La evaluación de los logros de los estudiantes en el proceso de
enseñanza-aprendizaje es una de las tareas más delicadas y complejas que debe enfrentar
el docente. Consciente de esta realidad y con el propósito de entregar una herramienta de
apoyo a los educadores, el académico de la facultad de Educación y especialista en
evaluación, Juan Domingo Santibáñez, se embarcó en el proyecto de elaborar el Manual
para la evaluación del aprendizaje estudiantil. La obra acaba de ser publicada por
Trillas -una editorial mexicana con presencia continental- y ya se encuentra a la venta en
las principales capitales sudamericanas. De esta manera, el libro de Santibáñez se
convierte en el primer trabajo de un académico de la facultad de Educación publicado en
el extranjero.
El texto de 273 páginas -uno de los pocos trabajos técnicos en evaluación orientados
específicamente al quehacer docente- concentra todos los elementos para la compresión
del marco teórico en el que se sustentan las prácticas evaluativas.
Es una fuente de referencia vital para
estudiantes de pedagogía y de posgrado en educación así como para profesores en
ejercicio, pues abarca diversos campos de conocimientos asociados a la evaluación de
aprendizajes.
El texto está compuesto por 14 capítulos que se distribuyen en tres partes. La
primera, dedicada a los conceptos fundamentales del proceso evaluativo, hace una revisión
de la medición y evaluación educativas, los enfoques sicométrico y edumétrico, las
funciones de la evaluación en un modelo de logros; comportamiento y aprendizajes
estudiantiles y objetivos educacionales.
La segunda parte aborda los procedimientos para medir y evaluar comportamientos
estudiantiles. Allí, Santibáñez hace una clasificación y caracterización de pruebas
escritas y orales y se refiere a otras técnicas (como la observación) para evaluar
comportamientos de aprendizajes.
El análisis y la interpretación de los resultados de la evaluación son los temas de
que se ocupa la tercera parte. A través de los últimos cinco capítulos se analizan los
conceptos de validez, confiabilidad y objetividad aplicados a los instrumentos de
evaluación, concluyendo con una vista a los procedimientos para calificar aprendizajes.
Cada uno de los 14 capítulos concluye con un cuestionario que tiene por propósito
facilitar la comprensión de las materias tratadas y que encuentran respuesta en la
última parte del libro que comprende, también, una extensa referencia bibliográfica.