Marcelo Lagos, geógrafo físico y doctor en Ciencias Ambientales “No tenemos una cultura
ante riesgos naturales”
Conversar con Marcelo Lagos
es como esperar la primera ola
del tsunami, de lejos no parece
muy destructora pero cuando
llega, arrasa con todo. Y todo su
potencial lo demostró el pasado
11 de marzo, cuando el país se
paralizó esperando el tsunami que
golpearía nuestras costas tras su
devastador paso por Japón.
Marcelo Lagos y Ximena, su señora,
tienen tres hijos y señala
que “vamos por el cuarto”. Ante
su mujer se quita el sombrero,
siempre ha sido su apoyo y recuerda
que cuando en sus intereses
laborales era la academia
y no la empresa privada la que
lo llamaba como estilo de vida,
fue Ximena quien le dio coraje “pese a que en el
mercado laboral
ganaba
diez y ahora
iba a ganar dos, ella me apoyó y me
fui a trabajar a la PUC”, de eso
ya hace 15 años.
Cuando fue el turno de realizar
sus estudios de posgrado fue
la Universidad de Concepción,
con el programa de doctorado
Ciencias Ambientales del Centro
Eula el único lugar en Latinoamérica
donde el tema que le interesaba
estudiar tenía cabida.
Fue en 2003 cuando comenzó
su vida penquista, duro un año,
tiempo en que debía cursar los
ramos de los primeros semestres
del doctorado.
En su visita a nuestra zona inauguró
el año académico de la facultad
de Ciencias Sociales ante
un auditorio repleto. Expuso Viviendo
con tsunamis, así, con el
verbo del título en gerundio, que
implica que toda su vida ha girado
en torno a esta temática,
fue su interés en durante su
pregrado en Geografía y
fue el centro de su investigación
durante su doctorado.
Su tesis, dirigida
por su querida profesora
María Mardones -una
persona que a su juicio
es digna de entrevistar-, “el trabajo se llama
Mozart, que significa,
Metodología Optimizada
para la Zonificación
de Áreas de Riesgo de
Tsunami M-O-Z-A-RT”,
deletrea.
-¿Cómo fue ese período
de estudiante
en la UdeC?
Arrendé una casa
en Concepción y
me vine de lunes
a viernes. Nunca
tuve dedicación exclusiva,
así que en
la PUC seguía con
mis estudiantes y mis
asignaturas. Estuve
un año full en el Centro
EULA, subiendo
ese cerrito todos los
días. Me venía los
lunes y me iba los
viernes en la tarde
con la ropa sucia.
-Entonces se fue del calor de
su Arica natal al brumoso y
lluvioso Concepción…
… Estudiaba con un gorro de
lana, debajo de las frazadas, sacaba
los papers con los dedos
congelados, en realidad no pasé
mucho calor, pasé frío, soy ariqueño,
así que mi sensibilidad
es totalmente distinta a la gente
de esta Región. Pero independiente
de ello, lo que no mata
fortalece, y ése es un principio
fundamental en mi historia de
vida.
-Dado su papel el pasado
de 11 de marzo, ¿cree que
los medios están preparados
para informar responsablemente
sobre este tipo de
eventos?
Creo que la responsabilidad no
es sólo de los periodistas, es
también desde las ciencias más
duras y de las ciencias aplicadas.
Todos tenemos una cuota
de responsabilidad en estos temas,
lo cierto es que como país
no tenemos una cultura de riesgos
naturales.
-¿Qué le ha parecido esto de
ser uno de los rostros con
más credibilidad de la televisión?
La respuesta masiva que he tenido
de la comunidad, sea vía
Twitter, correo electrónico, Facebook,
o Wikipedia, fue inesperado.
Todas esas señales,
me hicieron reflexionar en esa
necesidad que tiene la gente de
información con credibilidad de
los que se les transmite. Ese nicho
lo cubrí unos días en el momento
de la emergencia, y no
sólo los periodistas, sino que
todos deberíamos tener manejo
sobre el tema. No pongo en
duda que no sólo algunos periodistas,
sino que muchos especialistas
emiten opiniones sin
fundamentos o sin conocimiento
detallado de cierto tipo de fenómeno,
yo lo he visto , incluso en
cursos o seminarios en los que
he participado.