Declaración Pública sobre "Bosques de la Cordillera de la Costa" | ||
Santiago, 19 de Junio de 2001
A QUIEN CORRESPONDA: La Sociedad de Ecología de Chile y la Sociedad de Botánica de Chile, sociedades científicas afiliadas a la Sociedad de Biología de Chile, constituidas por ecólogos y botánicos profesionales activos, tiene a bien dar a conocer los siguiente: Consideramos que la diversidad biológica y ecosistemas representados en los Bosques Templados de la Cordillera de la Costa entre la VII y la X Región de Chile deben ser considerados en la más alta prioridad en el contexto de la conservación de los Bosques Templados de Sudamérica Austral. Los bosques de la Cordillera de la Costa en este ámbito latitudinal constituyen una notable reserva de diversidad biológica mundial y la mayor concentración de endemismos en la región de los bosques templados de Sudamérica, producto de su particular historia biogeográfica, que se remonta al período Pre-glacial, y a las favorables condiciones climáticas moderadas por el océano. Estos bosques costeros templados se encuentran en una estado de gran deterioro debido al impacto humano y notoriamente subprotegidos por el Estado. Asegurar la subsistencia del último
remanente de bosques primarios continuos (superficie estimada: 400.000
hectáreas), de edad milenaria, identificado por el catastro de
bosques nativos en la Cordillera de la Costa de la X Región, revisado
por World Wildlife Fund, representa una última oportunidad para
proteger un patrimonio biológico de incalculable valor para Chile.
La extensión de este territorio boscoso permitiría la sobrevivencia
especies animales de amplio rango de hogar y especies de plantas y animales
restringidas a bosques primarios. La situación actual de deterioro
de los bosques costeros nos indica que deberemos lamentar la pérdida
en el mediano plazo de una importante fracción de la diversidad
biológica regional. Un esfuerzo de conservación dirigido
a este sector costero puede contribuir a reducir en forma importante las
anticipadas pérdidas de biodiversidad.
Dr. Juan Armesto |