Campus Universitario entre las obras arquitectónicas señeras del siglo XX

La contribución urbana y cultural de la Universidad de Concepción no sólo a la Región, sino también al país, fue reconocida por la Comisión Bicentenario en el Premio Obra 2008.

Obras que han marcado positivamente calles y ciudades, que hablan de belleza y técnica, de generación de importantes espacios públicos y que sus habitantes han asimilado como propias, lo que les da un gran sentido de permanencia y significación, poseen las dieciocho seleccionadas por la Comisión Bicentenario en el Premio Obra 2008, entre las cuales se cuenta el denominado Eje Cívico, Campus Universidad de Concepción .

La ceremonia de premiación se realizó el jueves 11 de noviembre en un edificio que es símbolo del centenario del país: el Museo Nacional de Bellas Artes, y fue presidida por el ministro del Interior Edmundo Pérez Yoma, en su calidad de presidente de la Comisión Asesora Presidencial Bicentenario.

El jefe de gabinete de Gobierno fue el encargado de entregar el reconocimiento al Rector de la Universidad, Sergio Lavanchy Merino, quién recibió un diploma y una placa que da cuenta de esta designación convocada en el marco de las celebraciones del Bicentenario y que distinguen aquellas obras de desarrollo urbano de la primera mitad del siglo XX, correspondiente al período 1910-1960.

En el caso de la distinción a nuestro Campus, el trazado estudiado por el jurado incluyó a partir del río Bío Bío, el Centro Cívico, los Tribunales de Justicia hasta desembocar en la Universidad de Concepción como remate o cabezal del área urbana, a través de sucesivos patios, enmarcados por edificios de diferentes estilos, que en conjunto ofrecen una creación colectiva admirable y que habla de un gran proyecto, producto de acertadas decisiones arquitectónicas. El plan general de construcción fue desarrollado por Karl Bruner, en la década del 30 y continuado por Emilio Duhart y Roberto Goycolea, en la década de los 60.

El Campus o Barrio Universitario, por su incidencia en el área aledaña, nace junto a la creación del plantel, por iniciativa del rector Enrique Molina Garmendia y de un grupo de vecinos destacados de la ciudad.

El premio –indicó el ministro Pérez Yoma- representa el espíritu de la educación pública que ha marcado gran parte de nuestra historia republicana. Las edificaciones recogieron anhelos de la comunidad. Obras de este tipo necesitamos para continuar con nuestro afán de hacer ciudad, precisó el secretario de Estado, quien además destacó el rol de promotor y coordinador del Estado, junto al eficiente trabajo de privados y la sociedad civil.

Entrega de distinciones

Junto al ministro del Interior estaban presentes el Cardenal Arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz; los ministros de Obras Públicas, Sergio Bitar y de Cultura, Paulina Urrutia; el subsecretario de Deportes, Jaime Pizarro; el diputado José Miguel Ortiz, quien es además integrante del directorio de la Universidad, y el intendente de Santiago, Igor Garafulic, además del secretario ejecutivo de la Comisión Bicentenario, Javier Luis Egaña Baraona.

En tanto el Rector estuvo acompañado de las principales autoridades de nuestros plantel; el vicerrector Ernesto Figueroa ; el vicerrector de Asuntos Económicos y Administrativos, Alberto Larraín; el secretario general, Rodolfo Walter; la directora de Extensión, María Nieves Alonso y decanos de distintas facultades.

También concurrieron directivos de los organismos organizadores: la Comisión Bicentenario, la Cámara Chilena de la Construcción, Colegio de Ingenieros, el Colegio de Arquitectos y la Asociación de Oficinas de Arquitectura, quienes en conjunto elaboraron la nómina de los distinguidos.

Similar convocatoria se realizará- anunciaron-para las obras construidas desde 1960 a la fecha.

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