La Enfermedad de Creutzfeldt – Jakob es la versión humana de la Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) conocida comúnmente como la enfermedad de las “vacas locas”. Es un trastorno del cerebro degenerativo e incurable y de trayectoria rápida.

Es un mal contagioso e infeccioso,que tiene su origen en una proteína llamada “Prion”. Entre los factores de riesgo se encuentran el tener contacto con tejidos que contengan priones, comer carne proveniente de vacas infectadas y recibir un trasplante de córnea.

Los síntomas generales son visión borrosa, alucinaciones, rigidez muscular, cambios de personalidad, delirio o demencia, problemas de habla, pérdida de memoria, ansiedad y estrés, entre otros. Puede ser confundida con el mal de Alzheimer, por lo que para confirmar el diagnóstico de ECJ debe realizarse una biopsia de cerebro o una autopsia en los casos de fallecidos.

A pesar de las investigaciones, en la actualidad no se conoce cura alguna, solo es posible el alivio de sus síntomas, por medio de un diagnostico y tratamiento oportuno.

La prevención de este mal está dada principalmente por la fiscalización de carne de res (principal causa de contagio). Para reducir el riesgo de contagio entre personas, los equipos médicos se esterilizan y se lleva un estricto registro con las personas con antecedentes clínicos de ECJ.

.Alejandra E. Ibarra U.; Estudiante de pregrado;

Universidad de Concepción; Concepción, Chile.