APOYO A LA INFRAESTRUCTURA CIENTÍFICA DE CENTROS Y GRUPOS DE INVESTIGACIÓN
La Universidad se adjudicó
tres iniciativas presentadas
al primer concurso de
Apoyo a la infraestructura
científica de centros y
grupos de investigación,
convocada por el programa
de Investigación Asociativa,
PIA, de Conicyt.
El objetivo principal de este concurso
es fomentar el desarrollo
científico y tecnológico del país,
mediante el apoyo financiero a la
adquisición de infraestructura científica
y tecnológica para centros y
grupos de investigación financiados
por Conicyt.
Para Bernabé L. Rivas, vicerrector
de Investigación y Desarrollo, el
avance de la ciencia y tecnología
depende de los recursos humanos,
de los laboratorios e instrumentos,
y de la capacidad para utilizarlos
en forma efectiva.
En la adquisición de equipos científicos
denominados mediano-mayor
en cuanto a su costo, ha habido
previamente importantes apoyos
de parte de fuentes como el BID,
MECESUP y Agencias extranjeras.
En ese contexto, el concurso de
Apoyo a la infraestructura científica
de centros y grupos de investigación
financia la compra de equipamiento
científico o tecnológico
nuevo, que tenga por objeto reemplazar
equipamiento obsoleto,
o la adquisición de equipamiento
no preexistente. También podrá
financiarse infraestructura científica
tecnológica como, por ejemplo,
nuevos laboratorios destinados a
análisis específicos.
Señalando que para la Universidad
de Concepción es de vital importancia
que sus investigadores cuenten
con equipamiento de frontera,
Rivas destaca el fuerte apoyo de
nuestra casa de estudios a la postulación
de proyectos que significó
finalmente la aprobación de 3 iniciativas
lideradas por investigadores
de nuestra Universidad, por un
monto de $ 439.274.522 -el 16 %
del monto total de los casi M$3.000
destinados para ese fin-, a lo que
debe agregarse el correspondiente
al Centro Regional, Centro de Investigación
de Ecosistemas de la Patagonia, CIEP, en colaboración
con la Universidad Austral de Chile.
Rivas destaca además que en este
concurso no eran exigibles recursos
financieros de la contraparte
Institucional y que en el caso de
nuestra casa de estudios fueron
entregados a tres centros basales
y un centro de investigación regional. “Estos equipos constituyen un
significativo aporte al desarrollo de
la investigación de estos Centros
de excelencia de nuestra Universidad”,
señala el vicerrector de I+D.
Las propuestas ganadoras fueron
Observatorio Biogeoquímico para
los canales y fiordos de la Patagonia
chilena, por un total aproximado
de $140.000.000 y cuyo director
es Carlos Moffat perteneciente al
programa Copas Sur-Austral; Modernización
de Laboratorio de Cromatografía
de Gases mediante la
incorporación de un cromatógrafo
de gases acoplado a espectrómetro
de Masa/Masa (GC-MS/mS), de un
monto aproximado de $150.000.000
y dirigido por Dietrich von Baer, del
Centro Científico y Tecnológico de
Excelencia (CCTE) UDT, y Embarcación
para observación oceanográfica
de fiordos y canales con base
en Canal Baker y Tortel, con un
total aproximado de $150.000.000
y dirigido por Fabián Tapia, profesor
asociado del departamento de
Oceanografía e investigador del
programa COPAS Sur-Austral.
EMBARCACIÓN CONSTRUIDA
EN CHILE
En este último proyecto, el programa
COPAS Sur-Austral (CSA),
orientado a la investigación oceanográfica
aplicada que contribuya
al desarrollo sustentable de la Patagonia
chilena, propuso adquirir
una embarcación equipada para
estudios oceanográficos en fiordos
y canales, y con base permanentemente
en la localidad de Caleta
Tortel, cerca de la desembocadura
del río Baker.
El director de la iniciativa, Fabián
Tapia, explica que dicha embarcación,
que primariamente reforzará
el trabajo de la Línea 3 del CSA
(referida a variabilidad ambiental
y pesquerías demersales y bentónicas),
tendrá un impacto transversal
sobre todas las líneas de investigación
del centro. Esta nueva
plataforma de trabajo contará con
el instrumental científico, la habitabilidad,
y el equipamiento de navegación
y comunicaciones necesarios
para desarrollar investigación
de excelencia a todo lo largo del
Canal Baker.
Tapia explica que la embarcación
se construirá en Chile, y que más
que un barco, se trata de una lancha
grande, con una eslora de 10,3
metros y cabina en la proa, con
capacidad para 3 a 4 personas, y
equipada con todos los instrumentos
necesarios para la navegación
segura en los canales, incluyendo
comunicación satelital. Además,
dice, tendrá a bordo equipos esenciales
para el desarrollo de monitoreos
hidrográficos y biológicos en
todo el rango de profundidad encontrado
en el canal Baker, y que
puede alcanzar los 600 metros en
algunos sectores. La embarcación
contará con un winche provisto de
cable conductor, un perfilador hidrográfico
y muestreador de agua
(llamado roseta-CTD) con sistema
de transmisión de datos en tiempo
real, y una red para muestreo de
plancton a profundidades específicas.
A juicio del investigador, contar
con una embarcación dedicada al
monitoreo oceanográfico basada en
Caleta Tortel representaría un salto
cualitativo en el tipo de investigación
que es posible realizar en el área, reduciendo además los costos
asociados a desarrollar futuros proyectos,
aumentando la cobertura y
resolución espacial-temporal de
las observaciones, y mejorando las
condiciones de trabajo y seguridad
de los investigadores y estudiantes
asociados a esta y otras líneas de
investigación del COPAS Sur-Austral.
INVESTIGACIONES DE ALTO
NIVEL
El proyecto Modernización de Laboratorio
de Cromatografía de Gases
mediante la incorporación de un
cromatógrafo de gases acoplado a
espectrómetro de Masa/Masa (GCMS/
mS), considera la adquisición
de un sistema de cromatografía de
gas capilar acoplado a un espectrómetro
de masa/masa en tandem
del tipo triple cuadrupolo con accesorios
menores, además de un
sistema de climatización, respaldo
de suministro eléctrico y readecuaciones
en el laboratorio en que
será instalado, en el departamento
de Análisis Instrumental de la facultad
de Farmacia.
A juicio de su director Dietrich von
Baer, esto permitirá reemplazar un
sistema GC-MS de cuadrupolo simple
que tiene 14 años de uso y es
apto para aplicaciones más rutinarias,
el cual será relocalizado en el
laboratorio de Cromatografía de la
Unidad de Desarrollo Tecnológico,
UDT.
La propuesta se vincula con una serie
de proyectos Fondef y Fondecyt
ligados a la industria vitivinícola,
de obtención de biocombustibles y
de productos fitoquímicos.
Según von Baer “la puesta en marcha
del sistema GC-MS/MS propuesto
permitirá lograr un avance
para seguir incursionando en investigaciones
científicas de alto nivel
en el área de la cromatografía, con
especial énfasis en lo relativo a
analítica de compuestos apolares
de interés en biomasa. Con ello se
podrá fortalecer la investigación
conjunta con las
distintas áreas de la UDT, que ya ha
sido muy fructífera en los últimos
años en términos de proyectos concursables
captados y publicaciones
conjuntas generadas, en particular
en el área de productos químicos,
brindando también apoyo analítico
avanzado al área de biocombustibles”.
Con ello, asegura, se abrirán
nuevas líneas de investigación
y se podrá postular en mejores
condiciones a nuevos proyectos
concursables externos, tanto de
desarrollo analítico como de corte
tecnológico.
Además de la UDT, apoyaron esta
postulación como futuros usuarios
del instrumental adjudicado, investigadores
de las
universidades de Talca, del Biobío,
Católica de la Santísima Concepción,
de los Centros de Biotecnología
y de Ciencias Ambientales EULA
y de las facultades de Farmacia y
de Ciencias Naturales y Oceanográficas
de la Universidad de Concepción.
INFORMACIÓN PARA LEGISLACIÓN
AMBIENTAL
También asociado al programa de
financiamiento basal Copas Sur
Austral, el proyecto Observatorio
Biogeoquímico para los canales
y fiordos de la Patagonia chilena
propone fortalecer la línea 4 de
Copas, investigación ambiental e
innovación biotecnológica para la
sustentabilidad de la acuicultura,
a través de la adquisición de equipamiento
necesario para instalar
un observatorio oceanográfico y
biogeoquímico automatizado en
el fiordo Reloncaví, región de Los
Lagos.
Esta línea tiene como objetivo generar
conocimiento transferible
sobre las condiciones biológicas y
ambientales que contribuyen a fenómenos
como el afloramiento de
algas nocivas y la dispersión de enfermedades
de peces. Un aspecto
clave a desarrollar para lograr este
objetivo, explica el director del
proyecto, Carlos Moffat, es implementar
plataformas de monitoreo
ambiental multiparámetro, que registren
y reporten en forma continua
las condiciones hidrodinámicas
y físico-químicas en la columna de
agua, y que sirvan como insumos
para la generación de sistemas de
alerta temprana en fiordos y canales
de la Patagonia chilena.
En ese contexto, el sistema que se
planea adquirir, e instalar en las
cercanías de Cochamó, en el fiordo
Reloncaví, consiste en una plataforma
modular equipada con un
perfilador acústico de corrientes
(ADCP) y sensores para el registro
continuo de temperatura y salinidad
del agua, oxígeno disuelto,
turbidez y concentración de clorofila
en el agua, concentración de
nitrato y materia orgánica coloreada
(CDOM).
Para la transmisión de datos a un
servidor localizado en el PFB-CSA, la plataforma cuenta con un sistema
dual de transmisión de datos,
que puede conectarse a redes de
telefonía celular cuando estén
disponibles, o a la red satelital
Iridium, en casos de aislamiento
geográfico extremo y nula conectividad.
Moffat explica que el sistema
incluye además una estación
meteorológica capaz de medir datos
de viento, temperatura, humedad
relativa, presión atmosférica
y precipitación. Los datos, agrega,
serán publicados en una plataforma
web que permitirá el despliegue
interactivo de la información
generada, y su distribución a potenciales
usuarios.
A juicio del investigador, esta iniciativa
constituye una excelente
oportunidad de interacción entre
la institucionalidad pública y la
academia para generar criterios
técnicos y protocolos de observación
de vital importancia en la
generación de la reglamentación
ambiental requerida en el futuro
inmediato, y para el desarrollo de
una red de monitoreo oceanográfico
que no sólo sirva a la fiscalización
ambiental de la industria
acuícola, sino además contribuya a
generar información esencial para
futuros modelos predictivos y de
alerta ambiental temprana en la
región Sur-Austral de Chile.
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