes en el Siglo XIX, con Santa
María tuvieron bastantes posibilidades.
¿Cómo llega a optar por el estudio del Derecho y derivar,
posteriormente, a la Historia Constitucional de Chile y al Derecho Constitucional?
-Yo llegué a la historia antes de estudiar derecho. Primero, no
es lo mismo Derecho que ley, ley es más formal, entonces la historia
es un elemento más como las matemáticas, la economía,
clave para la comprensión del Derecho ¿verdad? Mi vocación
viene en la mezcla del estudio histórico-jurídico, en mí
se junta esto.
¿Cómo
era el ambiente de estudio de las Ciencias Sociales por allá por
los años ´60?
-Yo diría que en la realidad, en el conjunto general del país,
muy tradicional con muchos menos medios de información de los actuales...
se ha progresado mucho, hay hoy mayores conceptos pedagógicos.
El Derecho tiene una dificultad, que es nacional, uno sale de la frontera
con Argentina y ya poco puede ejercer. Pero, sin embargo, el Derecho es
universal, eso lo hace tener también una visión de conjunto.
Su
carrera académica en la planta docente comenzó en 1965,
¿cómo ha sido la experiencia de enseñar el valor
de las Ciencias Sociales para formar a los nuevos profesionales del Derecho?
-¡Para mí muy bueno! Lo que pasa, veo un poco lo que hablábamos
de la familia. Un profesor tiene que habilitar a los alumnos a aprender
a estudiar, a despertar el interés, pero no puede imponer. Una
de las cosas que han perjudicado a los académicos de las ciencias
sociales, un poco ese rol algo panfletario, algo sesgado en algunos tema
y épocas. Hay que tratar de ser siempre lo más objetivo
posible, uno enseña mostrando al alumno cuáles son los criterios
que han existido para abordar la verdad.
Es muy grato ver que siempre hay alumnos que tienen muy buena vocación...
¡yo fui unos años profesor de alumnos de Ingeniería,
por ejemplo! y estaban tan interesados por las ciencias sociales como
acá en la Facultad.
Lleva
una labor docente ininterrumpida aquí en la Facultad ¿me
imagino que es su segundo hogar?
-¡Sabe! que el concepto jurídico de hogar, es el lugar donde
uno vive, trabaja. Ahora... ¡Son mundos distintos! Acá yo
tengo que ver mucho con bastantes personas y con muchas cosas que hacen.
Siempre procuro no mezclar las cosas, en el sentido, por ejemplo, de no
hablar en clases cosas personales, porque considero un abuso para los
alumnos.
Yo
hago todos los años un viaje con los alumnos, ¡y esas son
las cosas más gratas para mí! converso con ellos, conozco
sus mundos, es muy interesante... ¡Es bien notable las vocaciones
que hay en ellos! Muchos artistas, poetas, músicos, deportistas...
Es muy bonito y... ¡uno ve como va madurando la persona! Esta es
la verdadera remuneración de un profesor.
¡Le gusta esa evolución...!
Es bonito, pero al mismo tiempo, si se está en los estudios históricos,
igual que lo que se da con la familia, esa evolución va a existir
y va a existir siempre, de lo cual hay que alegrarse. Pero uno también
tiene algo, ¡de cierta reminiscencia!. Y el paso del tiempo da esa
pena, esa tristeza de lo inevitable!
Especialización
Don
Andrés Bello, ¿por qué un servidor público
auténtico?
- El concepto de servir, sin esperar recompensa, viene del cristianismo.
La persona está para servir, no quiere decir que no lo pase bien
y que disfrute. Pero las funciones de servicio son hacia los demás.
Entonces, tal vocación llevada al servicio público es aun
más desinteresada, cuando ya uno puede servir absolutamente a los
demás, a los que son ajenos... y esto tiene que tener un elemento
de grandeza incorporado, porque la persona debe luchar contra la idea
de que tienen que agradecerle por las cosas que hace. En la familia eso
no se aprende, lo dicta la fuerza del cariño. Y, a propósoto,
¿tú sabes que el cariño es más fuerte de arriba
hacia abajo? ; ¡Nadie te va a querer más en tu vida que tus
padres! ; ¡tu no vas a querer igual de fuerte a tus padres, tu vas
a querer así a tus hijos! Es el ciclo de lo natural y cuando se
interrumpe, hay una crisis.
Entonces,
el servicio público, tiene que ser auténtico como lo fue
en ésto Bello, como lo fueron Portales, Montt, Varas, Alessandri...
¡tanta gente! En el sentido de que ¡tú no sirves para
agradar, no sirves para ser popular, no sirves para que te aplaudan!...
sirves porque es tu deber para con la sociedad; entonces eso es un gran
desprendimiento...¡y eso es la clave del prestigio de las personas!
Porque... ¿tú has pensado que es lo más que puedes
agradecer de una persona que no sean tus familiares de sangre? Pienso
yo lo que uno más agradece es que le hayan servido de verdad, como
que nos hayan enseñado, no es el que te resuelvan algo.
Eso
implica una dación gratuita, pero no para sentirse ¡oh que
bueno, soy yo el que lo hace! Sino que simplemente ¡eso es mi deber!
Y lo hago muy contento tender la mano, pero no tampoco por pura caridad
sino con el sentido de servir, "qué le conviene a esta sociedad"...
y en eso gente como Bello fue un ejemplo ¡todo su talento puesto!
Él lo podría haber pasado en términos modernos mucho
mejor... Porque ¡hay personas que viven una vida impecable! Nadie
podría criticarles nada, pero... casi ausentes de todo espíritu
de servicio.
¿Qué representa don Diego Portales cuando nos referimos
a la idea de vocación por el servicio público?
- Portales fue un genio político, una persona extraordinaria a
quien le debe Chile haber organizado la República, porque sin él
Chile habría ido a la anarquía. Ahora, por cierto que ¡lo
hace con rigor! Pero ¡con gran desprendimiento! ¡Portales
era un hombre económicamente arruinado mientras seguía haciendo
cosas en servicio a los demás!
¡Portales
tiene un mérito! Lleva a la noción de servicio público,
que no la inventa él, a la práctica política y generó
todo un ejemplo... ¡si hasta hoy se habla de "Espíritu
Portaliano", todavía... para referirse a gente que es muy
desprendida y ¡eso es!...o sea... ¡convencer a la sociedad
de su época que esa era la conducta correcta!. Antes de Portales
hubo un Ministro de Hacienda que vendió unos barcos para quedarse
con la plata. Esa idea que el gobierno redunda en beneficio de quienes
lo detenten... ¡no!... la idea de Portales y la gracia de Portales,
no obstante estar en el gobierno tres años, es que deja ese ejemplo
grabado a fuego. Eso es lo que hace que hasta hoy perdure... la gente
no trasciende por el personalismo, trasciende por el tipo de ejemplo de
servicio desinteresado que da.
Usted escribió un libro acerca del pensamiento constitucional de
don Jorge Alessandri Rodríguez y menciona allí la trayectoria
pública de éste y su vocación de servicio público,
¿cuál es su reflexión al respecto?
- Don Jorge Alessandri fue un hombre extraordinariamente dotado moral
e intelectualmente. Además, con un sentido de austeridad y corrección
tremenda. (Tengo una copia del archivo de Alessandri) ¡ni un gesto
de su gobierno fue para ganar amistades y caerles bien! Era como ejemplo
consistente de servicio. Era un hombre que se cansaba, se enojaba, pero
seguía firmemente... En una encuesta que hizo el Diario La Nación
hace dos años, salió Alessandri como el presidente mejor
recordado, precisamente por todo esto. Es la encarnación de un
hombre, ya más contemporáneo, con un notable espíritu
de servicio y de competencia, de una manera de trabajar muy rigurosa.
Los que trabajaron con él quedaron siempre muy impresionados.
A
mí me dejó la percepción de un sentido de justicia.
Por ejemplo, al Sr. Alessandri le daba lo mismo nombrar a una u otra persona,
de cualquier lado que fuera. En una ocasión que iba a nombrar embajador
a alguien le dijeron: "¡pero no puede nombrarlo porque este
señor fue muy contrario a su padre, don Arturo Alessandri y escribió
contra él y... etc, etc! Y él dijo: "¡bueno y
qué tengo que ver con las peleas de mi padre... si mi padre peleó
con medio mundo, así que no me puedo guiar por eso! Eso se ha ido
perdiendo en Chile. Estamos muy divididos en bandos.
¿Y qué pasa con Chile hoy?
- Hay una frase muy buena: "el hombre contemporáneo es un
mal testigo de su propio tiempo" uno puede saber muy bien el pasado,
pero le cuesta ver claro lo que hoy ocurre. Lo que pasa hoy mismo nos
es difícil apreciarlo, por falta de perspectiva, porque está
involucrado uno mismo. Yo noto que actualmente hay, por ejemplo, un tema
en Chile que está pendiente, cual es la necesidad de luchar por
la igualdad ante la ley, o sea, que no exista la discriminación
arbitraria, que no por ser amigo o contrario se termina de alguna manera
sin acceso al cargo público ¡se acuerda que alguna vez se
llamó a concurso para proveer cargos y presentarse el que quiera
y se presentaron como 500! y dijeron: "¡no pues, hay que nombrar
a gente del lado de nosotros... buenos, pero del lado de nosotros!"
Eso, olvidémonos quien sea, eso es malo para la sociedad, tiene
que haber un criterio de justicia... si cumple los requisitos ¡bien!...
distinto es, ¡claro! los cargos que son de exclusiva confianza.
Me parece que este tema deben desarrollarlo nuestros alumnos de Ciencias
Políticas y Administrativas. Porque tiene que ver mucho con su
formación y vida profesional.
Creo
que ese concepto es muy importante; ¿Sabe Ud.? Porque la gente
se desilusiona, sobretodo la razón última por lo cual los
jóvenes están desilusionados de la política ¡porque
no ven consecuencia y equidad!
¡Si uno puede pensar como quiera! Y al final todas las tendencias
tienden al bien, digamos, ¡unos la hacen mejor, otros peor! e incluso
así, con un buen propósito como la igualdad, la equidad
son muy importantes... ¡eso lo aprecian mucho los alumnos! el profesor
que trata de ser justo. Eso es importante en la vida, el principio de
justicia; la gracia es que lo apliquemos
Grupo
GEDAP junto a don Sergio Carrasco y nuestra directora de Departamento,
Sra María Gabriela Ciudad. (Foto, gentileza GEDAP) |
¿Qué me dice del tema de la regionalización?
- Chile tiene un grave problema de centralismo, casi no soy nada de optimista
porque el centralismo es una realidad en Chile Si uno suma Santiago, Valparaíso,
Concepción reúnen más del 70% de la población
del país. Si uno ve los estudios de postgrado está todo
concentrado. Eso hace que sea poco equitativo el Estado porque... el Metro
no lo van a construir en Concepción ¡ni en Valparaíso
siquiera! Entonces prefieren Santiago como hay cada vez más personas
allá, y hay que construirlo por la necesidad, porque no puedes
tener andando a pie dos horas, para llegar a su trabajo, a una persona!
Pero la concentración no es buena, no trae como consecuencia un
desarrollo armónico... Bueno ahí tienen Uds., cientistas
políticos y administradores públicos, otra tarea de futuro.
¿Qué
le parece la lucha de ciertos grupos por descentralizar las decisiones?
- Ésta debe ser una lucha constante, ¡no se puede aflojar
ni un día! Pero tengo mis dudas de que si se gana algo ¿Sabe
por qué? Porque nos lo está dictando un dato la población.
"Santiago tenía en 1920, 3 millones de habitantes que era
el 10%, hoy si no me equivoco tiene el 44, 5% y se estima que para el
2010 la cifras deberían dar el 50%... ¡agreguemos algo más!
Santiago tiene el 2% de población rural, Chile tiene el 19%. Entonces
una provincia que tiene la mitad de la población, que sólo
un 2% vive en el campo y el resto en la ciudad, es una sociedad llena
de necesidades; de urbanización, habitación, diversión,
locomoción, o sea, casi es inmanejable. ¡Eso es lo que pasa
en Chile!
¿Si
las cifras hablan por si solas por qué se insiste en lo mismo?
¡¡Porque hay dos discursos!! ¡a ver! El concepto región
aparece en el mundo jurídico por los años 1940, antes existían
las llamadas Asambleas de las Provincias. Pero la regionalización
así definida en la Constitución tiene 30 años. El
discurso en esos últimos años ha sido todo pro- regionalización.
Muy raro que uno encuentre gente que diga: "no mire yo creo que el
centralismo es un buen modelo... ", sin embargo... ¿por qué
se va la gente a Santiago? ¡No por el clima! Sino se iría
a lugares más bonitos... lo hace porque hay más posibilidades
de trabajo y desarrollo. Entonces, el centralismo se retroalimenta, eso
es. Y ciudades grandes, como Concepción, por ejemplo, también
lo hacen respecto al resto de las comunas porque existe un centralismo
intra-regional
Ahora,
¡encuentro muy loable lo que han hecho los movimientos regionalistas
siempre insistiendo! y yo personalmente adhiero a eso, pero veo que es
muy difícil "nadar contra la corriente". No sé,
no tengo idea formal en el tema, pero sobre el Teatro Pencopolitano...
¿qué hacen los vecinos? Van a hablar con el gobierno central
a pedirle, por favor, que les de un poco de recursos, para un estudio
¿dónde está la decisión? Entonces, la mayoría
del país declara ser regionalista y lo entiende porque, en lo racional,
tiene que ver con la equidad de los recursos, con el desarrollo armónico,
pero en la práctica...
¿Será
que las autoridades no están muy convencidas?
- No, no creo que no los convenza lo conceptual, ¡los convence la
realidad! Ellos tienen que atender las necesidades, determinadas por las
que hay en Santiago. Es complicado el tema. Es destacable que existe CORBIOBIO
(Corporación para la Regionalización del Bio-Bio) aquí
en Concepción, a cargo de don Claudio Lapostol M. que tiene un
trabajo muy interesante; y con Ciencias Políticas y Administrativas
también ¡un mérito enorme! Junto a otros también
que han mantenido y se han hecho respetar, pero no se notan grandes resultados.
Hay que estar en esa línea, pero con un optimismo a toda prueba
porque, hay lo que se llama una "mentalidad centralista" que
la adquiere también el hombre de región... eso de esperar
todo del centro. Es un problema cultural. En esto no hay que irse a lo
formal... que se elijan a los Intendentes es una cuestión formal,
¡la gracia es que los Intendentes, cualquiera que sea, tenga obligaciones
y mentalidad favorables al tema!
Ud.
goza de un extenso y notable curriculum, ¿de todas las actividades
que ha realizado en el ámbito humanístico,
cuál le ha reportado mayores satisfacciones?
- ¡No es tanto lo que he hecho! ¿a qué hora duermo
dice Ud.? (ríe). Yo soy algo como Napoleón ¡Duermo
poco!... Pero de todo, yo agradezco a Dios, creo que Dios a uno le da
condiciones, logros, oportunidades para que encuentre familia, trabajo...
¡En general, he podido dedicarme a lo que quiero! Para mí
las cosas que más valen son las cosas de fondo, las cosas de forma
son útiles pero no lo principal, en tanto que las de fondo... ¡¡son
tantos motivos de felicidad!! Poder ayudar a otra persona, poder que te
ayuden otras personas, diría... ¡una satisfacción
integral de cosas! Además de mis actividades más evidentes,
¡me gusta la vida de campo!, mis antepasados y mi señora
son de familia de campo... Para mí el campo y la mentalidad que
allí se tiene son un gran agrado.
Ahora
la otra cosa, es que en la vida la felicidad forma parte también
de acomodarse a las realidades ¿sabes? Porque las necesidades económicas
no terminan nunca... entonces siempre va a haber algún motivo.
Hay que jerarquizar las cosas. Pero el valor del fondo del ser humano
es muy importante... ¡te has fijado que no hay ser humano que quiera
cambiarse por otro!
Esto
es muy importante no sólo en los estudios históricos...
¡lo es en la vida! Yo lo vi también en mi padre, en el "yo
no escucho a los que gritan, yo escucho a los que callan". Uno parece
estar muy influido por los medios de comunicación porque... si
uno mira la televisión... hay un vocabulario vulgar, pero eso es
la minoría, es lo que a uno le presentan. Pero si nos acercamos
a las personas, tú ves un casi universal contenido de muy buenas
intenciones, de muy buenas disposiciones. Lo que pasa es que Chile es
un país de gente con poco liderazgo, con poca seguridad en sí
misma, uno agacha la cabeza y no se atreve a decir las cosas.
Es verdad, que en los distintos campos de estudio, ¡la gran limitación
que tienen! es que no siempre vemos el conjunto del problema. Pero yo
soy optimista en ver el fondo de las personas y que cada vez se sientan
lo más libres posibles en sus expresiones, porque no hay cosa más
detestable que la lectura oficial en aspectos propios del desarrollo humano,
como la cultura.§
Fuente:
Cont@ctoPúblico
Fecha publicación: noviembre de 2004
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