SOCIEDAD DE BIOLOGÍA RECONOCE A DIRECTOR DEL LIB
Con su participación –como
investigador principal o co
investigador- en variados
proyectos financiados por
Fondecyt, Proyectos Basales
e Iniciativa Científica Milenio,
y una alta productividad
reflejada en un importante
volumen de publicaciones,
Pauchard fue reconocido por
la Sociedad de Biología de
Chile como Científico Joven
más Destacado 2011.
A pesar de que cree que en nuestro
país aún existen limitaciones
para hacer investigación, Aníbal
Pauchard ha logrado construir una
carrera científica exitosa, la que
inició a comienzos de 2000 cuando
realizaba sus estudios de doctorado
en la Universidad de Montana
(Estados Unidos).
Con su participación –como
investigador principal o co
investigador- en varias iniciativas
financiadas por Fondecyt, Proyectos
Basales e Iniciativa Científica
Milenio, y una alta productividad
reflejada en un importante volumen
de publicaciones, Pauchard fue
reconocido por la Sociedad de
Biología de Chile como Científico
Joven más Destacado 2011.
La distinción es entregada todos
los años por la Sociedad y el Grupo
Bios con el fin de incentivar la
investigación entre científicos, de
hasta 38 años, residentes en el
país.
Ingeniero forestal formado en esta
Universidad y doctor en Ecología y
Conservación, Pauchard ha centrado
su actividad científica y de
docencia en las áreas de invasiones
de plantas exóticas, conservación
de biodiversidad y manejo y diseño
de áreas protegidas.
Es director del Laboratorio de
Invasiones Biológicas (LIB) de la
facultad de Ciencias Forestales,
investigador adjunto del Instituto de
Ecología y Biodiversidad, y profesor
adjunto de las universidades de
Montana y Estatal de Carolina del
Norte.
“(Este premio) confirma que los
múltiples esfuerzos personales
y de mi grupo de trabajo van en la dirección correcta. Además,
demuestra que es posible hacer
ciencia de alto nivel en el área
de la ecología en Chile”, afirmó el
investigador.
COOPERACIÓN
Dice que no hay una fórmula única
para lograr éxito en ciencia, pero
en su caso ha sido fundamental la
asociatividad nacional e internacional.
“En el plano nacional, hemos colaborado
con colegas de la misma
Universidad de Concepción, pero
también de otras universidades a
través del Instituto de Ecología y
Biodiversidad. Así se aumenta la
masa crítica al momento de postular
a proyectos y se generan mejores
ideas. En lo internacional,
he participado en diversas redes
de investigación y siempre le he
dado mucha importancia a los congresos
y talleres en el extranjero
y a trabajar con colegas extranjeros.
Incluso he escrito papers en
colaboración sin conocer personalmente,
sólo vía email, a los investigadores”.
Otro elemento importante, agrega
el jefe de la carrera de Ingeniería
en Conservación de Recursos
Naturales, es la ayuda de los
estudiantes y los profesionales
del laboratorio que dirige, que –afirma- es fundamental para
realizar un trabajo de calidad. Y
por, último, está lo que denomina
la plataforma UdeC, “que permite
libertad de pensamiento y
flexibilidad académica”.
En relación a la investigación en sí,
señala que la clave es la consistencia:
no se trata de llevar la especialización
al límite, pero sí focalizarse
en un par de buenas ideas.
VENTAJAS COMPARATIVAS
Por otro lado, agrega que es importante
preguntarse qué es lo nuevo
que se puede aportar desde Chile y
cuáles son las ventajas comparativas
que ofrece el país. “En ecología
y conservación hay ciertas ventajas,
por la relativa naturalidad de
nuestros ecosistemas y porque hay
pocos ecosistemas como éste en
el hemisferio sur (Nueva Zelanda,
Australia y Sudáfrica)”.
Aunque su principal interés son
las invasiones biológicas como
amenaza a la biodiversidad,
también ha trabajado el tema de
las áreas protegidas como una
solución a la crisis que hoy afecta la
sustentabilidad de los ecosistemas.
Y desde esa perspectiva, señala que
en esto a Chile le falta mucho, “no
desde el punto de vista académico,
sino desde la aplicación de estos
conceptos”.
En su opinión, existe una alta
divergencia entre ciencia y
aplicación. “Incluso pareciera que
los informes que el Estado solicita
para una determinada materia, no
son considerados en la toma de
decisiones, por ejemplo respecto
al cambio climático”.
Por eso le preocupa lo que pueda
ocurrir en la discusión en el Senado
de la ley que crearía el Servicio
de Biodiversidad y Áreas Silvestres
Protegidas.
“Creo que estas iniciativas debieran
tener una mayor prioridad para el
país si realmente queremos dejar
el subdesarrollo”.
De ahí que insista en la falta de
aplicación de la ciencia, que –a
su juicio- es uno de los grandes
problemas en la conservación de la
biodiversidad.
“Un solo ejemplo: se sabe que la
mayor biodiversidad del país está
entre la cuarta y décima regiones,
pero ésta es la zona con menos áreas protegidas y poco se ha
hecho para revertir esta situación.
Es más: es en esta área donde cultivos
agrícolas y forestales y las
actividades mineras, entre otras,
van reemplazando crecientemente
nuestros ecosistemas nativos”.
|