Revista Panorama

CONCEPCION CHILE N. 397 

VIERNES 5 DE ENERO DE 2000

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Editorial
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Mario Ricardi
La Universidad es mi patria

Alguien dijo que la patria son los recuerdos de la infancia. Estoy de acuerdo. Los recuerdos de mi infancia son la Universidad de Concepción. Ahí está mi patria -señala con emoción- el economista Mario Ricardi Gans. Nació en el Hospital Clínico, vivió en las inmediaciones, jugó en los jardines y espacios del Barrio y estudió en la facultad de Economía. No era extraña esta gran cercanía, pues es hijo de un biólogo y académico de nuestro plantel, Mario Ricardi Salinas. Ambos debieron partir por obligación. Vuelve con frecuencia y su destino más importante es Concepción. Allá quedan amistades forjadas precisamente en el plantel, quienes recuerdan -y ya han perdonado- las bromas que el solía "brindarles" especialmente a sus compañeras.

Mario Ricardi (51,casado) es el jefe del departamento de Economía de la facultad de Economía de la Universidad de Los Andes, en Mérida, Venezuela. Conjuntamente ejerce docencia en el ramo Desarrollo Económico. Llegó a esta ciudad colonial, andina y donde la primavera no tiene nunca vacaciones hace 27 años. Su padre le había antecedido.

-¿Cómo recuerda sus años de estudiante?

-Como los años de la inocencia, cuando pensamos que podíamos cambiar el mundo. Mi época de estudiante fue bien bonita durante la cual se combinó de manera interesante aquello de estudiar y luchar en el sentido de querer cambiar una problemática social que estaba ahí, que nos cuestionaba. El resto fue, como le sucede a cualquier joven, estudios, amores, diversiones, fiestas. Nosotros perdimos una lucha es cierto, pero tuvimos un sueño, una utopía, ganas de jugárnosla por algo que era más colectivo que individual. Una de las cosas que me inquieta hoy es la apatía y excepticismo de los jóvenes, muchos de los cuales, no creen en nada ni en nadie. Una juventud sin sueños es una juventud perdida.

-Hábleme de su experiencia en la Facultad

- La Facultad era entonces muy nueva, no existía tradición académica alguna, comparándola con Biología o con Medicina. Con Economía sucedía lo mismo que con el resto de las Ciencias Sociales que recién se abrían paso. Sin embargo, existían profesores excelentes, que yo nunca he olvidado. Y lo dice alguien que no fue el mejor alumno. Hice ahí amigos de toda una vida como Daniel Santamaría, Juan Enríquez, Miguel Márquez, Germán Cayau, de nacionalidad boliviana, entre los más cercanos.

Respecto a las universidades de Los Andes y de Concepción ¿Cómo es la comparación?

- La Universidad de Los Andes tiene 32.000 alumnos, es más grande que la nuestra, y más antigua tiene 200 años, pero está también, al igual que la de Concepción situada entre las cinco más importantes del país, lo mismo que la Universidad de Concepción. Son dos universidades que han debido legitimarse frente a las universidades de la capital, que en países con mentalidad centralista, es un esfuerzo importante. Son en definitiva, grandes universidades de provincia. Yo tengo más de la mitad de mi existencia ligada a ella. Terminé mis estudios, me recibí, me convertí en un excelente estudiante porque estaba mi sobrevivencia en juego. Seguí como ayudante, instructor, profesor titular y director del departamento. ¡Así como voy puedo llegar a ser rector! (bromea con el buen humor que no le ha abandonado ni en los peores momentos de su vida). Me quedé porque la vida es agradable, aunque en la Universidad, como académico, uno tiende a aislarse en una especie de torre de márfil.

Así las cosas están dadas para gestionar, por ejemplo, convenios ¿no le parece?

- Existe la voluntad de hacer convenios, porque se trata de universidades, como ya te contaba, con problemas y ventajas similares. Me interesa personalmente seguir buscando ese intercambio especialmente entre alumnos. Nosotros recibimos estudiantes ingleses, franceses y alemanes y por qué no recibir chilenos y más especialmente penquistas.

-¿En qué área de su especialidad, por eiemplo, sería factible?

-En Economía Regional, la facultad de Economía ha hecho cosas interesantes de la cual nosotros en Mérida podríamos aprender, sobre todo en un país como Venezuela altamente centralizado Yo diría que Concepción lleva la batuta en el tema descentralización en todos los ámbitos del quehacer. Personalmente tengo trabajos de investigación en el tema de la pobreza en Venezuela y en Economía en Educación que hemos desarrollado bastante éxitosamente.

-¿Por qué en América Latina sigue aumentando las cifras de pobres, según las estadísticas?

- Hay un problema central que es la forma desigual como se reparte el ingreso. El sistema económico supone que ciertos niveles de desigualdad favorecen el desarrollo económico. Eso no es así en las economías europeas más desarrolladas, como Suecia o Dinamarca, donde el crecimiento económico se da en un marco muy igualitario. Es criterio conspira en el caso de Chile donde las desigualdades son demasiado evidentes, hay balnearios de lujo propio de países desarrollados que conviven con bolsones de pobreza. Venezuela no es la excepción en el continente, pese a los altos de ingresos del petróleo, porque exhibe, por ejemplo un alto índice de fuga de capitales.

Mónica Silva A.