Luis Tapia
Formación y disciplina
Desde
la dirección Nacional de Fonasa busca mejorar la gestión
del organismo que está encargado de administrar el seguro
público de salud de más de 10 millones de chilenos.
Luis
Tapia Espinoza, ingeniero comercial con formación en economía,
aprovecha los fines de semana para escapar de las calles
santiaguinas, en las que confiesa desorientarse en ocasiones,
y disfrutar de las pistas de esquí que quedan a un par
de horas de camino hacia la cordillera. Las otras jornadas
las dedica a controlar las cotizaciones de los usuarios
de Fonasa desde la jefatura del subdepartamento de Recaudación
y Fiscalización de Cotizaciones de esa institución. En
1977 ingresó a Ingeniería Civil Metalúrgica y cuatro años
más tarde se cambió a la carrera de la cual egresó en
1988.
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¿Qué diría de la universidad?
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Básicamente me entregó una disciplina, una metodología
y la capacidad de análisis. Me permitió disponer de herramientas
de análisis más “macro”, elementos que permiten visualizar
procesos desde una perspectiva más amplia, una suerte
de gran angular.
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En resumen...
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Uno, el tema de formación, conocimiento. Dos, compartir
proyectos, me refiero al movimiento estudiantil. Es como
toma de conciencia, me refiero a conciencia social.
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¿Recuerda a algún profesor de esos años?
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Carlos Cáceres, excelente profesor, junto con Alvaro Larrañaga,
César Oyarzo. Yo diría que esos tres son los mejores profesores
que recuerdo.
Su
actividad profesional ha estado ligada al ámbito de la
gestión y control de procesos en la esfera pública. En
1993 asumió la coordinación del Proyecto Ciudades Sustentables,
un programa de cooperación entre Naciones Unidas y el
gobierno chileno, y en 1997 trabajó en la seremi de Bienes
Nacionales. Tiempo después fue asesor del director regional
del Serviu. Por opción o por oportunidad, en los últimos
años ha estado ligado al área de la salud.
En
2000 se hizo cargo del departamento de Estudios de la
División de marketing del Hospital Clínico de la Universidad
de Chile. “No se si situarla como opción, pero sí como
una suerte de especialización. Trabajar en el mejoramiento
de la gestión en el ámbito público, ésa fue mi experiencia
en Bienes Nacionales o en el proyecto de colaboración
con Naciones Unidas o en el Serviu”.
Hoy,
desde Fonasa, sostiene que la salud plantea una fuerte
exigencia hacia la institución para responder a los desafíos
que supone cumplir con los objetivos del Plan Auge.
Fonasa
es una parte dentro de ese sistema, pero, advierte, va
a cumplir un rol protagónico. “Fonasa de hace diez años
es bastante distinto al de hoy. Tiene estructuras más
flexibles, más adaptadas, con niveles de calificación
de personal exigente, con aprendizajes respecto de reprocesamiento,
rediseño de procesos, modelos de gestión, de planificación
estratégica, de exigencia de corto y largo plazo”.
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¿Como se logró eso?
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Todos reconocen que hay un cambio significativo a partir
de los años noventa. El equipo liderado en ese tiempo
por César Oyarzo, ex profesor de la Universidad, profesor
mío además, introdujo elementos económicos de gestión,
de mejoramiento de la administración interna, que situaron
ciertas definiciones respecto del rol de Fonasa. Dejó
de ser una simple tesorería, una instancia de intermediación
y control de recursos para asumir un rol de gestión o
mejoramiento de la satisfacción de los usurarios.
Erwin
Acevedo Ibáñez
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