| Nº 626 miércoles 25 de junio de 2008 |
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Cruch propone medidas para mejorar Para el 7 de julio está programada la ceremonia en la cual las universidades presentarán el documento en el ex Congreso Nacional en Santiago.
En este marco referencial debemos destacar el hecho de que, por las características geográficas de nuestro país, los recursos naturales decididamente explotables se encuentran dispersos en sus diferentes regiones, por lo que la regionalización constituye una prioridad innegable para asegurar el éxito de su desarrollo armónico. Por ello corresponde a las regiones preocuparse encarecidamente de favorecer la formación de recursos humanos altamente calificados para la gestión y la investigación, sin descuidar la formación de técnicos superiores, formación que, conforme a parámetros internacionales, se demuestra como una oferta educativa insuficiente para atender los requerimientos que demanda y demandará, en el corto y mediano plazo, el desarrollo económico del país. Posgrado
Consejo de C+T+I
Áreas prioritarias Frente a las áreas prioritarias definidas en el Libro Blanco, propone incorporar al clúster aquéllas que son transversales para el desarrollo económico en general, tales como, energía, recursos hídricos, calidad de la educación y masificación de la banda ancha, y las que derivan de las preocupaciones de la sociedad por temas como salud, seguridad y medio ambiente. Para recoger otras demandas se sugiere llevar a cabo un diálogo con el mundo científico, así como con las universidades, los sectores productivos, expertos en políticas públicas y la sociedad civil, que aporte una mirada amplia e integral, tanto de las ciencias exactas y naturales, como las sociales y humanidades. Universidad empresa
Infraestructura y equipamiento
La gran mayoría de los investigadores del país está trabajando con instrumental científico obsoleto, en laboratorios poco apropiados y carecen de instalaciones modernas que les permitan ser competitivos a nivel internacional. Para actualizar el equipamiento de investigación en el país se debe constituir un Fondo de Equipamiento al que se concurse anualmente, al cual podrían postular (en categorías separadas de equipo mediano o equipo mayor) las universidades o instituciones de investigación sin fines de lucro, cuya trayectoria fuese reconocida en el ámbito nacional e internacional. A su vez estas instituciones deberían estar calificadas para administrar y mantener el uso del equipo para su mejor aprovechamiento por todos los investigadores de la institución, de la región o del país en el caso de equipos o instalaciones nacionales. Política regional La política regional de ciencia y tecnología debe estar estructurada en torno a necesidades y potencialidades regionales. Debe contarse con organizaciones autónomas propias de las regiones. El sistema debe propender a una mayor eficiencia que aquélla propia del sistema nacional. La política regional de ciencia y tecnología debe ser consensuada, conocida y aceptada por una gran mayoría de los miembros del sistema. La política regional debe considerar las necesidades y capacidades regionales en materia de I+D+I tanto de las empresas como de las universidades y de los centros de investigación como las del sector público. Las acciones que se emprendan para fortalecer la ciencia y tecnología a nivel regional, deben ser transparentes y ampliamente conocidas por sus protagonistas; evitando criterios ajenos a los técnicos, incluyendo la simplificación de los procedimientos, evitando la burocracia, y facilitando las postulaciones, evaluaciones y seguimientos técnico/económicos. La regionalización de la ciencia y tecnología no es algo positivo en sí, todo depende de cómo se realice. Educación y alfabetización en ciencias El desarrollo científico y tecnológico y de innovación en Chile requiere que la sociedad aprecie, valore y conozca las actividades de investigación y sepa cuáles son sus aplicaciones en la vida cotidiana. El documento propone que se incremente el programa de Educación en Ciencias basado en Indagación (ECBI) que se realiza en nuestra Universidad y otras 4 casas de estudios superiores, para gradualmente ofrecerlo a los niños que cursen educación básica en todo el país, y para que esta metodología se incluya en la formación inicial de profesores. También se proponen medidas para la enseñanza media, y en el plano de la educación informal sugiere potenciar los museos interactivos y el programa Explora En un párrafo final añade la necesidad de perfeccionar el periodismo científico en su papel de intermediador con la sociedad.
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Fruto de un trabajo participativo con las diferentes comunidades académicas de las universidades del Consejo de Rectores de la Universidades Chilenas, Cruch, que finalizó con un Seminario realizado en nuestra Universidad, el Consejo de Rectores ha elaborado un documento para contribuir al debate sobre las políticas nacionales de Ciencia, Tecnología e Innovación C+T+I, con un conjunto de propuestas que estima indispensable para apoyar su concreción. Éstas se refieren a capital humano avanzado; institucionalidad para el desarrollo de la ciencia y la tecnología; definición de áreas prioritarias para el sector; fortalecimiento de la relación universidad–empresa; dimensión regional de la política de C y T; necesidad de renovar infraestructura para C+T+I; mejoramiento de la Educación en Ciencias a nivel básico y medio; y alfabetización en Ciencias a la sociedad chilena.
Las medidas propuestas en esta área son incrementar y fortalecer los programas de doctorado y magíster en el país, incrementando en 15% anual el número de becas. Creación de un observatorio para realizar el seguimiento de estos temas. Plan de captación, retención y circulación de recursos humanos desde becas de doctorado y posgrado en el extranjero como también becas de posdoctorado a doctores chilenos. Plan de inserción de doctores en el sector productivo propiciando una mayor sintonía entre este sector y el universitario. Planes de incorporación de doctores al sistema universitario con la creación de mecanismos específicos que faciliten la realización de este proceso bajo condiciones de calidad y excelencia. Generar programas para incentivar la cotutela con programas extranjeros. Intercambio de recursos humanos en el ámbito académico mediante una política de internacionalización. Analizar el rol de los magísteres, en especial los de tipo profesional. Creación de becas de posgrado regionales para que los gobiernos regionales prioricen contar con capital humano avanzado en áreas de relevancia en la región respectiva. Y, finalmente, reconocimiento del costo real de las actividades de posgrado e investigación en las universidades.
En este ámbito se plantea que el consejo de Ciencia, Tecnología e Innovación ha de ser un organismo esencial en la definición de políticas y estrategias, las cuales deben ser establecidas con la participación de los actores relevantes en estos asuntos: ministros, parlamentarios, representantes de los sectores científicos-tecnológicos y empresariales, universidades y regiones. 
En torno a la relación universidad-empresa, el documento reconoce lo avanzado hasta ahora, pero señala la necesidad de implementar nuevos programas como: formación para gestores tecnológicos; creación de Centros de Gestión e Innovación; creación de infraestructura especializada, y de equipamiento. 
La investigación necesaria para generar y aplicar conocimientos en C+T+I requiere de infraestructura, instalaciones e instrumental cada vez más complejo y de alto costo. La realidad es que si no se cuenta con estos insumos es imposible hacer investigación en la frontera del conocimiento.
