Instituto Austral de Verano
Estudios avanzados en Oceanografía

Con catorce alumnos -en su mayoría estudiantes de los posgrados en Oceanografía que dicta esta casa de estudios- la semana pasada se llevó a cabo el primero de los tres cursos del II Instituto Austral de Verano (Iav), iniciativa que se inserta en el convenio de colaboración entre la Universidad, Woods Hole Institute y Fundación Andes. La oceanografía física fue el tema elegido para esta versión, que se extenderán hasta el 1 de febrero.

Con el curso Procesamiento de datos obtenidos con un perfilador acústico de corrientes remolcado, el 5 de enero se dio inicio, en la Estación de Biología Marina de Dichato, a la segunda versión del Instituto Austral de Verano.

El investigador de la Universidad de Old Dominion (Estados Unidos), Arnoldo Valle-Levinson, tuvo a su cargo el primero de los cuatro cursos organizados para esta ocasión, que tuvo por objetivo introducir a los asistentes –estudiantes de posgrado en Oceanografía, profesionales nacionales y extranjeros– en el uso del perfilador acústico, un moderno equipo de apoyo a la investigación oceanográfica.

Valle-Levinson explica que el aporte de esta tecnología (que funciona a partir de emisiones de señales de sonido al mar) en las observaciones oceanográficas es su mayor resolución. “Es como pasar de mirar, en la célula, sólo su membrana, a ver el núcleo y todos sus organelos”, dijo.

La actividad partió con un crucero por la Bahía de Concepción, destinado a obtener datos sobre el movimiento de las corrientes en el área; base para el trabajo posterior del curso. El doctor Valle-Levinson explicó que con esto se perseguía que los participantes captaran y procesaran sus propios datos, porque ésta es, a su juicio, la mejor manera de conocer el manejo del instrumento y de aprender a leer la información obtenida. El investigador advierte que en la lectura de datos es imprescindible saber discriminar la diversidad de señales que obtiene el perfilador: hay que diferenciar en las corrientes, los factores que pueden estar forzando sus movimientos, lo que será determinante al momento de emitir juicios sobre las observaciones. Para el coordinador del convenio Universidad-Whoi-Fundación Andes, Víctor Ariel Gallardo, el Iav constituye una valiosa oportunidad para que los estudiantes de posgrado accedan a conocimiento de frontera en oceanografía y destacó que el primer curso permitió a los estudiantes familiarizarse con una tecnología que, en su opinión, podría configurar una disciplina específica de investigación oceanográfica.

En tanto, el coordinador de los cursos, Wolfang Schneider, resaltó que, a pesar de tratarse de una actividad restringida en el tiempo, el Iav es una importante contribución a la formación de recursos humanos, pues complementan los contenidos propios de los posgrados, al apuntar a materias específicas de la oceanografía.