Fotografía patrimonial: ancla de la memoria
A
través de la creación del Archivo fotográfico de la Universidad,
el departamento de Artes Plásticas busca proyectar un
espacio que fomente las actividades de investigación,
creación, cooperación y difusión tanto en el área fotográfica
como en otras complementarias.
En
la Sala Chile de la Biblioteca se ubica este archivo patrimonial.
La egresada del departamento de Artes Plásticas, Roxana
Torres, es la encargada de la conservación.
La
memoria histórica de nuestra Universidad, ciudad o, incluso,
familia, tiene en la fotografía uno de sus elementos más
perdurables, en la medida que se la conserve en condiciones
óptimas y responsables. Gracias a una fotografía es posible
conocer modos, costumbres y huellas de un pasado, en ocasiones,
lejano que por ausente parece inexistente. Sin embargo,
no sólo ahí radica su valor. También se la debe considerar
en cuanto a su particular articulación estética que la
define como un lenguaje en sí.
Fomentar
la valoración y cuidado de la fotografía, asumiendo la
responsabilidad urgente de garantizar la preservación
de un bien valioso y útil, es lo que hizo el departamento
de Artes Plásticas al definir “una serie de estrategias
tendientes a la formalización y sistematización de un
espacio especializado en el conocimiento y conservación
de fotografía patrimonial”.
La iniciativa se concretó gracias al proyecto de Creación
Artística Conservación y difusión del patrimonio fotográfico
de la Universidad de Concepción, propuesto por el departamento
de Artes Plásticas a la Biblioteca Central, y financiado
por la dirección de Investigación.
Físicamente
este archivo patrimonial fotográfico de la Universidad
está ubicado en la Sala Chile de la Biblioteca Central,
que cuenta con una importante colección fotográfica compuesta
por originales blanco y negro, albúminas, gelatinas y
negativos en placa de vidrio, de fines del siglo XIX y
gran parte del siglo XX; imágenes que resumen parte de
la historia humana y arquitectónica de la Universidad,
ligada estrechamente a la ciudad.
Actualmente,
el archivo se encuentra en una etapa de desarrollo inicial
abocado principalmente a saber cuál es el volumen de material
fotográfico disperso en la Universidad. Además, recibe
fotografías donadas o entregadas en préstamo o comodato,
para seguir construyendo este registro de nuestra memoria
visual.
Para
ello, existe una ficha de convenio donde se indica el
modo en que el archivo recibe las imágenes, teniendo en
cuenta que aquí sí que quedan bien cuidadas. El teléfono
del archivo es 204455 y el correo electrónico fotoudec@udec.cl
Conservar
y resguardar
Guantes
blancos de algodón se deben usar para revisar las fotografías
del archivo (que están guardadas en sobres especiales
confeccionados en papeles libres de ácidos) y así asegurar
su conservación en buen estado. Algunas de las imágenes
que han llegado al archivo han sido “deterioradas por
amor”; es decir, el afán cariñoso de mantenerlas e indicar
a qué corresponden, si no se realiza en las condiciones
adecuadas, puede afectar a las fotografías al adherírseles
materiales inadecuados o llenarse de una suerte de hongos
que van destruyendo las imágenes. Por eso es preciso un
manejo adecuado de ellas para que se mantengan en el tiempo.
Las
egresadas del departamento de Artes Plásticas, Claudia
Arrizaga y Roxana Torres, son las encargadas de trabajar
en este proyecto y, para ello, realizaron dos cursos de
capacitación en el Centro de Patrimonio fotográfico: Taller
de conservación de álbumes fotográficos y Manejo de colecciones
fotográficas patrimoniales. Mientras Roxana se ha especializado
en el tema de la conservación, Claudia se encarga de la
gestión, de manera de proponer actividades que permitan
transformar este lugar en un espacio donde se investigue
y desde el cual se difunda todo lo relacionado con la
fotografía.
Este archivo está inmerso dentro de una red de archivos
que son asesorados por el Centro Nacional de Patrimonio
Fotográfico, explica Claudia. Es que la conservación y
el resguardo de material fotográfico patrimonial constituye
un trabajo especializado cuyo objetivo esencial es prevenir
y, en lo posible, detener el proceso de deterioro de las
imágenes, conociendo y evaluando una serie de características
técnicas de los soportes, el estado de conservación y
las reacciones a los distintos medios en que están insertos.
A
juicio de los encargados de este archivo, el análisis
preliminar de las fotografías exige construir y equipar
un espacio de trabajo y depósito adecuados para la consulta
tanto de investigadores independientes como académicos
y estudiantes; control de factores ambientales determinantes
al momento de conservar (humedad, temperatura, polución,
luz, etc), y estrategias y medidas de regulación que protejan
los fondos fotográficos de la explotación y manipulación
inadecuada.
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