Centro cultural Estación Mapocho
Presentación de libro y exposición fotográfica
Más de 80 fotografías permiten visualizar el paso del tiempo en la exposición Álbum fotográfico Estación Mapocho 1905-2005: Cien años de historia, quince años de gestión Cultural, que se exhibe en el hall del Teatro Universidad. Ahí se pueden encontrar imágenes de su construcción en 1905, de su inauguración en 1913, de llegadas y despedidas de grandes personalidades y de su transformación en centro cultural en 1991.
El cuestionamiento acerca de quién debe ser el responsable de financiar la cultura es un tema absolutamente vigente en nuestra sociedad. El periodista y sociólogo Arturo Navarro, director del Centro Cultural Estación Mapocho y miembro del directorio nacional del Consejo de Cultura, asumió ese desafío que concretó en su libro Cultura, ¿quién paga? Gestión, infraestructura y audiencias en el modelo cultural chileno, que desarrolló durante el primer semestre de 2006 en la Universidad de Harvard en Estados Unidos y que presentó la semana pasada en nuestra casa de estudios.
La presentación del libro junto a una exposición de fotografías del Centenario de la Estación Mapocho –que se exhibe en el hall de acceso de Teatro Universidad- se enmarca dentro del convenio suscrito entre esa institución cultural y nuestra casa de estudios y que, en lo próximo, tendrá a la Orquesta Sinfónica y al Coro Universitario presentando el concierto Víctor Jara Sinfónico en ese centro cultural el 27 de diciembre.
El aporte medular del libro es su aproximación al modelo chileno, que es comparado con otros modelos del mundo, centrándose en los conceptos de gestión, infraestructura y audiencias, así como en otro aspecto importante del actual modelo chileno: los fondos concursables.
Se trata de un ensayo de 261 páginas, editado por Ril Editores, donde entrega detalles de la creación del Teatro Municipal, hace 150 años, hasta del Centro Cultural Palacio de La Moneda, en 2006, destacando además los elementos centrales de las nuevas políticas culturales.
Navarro identifica cuatro modelos en el sistema de financiamiento cultural: estado facilitador, estado ingeniero, estado arquitecto y estado patrocinador.
En este último, presente en Australia, Gran Bretaña y Canadá, el estado destina fondos a la cultura sin determinar a quién se le asignarán, lo que es labor de organismos que administran esos recursos. Este es el modelo que desde hace unos años se está tratando de implementar en Chile aunque, sostiene Navarro, también funciona bastante en nuestro país el estado facilitador, por ejemplo con la Ley de donaciones culturales.
A juicio del autor, existen tres componentes básicos del “modelo chileno de desarrollo cultural”: creación de audiencias, trabajo de gestión cultural y desarrollo de infraestructura.
La utopía es parte de la cultura nacional
La comunidad reclamada. Identidades, utopías y memorias en la sociedad chilena actual es la nueva obra de José Bengoa, docente colaborador del departamento de Sociología y Antropología de la Universidad, que fue presentado el jueves pasado en el auditorio Salvador Gálvez de la facultad de Ingeniería.
Numerosos han sido los libros que Bengoa ha publicado. Licenciado en Filosofía con estudios de posgrado en Antropología y Ciencias Sociales, sus principales campos de estudio han sido la historia y antropología de los indígenas y campesinos chilenos y latinoamericanos.
Rodrigo Herrera, director del departamento de Antropología, fue el encargado de dirigir la ceremonia, en la cual participaron Miguel Urrutia, docente de Sociología, y Susan Foote, profesora asistente del departamento de Idiomas Extranjeros.
Aprovechando la oportunidad Herrera elogió el trabajo de Bengoa, quien siempre ha procurado mantener una ventana abierta sobre la sociedad chilena. Reconoce que tiene una gran amistad con el autor, lo que influencia su percepción sobre el libro. “Este nos habla de la cultura, de cómo enfrentamos la diversidad cultural y cómo se ven plasmados ciertos factores de la identificación de la sociedad chilena”.
Además comentó que esta obra no busca mostrar grandes tesis, sino que intenta dibujar una suerte de radiografía, “de saber dónde estamos y por qué estamos donde estamos”. |