Municipalidad reconoce nuevamente
aporte de nuestros académicos

La comisión encargada de dirimir los premios que el municipio penquista entrega en su aniversario dio a conocer su veredicto a mediados de mes, confirmando la importancia del aporte de nuestra casa de estudios al desarrollo de las ciencias. En esta ocasión, los dos galardones en este ámbito recayeron en académicos de nuestra Universidad.

El trabajo desarrollado en el área de control automático de procesos, le valieron al profesor titular del departamento de Ingeniería Eléctrica, Daniel Sbárbaro, el Premio Municipal en Investigación Aplicada.

Ingeniero formado en esta casa de estudios y doctor por la Universidad de Glasgow (Inglaterra), el académico ha centrado su investigación en la línea de control de procesos multivariados, emulando la capacidades humanas como la adaptación, técnicas que ayudan a resolver problemas complejos propios de la automatización de procesos industriales. Las publicaciones del doctor Sbárbaro en esta área muestran índices de citación superiores a 500, que demuestra la relevancia de sus estudios.

Las contribuciones más importantes en la aplicación de su investigación en el sector productivo se encuentran en el área minera, con proyectos nacionales e internacionales orientados al área de molienda y flotación. En la primera destaca el desarrollo de sensores virtuales adaptativos para la estimación de la distribución granulométrica de salida en circuitos de molienda y en sistemas predictivos de control de la alimentación de molinos SemiAutóGenos (SAG).

Los aportes más relevantes en la segunda, son el desarrollo de estrategias óptimas de operación de bancos de flotación que permiten aumentar la recuperación de mineral de cobre en una ley dada.

En el área de la investigación precompetitiva a nivel internacional, el doctor Sbárbaro es parte del proyecto A review and benchmarking of process control and automatization at copper concentrators, que se suma a otro anterior, ambos para AMIRA, que han dado luces sobre la situación actual y proyecciones de la automatización y desarrollo de capital humano para la operación de sistemas automatizados en plantas concentradoras. Toda esta información será incluida en un libro en el que Sbárbaro participa junto a investigadores de la Universidad de Laval (Canadá).

Demostrar, de manera inequívoca, que la vitamina C es el antioxidante más potente presente en las célula humanas, siendo fundamental en la protección contra el estrés oxidativo y superando la actividad de otros antioxidantes de origen natural, es uno de los fundamentales méritos que el académico –y director- del departamento de Fisiopatología, Juan Carlos Vera - en la foto -, le significó ser reconocido como Premio Municipal de Ciencias 2008.

Vera, además, se ha caracterizado por ser un impulsor de una línea de investigación de un nivel de excelencia reconocido a nacional e internacionalmente y contribuir en la formación de estudiantes de pre y posgrado de nuestra casa de estudios.

Su trayectoria y reconocimiento datan desde que en 1993 identificara molecularmente a los transportadores de la vitamina C, que corresponden a los transportadores de glucosa. Este descubrimiento, publicado en la revista Nature, produjo un impacto mundial al provocar un cambio para siempre en el área de estudios antioxidantes.

Otro de sus descubrimientos fue que el flavonoide Genisteina, uno de los compuestos del poroto de soya, contiene propiedades antioxidantes que modulan la actividad de los transportadores de glucosa y de vitamina C, abriendo un nuevo campo de investigación en el uso de los flavonoides para modificar la actividad de proteínas de membrana involucrada en la absorción de nutrientes.

Dirigiendo el proyecto anillo, de Conicyt, Vitamina C y resistencia al estrés oxidativo, realizó un estudio en escolares en riesgo social de la comuna de Coronel, el que demostró que estos escolares poseen una clara deficiencia en los niveles plasmáticos de vitamina C debido a una alimentación inadecuada.

2008 fue un año de nuevos comienzos, gracias a los resultados obtenidos de sus investigaciones, se embarcó en el estudio de nuevos medicamentos para el tratamiento de la diabetes, basado en el desarrollo de moléculas activadoras con especificidad por sitios regulatorios de los transportadores de glucosa, tema que le valió ganar un proyecto Fondef.

Bajo su alero, en los últimos diez años, se han formado veinte estudiantes de pregrado, 4 de magíster, 12 de doctorado y 3 posdoctorados. Su paper en Nature ha recibido 247 citas y sus trabajos, en total, superan las mil 600 citas.

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